Esta pistola pedirá refuerzos automáticamente si se dispara o se queda sin balas

Si hoy en día todo está más que conectado al Internet, ¿por qué no una pistola? La empresa californiana Yardarm ya lo está haciendo con su tecnología que permite integrar un chip con su red de datos en la culata de una pistola destinada a la policía.

Ese chip puede enviar información del momento en que una pistola se dispara, dónde ha ocurrido el incidente e incluso dispone de información sobre la cantidad de balas que contiene. En el futuro, la pistola será incluso capaz de recoger la información de hacia dónde se está apuntando en tiempo real.

El consumidor no la quiere, la policía aspira a usarla

Esos datos del funcionamiento en tiempo real de una pistola es una información muy valiosa que puede enviarse directamente a la policía o ser consultada en un smartphone, por lo que la acogida a nivel doméstico en EEUU ha sido nula. Sí que parecen más interesados los responsables de la policía y militares de cara a disponer de información relevante que ayude a resolver de forma rápida y con un menor coste las investigaciones que se pudieran derivar de una acción concreta de los agentes.

La tecnología ya la están probando a nivel interno y en entrenamientos diferentes cuerpos de policía en EEUU, con posibilidad de que en caso de que una pistola se dispare, el sistema sea capaz de reaccionar de forma inmediata enviando refuerzos al lugar exacto. Yardarm empezará la comercialización tanto del hardware como del software para mediados del año que viene.

Tecnología polémica en las armas de fuego

Si la privacidad es un tema que nos preocupa, imaginad cuando se asocia con un arma de fuego y la posibilidad de conocer qué se está haciendo con ella en todo momento. La tecnología no está siendo precisamente bienvenida en este campo, y de hecho resulta incluso peligrosa.

Lo más mediático hasta ahora ha sido Liberator, la pistola que se puede fabricar con una impresora 3D y para la que de hecho se han creado incluso balas especiales que potencian todavía más su peligrosidad.

Más información | Yardarm.