Junto con el seguro iPhone 7, Apple podría presentar mañana la segunda generación de su reloj avanzado. Este posible nuevo Apple Watch respondería a la idea habitual de las versiones "s" de sus smartphones, es decir, pequeñas mejoras hardware acompañadas de nuevo software pero sin excesivos cambios a nivel de diseño y apariencia. Mantener la compatibilidad con la extensa gama de correas que han conformado en los últimos meses parece prioritario, aunque siendo Apple podemos esperar cualquier cosa al respecto.
Como pasó con el teléfono de Apple, toca repasar para vosotros todo lo que se ha rumoreado y se sabe hasta ahora del nuevo Apple Watch a un día de que pueda ser una realidad. Vamos con ello.
Más deporte, llega el GPS
Con Fitbit en lo más alto de la lista de fabricantes de wearables, y habida cuenta de que uno de los usos principales de este tipo de dispositivos es el de cuantificar y acompañarnos en las actividades físicas, el nuevo Apple Watch podría estar fuertemente reforzado en el campo del deporte.
El rumor más repetido y lógico nos indica que el Apple Watch que veríamos mañana llegaría al mercado con la gran novedad de la inclusión de conectividad GPS entre sus características. Con este añadido el Apple Watch se reforzaría en el campo de la cuantificación deportiva al tiempo que ganaría independencia respecto del teléfono.
La llegada del GPS sería un grave problema para la autonomía de casi dos días de la que disfruta ya el Apple Watch en la actualidad. Por ello es lógico que esperemos una mejora en la capacidad de la batería de hasta el 35% pese a que podría reducir el grosor el equipo. Si no llega al día incluyendo alguna sesión con el GPS activo, no hay avance.
Esa faceta deportiva reforzada también necesita de una mejor resistencia al agua y el sudor. Y sería una de las modificaciones que este posible Apple Watch 2 o Watch S traería consigo. Lo ideal sería ver que es posible usarlo en sesiones de piscina y natación, pero no creo que pasemos del perfil IP68, que por otro lado supondría un gran avance respecto al modelo actual.
Más veloz, nuevo Watch OS
La renovación del interior del nuevo Apple Watch tendría otro protagonista: un procesador más capaz. Este paso adelante sería el complemento adecuado para la llegada de Watch OS 3, el cual se estrenará previsiblemente con el nuevo reloj y donde Apple no paró de insistir en que se mejoraría la velocidad de ejecución de las aplicaciones, una verdadera pesadilla en los Apple Watch actuales.
No podemos esperar el anuncio y disponibilidad de la nueva versión del sistema operativo del reloj de Apple sin que haya hardware relevante que lo acompañe. Con ella ya vimos que quedaba de manifiesto que la actividad diaria ganaría en importancia: más datos, más integración con terceros, más watchfaces de información de la actividad diaria y posibilidad de compartir y competir con amigos.
Sobre qué precio tendría el nuevo Apple Watch, si Apple quiere realmente reforzar su posición, sería todo un acierto que el modelo básico no superara por mucho los 300 euros. Mañana saldremos de dudas.
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