Desde luego, los docks para iPod que salen al mercado cada día son más raros. Si ayer veíamos uno que era una silla, el de hoy no sabría casi ni como describirlo. Como dice mi compañero Pedro, una "pelota entre dos semiesferas".
De nombre, Miuro su particularidad es que cuando suene la música se pondrá a bailar, gracias a la ruedas laterales.
Con un precio que asusta bastante, unos 725 euros, se venderá en cuatro colores distintos: blanco, rojo, amarillo y negro. Desde luego, diferente a los otros docks que hemos visto si que es.
Vía | Applesfera.