Apple ha puesto punto y final a las fundas para iPhone 'FineWoven', un material trenzado y sintético que llegó con los iPhone 15 y muere con los iPhone 16.
Por qué es importante. Hasta un gigante que prioriza el diseño como Apple puede equivocarse al hacer cambios motivados por la sostenibilidad: este era el reemplazo de las fundas de piel. Cada funda costaba 69 euros.
En detalle. Estas fundas se presentaron como un material sostenible hecho con un 68% de contenido reciclado. Desde el inicio, muchos avisamos de que era frágil y tenía tendencia a ensuciarse, dudando seriamente de que fuese a mantener un mínimo buen aspecto con el tiempo. El paso de los meses lo confirmó: su aspecto era infame.
En la presentación de los iPhone 16, Apple no introdujo nuevas fundas FineWoven y tampoco hizo mención alguna a ellas. Mantiene a la venta, eso sí, dos productos hechos con este material:
- La cartera MagSafe para el iPhone.
- El llavero para el AirTag.
Presumiblemente están liquidando stock y cuando se acabe dejarán de existir. Los rumores sobre la decisión de Apple vienen de abril.
Entre líneas. Apple parece haber reconocido de forma pasiva su error con estas fundas. Su intención buscando alternativas a la piel es loable, aunque la ejecución ha fallado. Parece complicado encontrar calidad premium en alternativas sostenibles.
Las fundas de silicona y plástico transparente siguen siendo las opciones oficiales de Apple.
Y ahora qué. Los compradores del iPhone 16 no tienen una opción de funda oficial "vegana" y premium, tendrán que buscar opciones en otras marcas.
Apple, por su parte, debe estar replanteándose su estrategia de accesorios. Si esto ha ocurrido con las fundas del iPhone, carteras y llaveros correrán la misma suerte con mucha probabilidad.
Los esfuerzos en sostenibilidad son loables, pero no tiene sentido si llega a costa de una calidad pésima.
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