Mientras se le encuentra una utilidad que justifique su precio, el smartwatch nos deja la sensación de que ha venido por ahora a resolver un problema que todavía no se tenía. Precisamente por eso estoy convencido de que su salto a la muñeca de los consumidores está tratando de realizarse por medio del diseño, del primer vistazo.
Tras desterrar casi por completo el reloj de pulsera clásico, el smartwatch lo recupera. Incluso de forma muy agresiva, como es el caso del nuevo LG Watch Urbane, un smartwatch que si no te dijéramos que es avanzado, podría pasar perfectamente por un modelo clásico la mar de elegante y tentador.
Motorola Moto360 y el reloj futurista
El primero que dejó claro que en la batalla por nuestra muñeca el diseño tenía mucho que ver fue el Moto360. Su elección del formato circular y con toque muy tecnológico le ha valido no solo el reconocimiento entre el usuario (en Xataka se llevó el premio 2014 a mejor smartwatch) sino que ha sido el líder del año pasado en ventas.
Este reloj avanzado arrancó su andanza con problema de duración de batería pero con el paso del tiempo hemos visto que tampoco sus rivales le han podido sacar una ventaja considerable en ese apartado como para compensar su gran atractivo visual. Ya se puede encontrar por 199 euros.
LG G Watch y el toque clásico
Tras un primer intento con forma cuadrada, LG tuvo pronto claro que el formato clásico era la elección ganadora en su caso. El LG G Watch quedará como uno de los smartwatch mejor diseñados del año pasado, con el toque diferente de una esfera con números que recuerda completamente a la apariencia de un reloj clásico.
Precisamente esa es la idea que persigue el nuevo LG Watch Urbane, con correas de piel, acabado metálico en dorado o plateado e incluso la corona. Habrá que ver el precio del nuevo modelo. Mientras, el anterior está por 229 euros.
Sony y el deporte
El pionero en esto de los relojes avanzados no ha tenido la relevancia a nivel de diseño que LG o Motorola. Pero eso no quita que el Smartwatch 3 sea uno de los modelos con Android Wear más completos del mercado, pero con marcado carácter deportivo si nos fijamos precisamente en su diseño, a lo que no ayuda un sistema de correas que, la contrario que buena parte de sus rivales directos, es propietaria.
Quizás consciente de que en el mercado por ahora parece que triunfa otro estilo, el Smartwatch 3 ya tiene una versión con un diseño mucho más cuidado y acabado metálico que ciertamente luce genial. Ahora mismo, el modelo deportivo tiene un precio bastante tentador: 186 euros.
Samsung no se casa con nada pero le va la curva
Como es habitual en la firma coreana, su smartwatch no se casa con nadie y con hasta seis modelos en un solo año, hay para elegir. Curiosamente, entre los modelos más deportivos y de pulsera como el Gear Fit (ya por solo 125 euros) o elegantes como el Gear Live, no hay ninguno con diseño redondo.
La elección para el futuro nos dejará seguro un smartwatch de Samsung redondo, seguramente en el próximo MWC 2015 lo conozcamos, pero por ahora, como con los televisores, a Samsung le gusta mucho más la curva, aunque ello implique que con sus 350 euros, sea el modelo más caro de todos los que se pueden comprar ahora mismo.
¿Y el Apple Watch
A unas semanas de que el Apple Watch sea una realidad en los escaparates, su enfoque parece que va más encaminado hacia el objeto de moda. A nivel de diseño es el único que da la opción de tener dos tamaños, y a nivel de acabado y apariencia Apple jugará con algo que siempre le da buen resultado: los accesorios.
Sus correas y diferentes configuraciones de materiales, especialmente en la parte alta, le permitirán jugar tanto en la liga de los que se enfocan en el aspecto deportivo, como en los que buscan un reloj de apariencia más clásica, aunque no conseguirá la misma fidelidad que los smartwatch de formato circular.
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