Son varios los fabricantes que están trabajando en conseguir la miniaturización de los proyectores, de forma que estos se conviertan de un trasto voluminoso y pesado, como son ahora, en algo ligero y fácilmente transportable, lo que seguro que agradecen ejecutivos y comerciales que tengan que realizar muchas presentaciones.
Y si el Mint V10 se presentaba como el más pequeño de los proyectores autónomos (es decir, no requiere un ordenador, sino que incluye un lector de tarjetas de memoria de donde leer el contenido) el LG HS102G tampoco le va a la zaga.
En este caso nos encontramos con un dispositivo algo más grande, doblándole en ancho, pero que sigue siendo bastante portable gracias a su reducido peso, 780 gramos, con unas medidas de 15.4 x 11.7 centímetros. A cambio, tenemos una proyección mucho más grande, que puede llegar hasta las 80 pulgadas.
La luminosidad del LG HS102G es de 160 lúmenes y su ratio de contraste de 2000:1. No está pensado, por tanto, para usarlo a la luz del día, pero tampoco requiere oscuridad completa. Su precio, al cambio, es de unos 500 euros, más que aceptables por sus prestaciones.
Vía | i4u.