A medio camino entre las cámaras de consumidor de gran calidad y las profesionales, Sony ya tiene en el mercado una nueva videocámara que hará las delicias de los aficionados a hacer sus pinitos con las imágenes en movimiento a un nivel medio-alto. Si pudiéramos pagarla. Costará del orden de los 3.000 euros.
La Sony Handycam FX1000 es un sueño que sale a la venta en octubre y que presenta una nueva lente, la G Lens, que promete mucha más claridad y definición en las imágenes que toma. Además, es un modelo con un angular de 29.5 mm, lo que nos dará una mayor amplitud de grabación sin tener que alejarnos del motivo a grabar, y viene con zoom óptico de 20 aumentos.
De esta nueva videocámara FX1000 no esperes que grabe vídeo en tarjetas de memoria o en disco duro. Se usan cintas HDV para almacenar las imágenes que toman los tres sensores CMOS ClearVid, con mayor sensibilidad y que viene acompañado de un procesador de imagen Exmor. El conjunto de sensor, lente y procesador nos deja grabar con una luminosidad de solo 1.5 lux, que está realmente bien.
Si añadimos los controles manual o el anillo individual para enfoque y otro para zoom, la capacidad de creación tiene pocos límites. Se graba además a 25p.
La pantalla para controlar el proceso (contamos también con un visor electrónico) es de 3.5 pulgadas y de alto contraste.
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