JVC ha presentado esta semana una serie de nuevos televisores entre los que vamos a hacer notar un par de ellos por las peculiaridades que presentan. Por un lado tenemos un modelo que afirma ser el más delgado del mercado de tipo LCD, y por otro, una extravagante pantalla con dock o base para el iPod de Apple o el más moderno iPhone. Un accesorio un poco caro la verdad, y me refiero al televisor.
Nos centramos en el más interesante, el nuevo televisor de JVC que viene en dos tamaños: 42 y 46 pulgadas, y que presumen de un grosor mínimo de 39 mm y un máximo de 74 mm, que no está nada mal. Pienso ahora en los viejos equipos de tubo y su profundidad y lloro.
El grosor tan reducido ha sido posible gracias al desarrollo por parte de JVC de un nuevo sistema de retroiluminación mucho más delgado y que además también consigue reducir el consumo de los equipos.
Estas nuevas pantallas por lo demás son bastante tradicionales, aunque debemos mencionar como buenas características sus tres puertos HDMI, además de los precios, que se sitúan en 1.200 y 1.500 euros. Son equipos con panel de 1080p y llevan incorporados sintonizadores digitales, pero no son de alta definición. Aunque no lo especifican los fabricantes, cuando no lo indican expresamente, significa que no lo son. Los que los ofrecen ya se encargan de remarcarlo bien y mucho.
En cuanto a la pantalla con dock para los reproductores de Apple, está disponible en cuatro tamaños, de 32, 42, 47 y 52 pulgadas, y precios de 640, 1.000, 1.400 y 2.000 euros al cambio. Todos los modelos son HDReady 1080p menos el pequeño, que solo nos ofrece un panel de resolución de 720p, que como ya hemos aprendido, corresponde con la etiqueta HDReady a secas.
Todos ellos incorporan tres puertos HDMI, que consideramos lo mínimo en la actualidad, salidas SPDIF, y dos salidas de vídeo por componentes.
Vía | Akihabaranews.