No es un aspirador escoba sin cables al uso ni un robot aspirador ni un clásico de trineo: estamos ante un aspirador escoba - fregona inalámbrico, una vertiente menos habitual pero ideal para la limpieza de suelos de baldosa, cerámica o gres. Puede que Dreame no te suene demasiado, pero si te decimos que pertenece al ecosistema de Xiaomi, seguro que la cosa cambia.
La firma china hace suya la buena relación calidad precio y si tenemos en cuenta que este no es su primer aspirador - fregador, el resultado es un modelo de lo más avanzado e innovador, con limpieza higiénica térmica, detección automática de suciedad o autolimpieza, entre otros. Hemos probado el Dreame H13 Pro y esta ha sido nuestra experiencia.
Ficha técnica del Dreame H13 Pro
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Dreame H13 Pro Wet and Dry Vacuum |
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DIMENSIONES |
113 x 26,5 x 23,5 cm |
PESO |
5,6 kg |
Capacidad succión |
18.000 Pa |
MODOS DE LIMPIEZA |
Auto, Succión, Ultra, Turbo |
CAPACIDAD DEPÓSITO DE LIMPIADO |
0,9 L |
CAPACIDAD DEPÓSITO SUCIEDAD |
0,7 L |
BATERIA |
6 x 4,900mAh |
AUTONOMÍA |
40 minutos 300 metros cuadrados |
TIEMPO DE CARGA |
4h |
TIPO DE RODILLO |
Un rodillo con rotación dual |
RUIDO |
76dB |
PRECIO |
Aspirador en seco y húmedo Dreame H13 Pro
Un diseño funcional no apto para rendijas
El Dreame H13 Pro Wet and Dry Vacuum es un aspirador vertical inalámbrico diseñado para la limpieza de suelos. Esto es, no es posible retirar extensores para reducir su tamaño y peso para transformarlo en un aspirador de mano. Resumiendo: lo suyo es usarlo para aspirar y fregar los suelos de una vez.
Estamos ante un aspirador grande y voluminoso para usarlo deslizándolo por el suelo y no elevándolo, para lo que sirven esas dos pequeñas ruedas que tiene en la zona del cabezal. Encargado de ambas tareas hay un rodillo de una especie de microfibra y 25 centimetros de largo que gira humedecido para fregar a la vez que succiona lo que se encuentra por el suelo. Teniendo en cuenta sus dimensiones, resulta cómodo para grandes superficies pero no cabe por esquinas o ranuras.
Un detalle a agradecer es que viene con un LED de luz blanca siempre encendida que viene muy bien para aspirar en zonas oscuras, donde la suciedad puede pasar desapercibida si no hay buena iluminación.
Lo suyo es usarlo para aspirar y fregar los suelos de una vez
Su posición estándar es de pie, ya que el cabezal y las ruedas lo mantienen erguido sin necesidad de sujeción extra, pero si pisamos sobre el cabezal y tiramos del mango, podremos inclinarlo y girarlo para mover el aspirador en diferentes ángulos gracias a su rótula. Así, puedes bajarlo para meterlo por debajo de la cama y girarlo. Eso sí, teniendo en cuenta que es un aspirador contundente, no es lo más manejable del mundo.
El cuerpo es un cilindro irregular de 12 centímetros de diámetro con dos compartimentos: en la parte trasera está la pieza donde guarda el agua limpia (700 ml de capacidad) y en la delantera la suciedad, que en realidad es agua oscura y maloliente fruto de la limpieza y la acumulación de sólidos aspirados. En la zona superior frontal alberga el motor y una pantalla, que justo se ve desde arriba, la posición desde la que aspiramos.
En esa pantalla puede verse el modo de limpieza, el porcentaje de batería, incidencias y hasta el grado de suciedad, que se muestra con un aro de color que ilumina la periferia en tonalidades verde, naranja y rojo en función de si lo que limpia está ligeramente sucio, medio sucio o muy sucio (en ese orden). En la zona inferior de la pantalla hay un agujero donde tendremos que incrustar el mango.
Mientras que el grueso del cuerpo es de plástico, el mango combina plástico y aluminio para resultar estilizado y robusto. Arriba del todo cuenta con una especie de mango para sujetarlo con una mano y tres botones dispuestos de forma que puedan pulsarse simplemente asiéndolo: el de ponerlo en marcha, cambiar los modos y en la zona posterior, el de la autolimpieza (este se usa cuando el aspirador está en la base).
Así como la experiencia general de manejo es un tanto tosca, el mango es ergonómico y cómodo, aunque si tienes problemas musculares o simplemente no puedes mover mucho peso, entonces probablemente sus dimensiones y peso te pasen factura porque la realidad es que no es un aspirador que brille por su agilidad.
Globalmente es un aspirador que se siente de calidad y resistente ante potenciales golpes inevitables cuando lo estás pasando, por ejemplo contra las patas de la cama o con el rodapié.
Finalmente, el aspirador descansa sobre su base, que es algo así como una baldosa en cuanto a tamaño y dimensiones, hecha de un plástico bastante ligero y algo trotón. Su misión es cargar el aspirador, evitar que manche el suelo y proporcionar la superficie suficiente para limpiar el rodillo durante el proceso de autolimpieza. Teniendo en cuenta que en el proceso de limpieza se genera aire caliente, es importante dejarla con espacio para que pase el aire.
Limpieza a prueba de accidentes
Una vez elegido el lugar para dejar la base y el propio Dreame H13 Pro Wet and Dry Vacuum convenientemente al lado de un enchufe, llega el momento de ponerlo en acción.
Si no te lees el manual, no hay problema porque encenderlo es simplemente darle al botón con el clásico icono de apagado y encendido. A partir de aquí todo va a ser cuestión de fijarse en la pantalla y combinar modos en función de lo que necesites. Cuenta con cuatro modos de uso: Automático, Succión, Ultra y Turbo, cada uno de los cuales combina su capacidad de succión de hasta 18.000 Pa, el agua y la posibilidad de añadir calor a la ecuación para escenarios más complicados. En la pantalla se muestran con los iconos: 'A', una gota, un microbio tachado y un ciclón.
Nota: en la parte trasera del cuerpo, justo donde se ensambla el mango, hay un botón para configurar la voz del aspirador para que nos diga cosas como "batería baja" y similares, no obstante y no teniendo problemas de visión, la pantalla me parece más rápida e intuitiva,
Mi piso tiene unos 55 metros cuadrados, el suelo es completamente de baldosa y vivimos dos personas. Mi primera limpieza consistió en ponerlo a funcionar con el modo automático y ya te adelanto que es lo que más se usa. Normalmente es tan sencillo como deslizarlo, pero para las zonas más pequeñas toca usar la muñeca para que el cabezal se meta donde pueda.
Por cierto, se llama automático porque integra un sensor que adapta la capacidad de succión en función de la suciedad detectada, lo que optimiza la batería. En cualquier caso, la succión va sobrada para llevarse los pelos que se pueden caer cuando te peinas, las migas de la comida, el polvo acumulado, la arenilla que dejan mis zapatillas después del pádel y hasta algún sólido más grande, como los copos de cereales.
El rodillo humedecido además permite retirar pequeñas manchas secas, por ejemplo la clásica gota seca de refresco. La dosificación de agua es tal que humedece el suelo, pero no lo encharca (a no ser que insistas en las pasadas), de modo que en pocos minutos se seca.
Ahora bien, imaginemos que un día bañas al perro en la ducha, le cortas un poco el pelo de las orejas y cuando acabas el baño queda hecho un cuadro. Y no me tengo que ir tan lejos: cuando me ducho hay días que salpico bastante y si además me corto el flequillo, mi baño podría declararse zona pantanosa. Para ese escenario, mejor cambiar al modo Succión para lidiar con más suciedad y más agua, logrando un suelo moderadamente limpio y mucho más seco, de modo que en un par de minutos se seque por completo. Aquí mi problema ha estado más en esos pelos que se quedan pegados por las esquinas por donde el cabezal no llega.
El modo Ultra añade a la limpieza el calor, aumentando la temperatura del agua de limpieza hasta 60 grados (según fabricante) y su objetivo es ofrecer una limpieza más higiénica, por ejemplo para cuando ha estado un perro tumbado y queremos algo más a fondo, aunque según mi experiencia también va de lujo para manchas resecas más difíciles y resistentes. Eso sí, aquí la batería baja más rápido.
Cuando hay un accidente, el Turbo marca la diferencia y saca del apuro rápidamente
Finalmente, el modo que más me ha sorprendido: el Turbo. No pasa muy a menudo, pero cuando hay un accidente, el Turbo marca la diferencia y saca del apuro rápidamente. Porque una cosa es una limpieza periódica de suciedad habitual y otra que se te caiga el puré al suelo, una densa salsa de tomate o volviendo a los cereales, el tazón con la leche y los cereales medio hechos papilla. Normalmente tocaría tirar de papel de cocina y fregona, pero este modo simplifica mucho el asunto: se lo traga todo en apenas un par de pasadas, dejando el suelo libre de esa mancha y sin esa grasilla típica del aceite.
Con batería para rato y accidentes varios
Este aspirador promete 40 minutos de autonomía que para mi pequeño piso va sobrado por varios motivos. Para empezar, obviamente porque la superficie es contenida (según la marca es capaz de cubrir 300 metros cuadrados), pero también porque lo normal será hacer limpiezas de mantenimiento que no requieren más que un par de pasadas con el modo automático.
El Dreame H13 Pro Wet and Dry Vacuum tiene batería suficiente para casas de todos los tamaños
Asimismo cabe destacar que al dejar el aspirador en la base, se va cargando continuamente, por lo que siempre está listo. Por este motivo considero que el Dreame H13 Pro Wet and Dry Vacuum tiene batería suficiente para casas de todos los tamaños. Eso sí, esta está oculta y no es extraible a simple vista, así que con el paso del tiempo, cuando esta se degrade lo suficiente, tocará llevarla al SAT para su reemplazo.
Esa cifra de 40 minutos la alcanza con el Auto, pero hay otros tres que modos que generalmente consumen más, sin embargo hay que tener en cuenta que sirven para casos más concretos de limpieza generalmente focalizadas en un punto. Así, en mis semanas de prueba casi siempre he usado el Automático, aunque el modo Succión también viene bien para esa limpieza puntual del baño post ducha. Y para accidentes, el modo Turbo, pero es que lo normal es que esos percances pasen en un lugar concreto.
Mantenimiento fácil pero frecuente
Como mencionábamos más arriba, lidiar con suciedad sólida y mezclarla con agua o directamente con otros fluidos como por ejemplo salsa de tomate da como resultado un batiburrillo que ni es higiénico ni huele demasiado bien... especialmente si dejásemos marinar el conjunto en el rodillo de un aspirador. Lo bueno es que al colocar el aspirador en su base y pulsar el botón de autolimpieza, te olvidas.
Esta autolimpieza comienza con un lavado con agua caliente (según la marca, a 60 grados) en el que el rodillo rota a un lado y otro para facilitar el proceso. Después, se seca con aire caliente durante media hora. El resultado es un rodillo limpio y seco que no huele mal. El esfuerzo es mínimo y los resultados son notables para un aspecto que podría ser crítico.
No obstante, de vez en cuando tocará soltar la presilla del cabezal y el botón pertinente para limpiarlo de forma manual, por ejemplo si se atasca con bolas de pelo. En mis semanas de prueba no me ha hecho falta, ya que con la autolimpieza queda bastante bien.
Consume bastante agua tanto en el proceso de autolimpieza como en la propia limpieza
Eso sí, he estado usándolo a diario y cada dos o tres días me ha tocado vaciar el depósito de agua sucia y llenar el de agua limpia, porque la realidad es que consume bastante agua tanto en el proceso de autolimpieza como en la propia limpieza. Pero no tiene mucha historia: tirar del pulsador para extraerlo, abrir la boquilla y ponerlo bajo el grifo.
Lo bueno es que dejas el aspirador en la base y en no demasiado tiempo lo tienes listo, ya que en las cuatro horas que cuesta cargar la batería completamente le da tiempo de sobra a la autolimpieza.
Dreame H13 Pro, la opinión de Xataka
Partiendo de la base que esto de los aspiradores fregadores inalámbricos son rara avis dentro del segmento, la realidad es que haberlos haylos y en Xataka hemos probado algunos tan interesantes como el Roborock Dyad o el Kobold VK7 y por supuesto, este que nos ocupa. Su razón de ser tiene sentido si tenemos claro que:
- Sirven única y exclusivamente para suelos y no para aspirar otras cosas como muebles o alfombras.
- Habida cuenta de que se va a pasar un rodillo humedecido, lo suyo es usarlo para suelos de baldosas y similares, ya que el parquet no soporta demasiado bien el agua.
- Se aspira y se friega a la vez, de modo que agilizas notablemente el proceso de limpieza.
- El proceso de limpieza es manual, lo que implica más esfuerzo a cambio de poder inicidir donde estimemos necesario.
En este escenario, la realidad es que son mucho más ágiles y efectivos que pasar la fregona y la escoba. Considerando sus características, que sean voluminosos es su peaje a pagar, sin embargo pasar este Dreame H13 Pro resulta moderadamente cómodo, aunque por su tamaño no cabe en las rendijas.
El Dreame H13 Pro Wet and Dry Vacuum es el aspirador definitivo a prueba de desastres
En cualquier caso, lo más destacable de este aspirador es cómo limpia: que aspire y friegue bien son dos de sus grandes bazas, pero que pueda solucionar en dos pasadas el desastre que se monta tras la ducha o cuando se nos cae un plato al suelo es un plus a tener en cuenta en casas muy expuestas a este tipo de percances, por ejemplo donde haya niños y niñas o mascotas. El Dreame H13 Pro Wet and Dry Vacuum es el aspirador definitivo a prueba de desastres.
Aspirador en seco y húmedo Dreame H13 Pro
Imagen destacada | Xataka
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Este producto ha sido cedido para la prueba por parte de Dreame. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas.