Tras la presentación del iPad Pro con sus contundentes 12.9 pulgadas, Apple dejó en suspenso la renovación de su tablet más preciado y con formato más lógico, el Air. Pero finalmente hace unas semanas llegaba el iPad Pro 9.7, con diseño del Air, prestaciones del Pro y el estreno de una pantalla asombrosa.
El nuevo iPad Pro 9.7 incluye entre sus prestaciones las novedades que ya conocíamos del primer modelo Pro, como son el soporte para el lápiz, funda con teclado y más potencia. En Xataka ya lo hemos probado con calma y te contamos en nuestro análisis del iPad Pro 9.7 cómo le ha sentado al tablet más conocido de Apple renovarse de forma considerable por dentro.
iPad Pro 9.7, principales características
El iPad Pro que Apple presentó a finales del año pasado abría las posibilidades de trabajo más serio en formato tablet pero quedaba muy lejos de lo que uno busca en el mercado de consumo con un tablet, que es ante todo equilibrio y comodidad. Para eso llega el iPad Pro con pantalla de 9.7 pulgadas, que como vas a ver, comparte la mayoría de especificaciones del tablet más grande de Apple, estando éstas además en línea con la gama en la que pretende competir por precio.
iPad Pro 9.7, características técnicas | |
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Dimensiones físicas | 240 x 169,5 x 6,1 milímetros 437 gramos sólo WiFi 444 gramos WiFi + LTE |
Pantalla | 9,7 pulgadas True Tone |
Resolución | 2048 x 1536 píxeles (264 ppp) |
Procesador | Apple A9X |
RAM | 2 GB |
Memoria | 32 / 128 GB / 256 GB (no ampliable) |
Sensores | Touch ID Giroscopio 3D Acelerómetro Barómetro Luz ambiente |
Versión software | iOS 9 |
Conectividad | Bluetooth 4.0 Wi‑Fi (802.11a/b/g/n/ac) LTE, DC-HSDPA, HSPA+ con Nano-SIM |
Cámaras | Posterior de 12 MP con Focus Pixels, frontal de 5 MP / Grabación 4K |
Batería | 7306 mAh (no extraíble) |
Precio | 32 GB + WiFi --> 679 euros 128 GB + WiFi --> 859 euros 256 GB + WiFi --> 1039 euros 32 GB WiFi + LTE --> 829 euros 128 GB WiFi + LTE --> 1009 euros 256 GB WiFi + LTE --> 1189 euros Apple Pencil --> 109 euros Smart Keyboard --> 169 euros |
Por fuera parece que nada ha cambiado desde que llegó el iPad Air 2 al mercado (fue a finales de 2014) , pero hay muchas novedades interesantes en el interior de este iPad Pro 9.7. Las más destacadas son en campos habituales y esperados, como el procesador, donde se coloca un A9X (aunque con 2 GB de RAM, la mitad que en el Pro mayor) o la pantalla, que estrena una tecnología llamada True Tone para mejorar la visualización de contenido en multitud de circunstancias.
Con el apellido Pro en su haber, este iPad gana soporte para los accesorios principales de los tablets de Apple, el Pencil y el teclado, e incorpora de forma inesperada el mismo sensor para la cámara de fotos que en los smartphones. Veamos cómo ha sido nuestra experiencia con él.
iPad Pro, análisis en vídeo
Una vez repasadas las características técnicas principales del iPad Pro, te invitamos a ver el análisis en vídeo donde repasamos lo que nos ha parecido este tablet durante la prueba, verlo en funcionamiento y comprobar aspectos del diseño con todo lujo de detalles:
Todo por la pantalla
Una característica que Apple ha sabido siempre que no podía descuidar en sus tablets ha sido la pantalla. Al fin y al cabo la experiencia con un dispositivo de este tipo pasa irremisiblemente por ese componente. Tras la semana que hemos pasado con el iPad Pro de 9.7 pulgadas, ya podemos decir que es la mejor que hemos tenido delante hasta ahora en un tablet de Apple, y una de las mejores del mercado.
La pantalla del iPad Pro de 9.7 pulgadas es un panel IPS donde se ha aumentado ligeramente el brillo y reducido los reflejos de la pantalla. Esto en la práctica significa que en interiores es espectacular sin recurrir a una excesiva saturación como ocurre en las SuperAMOLED y en exteriores tiene una visibilidad muy correcta.
El otro aspecto en el que el panel del iPad Pro es sobresaliente es en la reproducción de color. Si eres profesional que necesita una calibración adecuada, es de las mejores pantallas que puedes usar, incluyendo el estreno de una gama de color DCI-P3 que ya instauró Apple en su último iMac, y pone especial énfasis en el vídeo y fotografía no tanto para impresión como para reproducción en pantallas.
También cumple la pantalla en resolución, con una densidad de píxeles de 264 ppp que permite bastante definición tanto para contenido de vídeo como fotografías o texto. Esa densidad está en la línea de los mejores tablets de semejante diagonal tanto en Android como en Windows.
Lo que para nosotros marca la diferencia en la pantalla del iPad Pro respecto a la competencia es la tecnología llamada True Tone. Esta mejora elimina la fidelidad y precisión de la pantalla en favor de más comodidad de visualización. Está plenamente enfocada en mejorar la experiencia de los usuarios que recurren a un tablet principalmente para consumir contenido de texto o vídeo.
Esta tecnología, que puede activarse o desactivarse a demanda, mide la temperatura de color de la luz ambiente y adapta la de la pantalla, así como la intensidad, para facilitar una visualización con tonos más naturales y acordes al entorno. La diferencia parece inapreciable hasta que activas y desactivas la opción y compruebas que te sientes más cómodo leyendo o viendo contenido con el modo True Tone activo.
La pantalla del nuevo iPad Pro, como pasó con el modelo superior, no incluye la tecnología 3D Touch, algo que echamos de menos porque creemos que puede tener un alto valor en el formato tablet, pero sí soporte para el lápiz de Apple.
Este accesorio es el mismo que para el Pro de más pantalla, lo que se traduce en que funciona muy bien, es eficaz y una herramienta esencial si quieres dibujar o crear contenido en el iPad. Dado el formato más compacto de este iPad, el lápiz me ha gustado especialmente para tomar notas o realizar apuntes sobre contenidos, algo que solo se podía hacer en el modelo más grande cuando estaba sobre la mesa. Sin ser un dibujante ni nada parecido, he usado más el lápiz en este formato compacto que en el anterior, a lo que ayuda un gran ecosistema de aplicaciones que soportan el uso de este accesorio y permiten desde reconocimiento de escritura hasta búsqueda en notas que hagamos con él.
Ser exactamente el mismo lápiz implica también mantener errores que creemos que un accesorio de este nivel y precio debería no presentar. Lo más relevante está asociado curiosamente al diseño. El Pencil de Apple tiene un buen acabado en plástico pero no despunta en ese apartado. Es completamente liso lo que hace que deslice con demasiada facilidad por las superficies planas. Tampoco entendemos que se hayan obviado toda clase de botones físicos que, bien integrados como en el lápiz de Surface, por ejemplo, dan un extra de utilidad al accesorio. Y sigue siendo un accesorio sin un lugar natural y lógico donde quedar almacenado cuando no lo estamos usando.
Ligeros cambios de diseño con el sonido y la cámara como protagonistas
Si este iPad Pro te suena, es normal. El diseño es idéntico al del último iPad Air con dicha diagonal. Sigue siendo pues un tablet muy ligero (437 gramos, aunque no el mejor en este dato del mercado, pues el Tab S2 rebaja su peso hasta los 389 gramos) y cómodo en mano, con excelente acabado en metal y con el añadido del lector de huellas, el cual funciona rápido y es fiable como el de los smartphones de la compañía.
Los únicos detalles que se modifican en el diseño son en dos elementos que mejoran lo que la generación anterior ofrecía al consumidor. En las esquinas encontramos cuatro altavoces que suben el nivel y calidad sonora del iPad de manera exponencial, algo que nos parece esencial en un equipo que usaremos bastante para consumir vídeo e incluso música sin auriculares.
La potencia y control del sonido es la mejor del mercado en el sector de los tablets que hemos probado en Xataka, y a ello ayuda la función de cambio de graves y agudos dependiendo de cómo sostengamos o coloquemos el tablet, de manera que con la información que le proporcionan los acelerómetros, los graves siempre suenen en los altavoces situados en la parte inferior y los agudos en los superiores.
La otra variación en el diseño respecto al iPad Air es la protuberancia de la cámara. Esto se debe a que es exactamente la misma que la de los iPhone, y por eso al mantener el grosor del Air, sobresale en el diseño, algo que no nos gusta a nivel estético pero que al menos no molesta cuando tenemos sobre la mesa el tablet.
El rendimiento de la cámara principal del iPad Pro 9.7, con sensor de 12 megapíxeles, es idéntico al que hemos visto en los smartphones de Apple de última generación: sobresaliente con luz y muy correcto cuando ésta escasea. Aquí no creo que se trate tanto de sacar fotos de calidad con el tablet (pero ahí queda esa opción para quien lo suela o quiera hacer en algún momento) como de tener la posibilidad de crear contenido multimedia recurriendo a la propia cámara del iPad como fuente, grabación de vídeo 4K incluida. En éste último caso, Apple sigue siendo la referencia del mercado.
Teclado y multitarea tienen menos sentido en este formato
El chip más potente que diseña ahora mismo Apple, el A9X, es el corazón del iPad Pro de 9.7 pulgadas. Es el mismo que en el modelo superior, pero se acompaña de la mitad de memoria RAM: 2 GB. Esa reducción no tiene apenas efectos en el uso más clásico y de ocio del tablet en la actualidad, pues se desenvuelve con fluidez, pero nos hemos encontramos en nuestra prueba un iPad Pro no tan ágil cuando trabajamos con multiventana o en tareas muy exigentes. Y por gama de precio, hubiéramos esperado contar con esos 4 GB que nos aseguran cierta fiabilidad para con el futuro de un tablet de cierto precio y aspiraciones.
Respecto a las capacidades, nos encontramos con el modelo de entrada con 32 GB de memoria interna, pasando luego a las versiones de 128 y 256 GB. Como nos ocurre con los 16 GB de los smartphones, creemos que esa capacidad de partida para el precio del equipo debería ser más elevada, y no colocar 64 GB sino directamente saltárselos solo puede obedecer a "forzar" la compra de un modelo más caro todavía.
Un buen trabajo realizado por Apple está en la batería. Aquí hay continuidad en el resultado. Apple ha fijado de forma acertada unas 10 horas de uso continuado de sus tablets desde casi el modelo original, y en este iPad Pro se mantiene en la línea. Con uso mixto en casa podemos mantener el tablet sin cargar una media de 2-3 días. Usándolo de forma más intensiva y productiva, con teclado y muchas horas de pantalla encendida, hemos promediado unas 8-9 horas sin tener que recurrir al cargador.
Pese a que el interior de este iPad Pro 9.7 es en esencia el mismo que el del modelo de más diagonal, hay varias pegas para poder pensar en un uso avanzado como se podría plantear alguien con el primer Pro.
El cambio y diferencia más significativa está en la diagonal de pantalla. Para su uso en modo dividido, como permite iOS 9 (aunque dependerá de cada aplicación, algo que desespera a cualquiera que intente ser un asiduo de la pantalla dividida), las 9.7 pulgadas son escasas para un trabajo con dos aplicaciones a la vez durante mucho tiempo. La diferencia con las 12.9 pulgadas del modelo Pro más grande no parece tanta en simples cifras, pero al final es como juntar dos pantallas de 9.7 en una sola.
El otro accesorio asociado al iPad Pro de 9.7 pulgadas es el Smart Keyboard. Apple ha creado una versión mini del teclado-funda con el mismo funcionamiento que el modelo más grande, bien construido, con acabado resistente pero con la desventaja de ser más reducido en tamaño, lo que lleva a que te pueda servir para tareas de escritura pero nada demasiado extenso o productivo. Es mejor opción colocarle una funda clásica y optar por un teclado externo.
En todo caso sorprende bastante lo bien que uno se puede acostumbrar al tamaño y tacto de las teclas, aunque con el precio que tiene el teclado, uno espera más. Por ejemplo que sea retroiluminado o haya versión para países con peculiaridades como España, donde no podemos encontrar la ñ en el teclado que se vende de forma oficial. En el uso como funda o soporte, solo admite una posición cuando está abierto. Hubiera estado bien dotarle de otra posición en modo solo soporte, con el teclado oculto.
Si optamos por el pack completo que incluye teclado y lápiz, el precio del modelo de iPad Pro más básico se iría por encima de 1000 euros, una inversión considerable con la que, por mucho ecosistema completo, de calidad y sin igual que tengamos en iOS, no conseguimos una experiencia plena, al menos una buena parte de los usuarios.
iPad Pro 9.7, la opinión y nota de Xataka
Sin que el iPad Air actual necesitara una renovación urgente, este iPad Pro con la misma diagonal de pantalla es bienvenido para aquellos usuarios que opten por el sistema operativo iOS y quieran aprovechar una pantalla con soporte para el lápiz en formato más manejable, así como un sonido muy aprovechable para consumir contenido de vídeo. Son los factores diferenciales que permiten a este nuevo iPad Pro destacarse de nuevo en el segmento de los tablets de menos de 10 pulgadas y con aspiraciones principales de consumo.
Rendimiento y batería se mantiene en lo más alto, y da un buen impulso la cámara de fotos/vídeo además de la pantalla, cuya evolución True Tone nos ha convencido como consumidores de contenido.
Otra cosa es que busques ir más allá. Ni por tamaño de pantalla, teclado o sistema operativo creemos que este iPad Pro encaje en la idea de dispositivo principal de muchos consumidores en la actualidad. Lo más cercano tiene ahora mismo otros referentes, curiosamente con un sistema operativo que sí encaja más: Windows 10.
8,8
El terminal ha sido cedido para la prueba por parte de Apple. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas
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