Dentro de la gama alta de unidades de almacenamiento SSD, los equipos bajo el protocolo NVMe (Non-Volatile Memory express)) son los que mejor rendimiento dan. Su precio es más alto, pero a cambio sacan lo mejor de la tecnología de estado sólido para usuarios exigentes.
La primera unidad NVMe de Kingston
Kingston presentó hace unas semanas su primera unidad de este tipo para el mercado de consumo, la KC1000. Este dispositivo de almacenamiento se puede conseguir en capacidades de 240, 480 y 960 GB, con precio de partida de 165 euros. Su factor de forma básico es M.2 2280, pero podemos conseguirlo con tarjeta PCIe adaptadora de tipo HHHL AIC para no tener problemas con nuestra placa base. En los dos casos la garantía de Kingston es de 5 años para este nuevo SSD.
El Kingston KC1000 es una unidad SSD PCIe Gen 3.0x4 que usa tecnología MLC Nand y se vale del controlador Phison PS5007-E7. Su rendimiento teórico varía según la capacidad que escojamos, pero como máximo podremos conseguir 2700 MB/s en modo lectura por 1600 MB/s en modo escritura. Para que lo pongas en contexto, un WD Blue ofrece del orden de 550 MB/s en modo lectura y escritura.
Si nos centramos en el rendimiento del SSD en modo aleatorio, este Kingston KC1000 es capaz de alcanzar hasta 290.000 IOPS en modo lectura y 190.000 IOPS en modo escritura. En fiabilidad, ofrecen unos dos millones de horas (MTBF), con 1 PB de TBW para el modelo más completo de 960 GB. Los de 240 y 480 GB alcanzan los 300 y 550 TB respectivamente.
¿Y el consumo? Las cifras oficiales dan datos bastante bajos, como corresponde a un buen SSD. En reposo tenemos apenas 0.11 W de consumo, en modo de trabajo básico no llegamos a 1 W, mientras que a máximo rendimiento y en modo escritura, superamos por poco los 7 W.
Prueba de rendimiento del SSD KC1000
Repasada la teoría, pasamos a medir el rendimiento real de este primer SSD NVMe de Kingston para el mercado de consumo y empresarial. El modelo que el fabricante nos ha cedido para el test es la unidad de más capacidad, con 960 GB. Su precio en la actualidad es de 510 euros
El SSD NVe KC1000 podemos usarlo con adaptador PCIe o directamente con conexión M.2
Equipo de pruebas
Para la prueba de rendimiento real del SSD Kingston KC1000 de 960 GB hemos usado un equipo compuesto de:
- Placa base Gigabyte GA-AX370-Gaming 5
- Memoria RAM Corsair 2x8 GB DDR4-3000 configurada a 2400 MHz
- Procesador AMD Ryzen 3 1300X
- Tarjeta gráfica GTX 1050 de Nvidia
- Disco duro principal: SSD M.2 de Samsung
Como en otros test hardware, comprobamos antes de la prueba que todos los componentes contaban con la última actualización disponible de drivers instalada, así como del sistema operativo. Hemos usado Windows 10 desde una instalación limpia.
Rendimiento del SSD Kingston KC1000
La medición del rendimiento del nuevo SSD Kingston la realizamos con una batería de tests basados en software específico de referencia para este tipo de pruebas.
Empezamos con una de las pruebas más conocidas para test de SSD a nivel de consumo: CrystalDiskMark 5. En el modo de lectura secuencial hemos medido 2110 MB/s, los cuales bajan a 1633 MB/s en modo de escritura. Si nos centramos en los datos con datos aleatorios (Random 4K QD32), el SSD NVMe de Kingston rinde a poco más de 500 MB/s en modo lectura, y 434 MB/s en modo escritura.
El siguiente test con el que pusimos a prueba esta unidad SSD de Kingston fue ATTO. Los mejores resultados tras varias pasadas nos dejan cifras ligeramente superiores a las de referencia del fabricante para la unidad de 960 GB, que son de 2700/1600 MB/s. En ATTO los resultados fueron de 2853 MB/s en lectura y de 2110 MB/s en escritura, que es donde más diferencias hemos apreciado pasando este test respecto a los datos oficiales.
Otro test que nos indica la calidad de un SSD es el PCMark 8 en su modo de almacenamiento. La puntuación global en el test 2.0 es de 5044, con un ancho de banda total de 563 MB/s.
Por último os dejamos los resultados del test AS SSD Benchmark, bastante completo para diferentes tipos de pruebas, y que arrojó una puntuación de 1142 y 983 puntos para los modos de lectura y escritura respectivamente. En datos de rendimiento equivalen a 2065 MB/s y 1002 MB/s en escritura y lectura secuencial respectivamente, mientras que en aleatorio los datos obtenidos fueron de 894 y 773 MB/s en lectura y escritura.
Si tomamos como referencia los SSD SATA que son los habituales en el mercado de consumo cuando uno quiere mejorar su equipo o entrar en este mercado, la nueva unidad de Kingston nos deja claras las ventajas de los SSD NVMe. En plataformas más actuales y con un presupuesto más holgado, este tipo de unidades ya deberían ser una opción seria a considerar quien quiera máximo rendimiento por el precio que paga por su almacenamiento.
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