OnePlus es un elemento extraño en la industria, una startup muy pequeña que crea teléfonos de última generación, y que pretende que sean perfectos. Su primera criatura Android está ya entre nosotros, con un hardware de impresión - comparte la mayoría de elementos con sus competidores -, acabados de primera, un software en sintonía firmado por Cyanogen, y un precio por debajo de cualquiera otro modelo equivalente.
Sin querer desviarnos del producto, es interesante introducir que OnePlus One es un teléfono muy parecido a Oppo Find 7a - que analizaremos dentro de unos días -, de hecho, ambas empresas están controladas por BBK Electronics, y de alguna manera están aprovechando los recursos y experiencia comunes, siempre intentando impregnar de personalidad a sus productos. Entendiendo la dependencia, desde OnePlus me comentan que la relación con Oppo será prácticamente nula en unos meses.
Volviendo al One, no siempre contar con buenos ingredientes garantiza un resultado al nivel, hay que saber mezclarlos y acertar con lo que necesita el gran público. En el caso que nos ocupa, han decidido crear una phablet, y eso sin duda condiciona el interés. Al margen de tamaños, y del estado de desarrollo de nuestra unidad de pruebas, todos los elementos nos hacen pensar que estamos ante un gran producto.
Con la intención de reclamar nuestra atención, nos lo vendieron como el 'flagship killer' de 2014", ¿habrán conseguido su meta?
Os preguntaréis cómo se consigue este equilibrio, pues lo intentaremos explicar más adelante, pero ahora vamos a seguir conociendo cómo es y de qué está compuesto este OnePlus One.
Especificaciones técnicas
Antes de profundizar en los diferentes apartados de nuestro análisis del OnePlus One, vamos a repasar las principales características técnicas con las que podemos hacernos una idea del nivel del que partimos:
OnePlus One, características técnicas | |
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Dimensiones físicas | 152,9 x 75,9 x 8,9 mm, 162 gramos |
Pantalla | 5,5 pulgadas, IPS, Gorilla Glass 3 |
Resolución | 1080p (401 ppp) |
Procesador | Qualcomm Snapdragon 801, quad-core a 2,5 GHz (MSM8974AC) |
RAM | 3 GB |
Memoria | 16 o 64 GB, no ampliable |
Versión software | Android 4.4, CyanogenMod 11S |
Conectividad | LTE, NFC, Wi-Fi b/g/n/ac, BT 4.0 LE, USB OTG |
Cámaras | Principal de 13 Megapíxeles (Sony Exmor IMX214), secundaria de 5 megapíxeles |
Batería | 3.100 mAh |
Características especiales | Grabación de vídeo 4K, CyanogenMod 11S, Carcasas intercambiables |
Precio | 269/299 euros |
OnePlus One, análisis en vídeo
Diseño
El OnePlus no parece en ningún momento un teléfono barato, ni a la vista, ni en la mano. Lo vemos en el policarbonato elegido, lo comprobamos en la calidad de construcción, y lo confirmamos con un diseño aparentemente sencillo pero con muchos elementos bien resueltos.
Es un teléfono elegante, atractivo, y no creo que tenga demasiado que envidiar a dispositivos de primeras marcas como LG o Samsung. Otra historia sería meterse en Apple o HTC, que juegan con otros materiales, y puede existir una predilección por ellos por parte del comprador.
No vamos a engañar a nadie, esto es un teléfono grande, entra en el terreno de las phablets. Así que a la hora de usarlo, podéis pensar en algo parecido a un Samsung Galaxy Note 3. Si no tienes problema con el tamaño, te acostumbras rápido y te olvidas de usarlo con una sola mano. Es delgado, agradable al tacto (suave), y la curvatura de la trasera ayuda con la ergonomía.
Sobre el aprovechamiento de los marcos de pantalla, siempre parece haber margen para recortar y hacer algo más pequeño, especialmente arriba y abajo de la pantalla. Podemos decir que está en la línea de la mayoría, pero por detrás de un portento como LG G3, que con el mismo tamaño de pantalla es considerablemente más pequeño.
Dando un repaso a la delantera, no me gusta como han resuelto los botones de navegación Android, ya que aparecen muy poco iluminados. Sabemos que están ahí, e incluso podemos pasar a colocarlos en pantalla, pero no hubiera estado mal una mejor presentación (según OnePlus, querían conseguir un frontal completamente negro). Tampoco me parece especialmente bien acabado el compartimento - y acceso - de la microSIM.
En las imágenes es complicado de apreciar, pero cuando tengáis uno en la mano, podréis ver que la pantalla sobresale sobre una capa plateada del teléfono, con un pequeño escalón, que a su vez está adherida al policarbonato que completa la carcasa. Dicho sea de paso, esa carcasa es intercambiable, con un montón de diseños atractivos que están por llegar.
OnePlus tiene un altavoz dual en la parte inferior del teléfono, que las rejillas estén situadas ahí ayuda a que el sonido esté menos tapado (a excepción de cuando jugamos). Para los más curiosos, mi unidad de prueba no cuenta con el logo de Cyanogen a la espalda al tratarse de un unidad china, pero el modelo europeo sí cuenta con él.
Primer apartado importante, resuelto con notable alto, ¿mantendremos el nivel?
Pantalla
Siguiendo con los ingredientes que OnePlus ha elegido para confeccionar su teléfono, pasamos a la pantalla, de 5,5 pulgadas y resolución Full HD (401ppi). En esta ocasión se han ido a los japoneses de JDI para pedirles un módulo IPS de su última hornada (LTPS, Touch On Lens).
Como os comentamos en el apartado de diseño, la pantalla está ligeramente expuesta sobre el resto de elementos del terminal, por lo que se agradece el hecho de contar con la protección de Gorilla Glass 3.
Dicen que quien se acostumbra a pantalla grande - no es mi caso -, luego no quiere volver a otra cosa, especialmente por la comodidad en que se ven contenidos multimedia, videojuegos, o la navegación web. En el caso del OnePlus no podemos decir otra cosa, es un dispositivo ideal para estos menesteres.
A mi me gusta mucho el color natural que presenta la pantalla - se puede configurar temperatura y tonalidad -, especialmente en la reproducción del negro, también es muy buena en ángulos de visión (178 grados).
El brillo por defecto lo veo débil, y decidí quitar el automático y colocarlo en valores altos. De hecho creo que condiciona el funcionamiento en exteriores, que no es su mejor asignatura, con dificultades y reflejos cuando el sol está presente.
Otro apartado que pasamos con nota alta, seguimos.
Rendimiento y autonomía
Ofrecer una pantalla de calidad a un precio contenido resulta complicado, pero más lo es tener uno de los últimos modelos de Qualcomm como hardware principal. De hecho, el OnePlus One se iba a estrenar con Snapdragon 800, pero estudiando bien lo que se estaba moviendo en el mercado, decidieron colocar un 801.
En un terminal que nos cuesta 269 euros, tener el mismo hardware interno que en los principales teléfonos Samsung o LG, ya dice bastante. Pero hay que ser más específicos, ya que de las versiones disponibles del Snapdragon 801, tenemos la más potente: MSM8974-AC, con cuatro núcleos a 2,45GHz, y GPU Areno 330 a 578MHz.
El otro punto que pocos teléfonos igualan es la memoria, el One se atreve con 3GB de RAM. A lo mejor no es la especificación a la que más rentabilidad se le puede sacar ahora mismo, pero es una garantía para futuras actualizaciones del sistema, y para tenerlo desahogado.
La otra memoria, la de almacenamiento, llega con su parte buena y mala. La mala, que no hay forma de expandirla - sí en el Oppo Find7a -, la buena, que optar por el modelo de 64GB es bastante asequible (30 euros más que la versión de 16GB), siempre y cuando empiece a haber unidades disponibles.
El rendimiento es el esperado en benchmarks, juegos, navegación, o con un uso exigente del teléfono. Más suave y con cargas más rápidas que cualquier teléfono en su precio. Pero no todo es perfecto, Cyanogen está haciendo un trabajo de optimización, y el teléfono todavía está en un momento inicial de desarrollo, con elementos por pulir y mejorar en el sistema (en el momento del análisis llegó una actualización importante, y esta semana llegará otra).
Muchos valorarán también las posibilidades de personalización en detalles hardware de CyanogenMod, entrando en perfiles que nos permiten jugar con el equilibrio entre potencia y batería, con detalles como tocar la velocidad de CPU.
Por último, también estamos ante un teléfono con conectividad LTE, algo que termina de hacer redonda la propuesta, y que en el pasado podría ser un problema en la elección de un teléfono chino. Probando el teléfono en nuestras redes, no he tenido ningún problema en condiciones normales, con un funcionamiento parecido al de mi iPhone 5.
Otras conectividades soportadas: Bluetooth 4.0, USB OTG, WiFi 802.11b/g/n/ac, GPS/GLONASS y NFC. Alguno echará en falta la radio FM.
Pasando a un aspecto como el audio, tenemos un sistema de triple micrófono para la cancelación de ruido externo. Con respecto al volumen en las llamadas, nuestra voz llega alta y clara al receptor, pero tengo la sensación de que hay que arreglar algo en el software para subir el volumen de lo que nos llega a nosotros.
Nos gusta especialmente la situación del altavoz, que suena con potencia y claridad (mientras no subamos el volumen al máximo). En la línea de los competidores, por detrás del BoomSound de HTC. Tanto auriculares como altavoces pueden aprovecharse de un completo sistema de ecualización llamado AudioFX, de Cyanogen.
Aprovechando el gran tamaño del teléfono, hay espacio para una batería de 3.100mAh - 2.800 en el find 7a -, pero en esta ocasión no se puede sustituir, por mucho que lo parezca en las imágenes que hay del interior del teléfono. La capacidad es considerablemente mayor que la que tenemos un Galaxy S5 o HTC One, también que un LG G3 (3.000mAh), e inferior a un Note 3 o Xperia Z2 (3.200mAh).
En cuanto a su autonomía, podríamos hablar que está en la línea de su tamaño/potencia, y estándar con respecto a los teléfonos con su mismo hardware. Creo que es un apartado que Cyanogen todavía puede mejorar bastante con optimización y herramientas para gestionar el consumo de los recursos. Mientras, podemos jugar con las configuraciones básicas para alargar la vida: desactivar conectividad, bajar brillo, quitar o notificaciones innecesarias.
El uso que le doy a los teléfonos no es precisamente sencillo, especialmente en lo que respecta a notificaciones, y al terminar el día me suele quedar un 5% de batería. Otro tema es cuando he estado probando la cámara, con vídeo - 4k - y foto, o dedicando más tiempo de la cuenta a benchmarks y juegos exigentes, donde es normal que la batería se consuma con rapidez.
Si nos gustó el diseño, la calidad de construcción y la pantalla, en cuanto a potencia y autonomía, quedamos más que satisfechos. Creemos que hasta que no empiecen a aparecer teléfonos con el Snapdragon 805, el One es lo mejorcito que podemos encontrar en teléfonos.
Software
OnePlus nació acompañada de la gente de Cyanogen, al menos en lo que respecta al mercado internacional. Tal y como prometieron, su primer producto ya es una realidad con el sistema operativo CyanogenMod, confeccionado sobre Android en su versión KitKat (4.4.2).
Cuando analizamos el Oppo N1, tuvimos ocasión de conocer con mayor detalle la personalización, pero son muchos los usuarios de teléfonos Android que han decidido usar Cyanogen, inicialmente por que ha conseguido estirar la vida de teléfonos, pero cada vez más son las razones por las que merece la pena. Lógicamente en el One cobra una dimensión especial al ser una versión optimizada y especialmente desarrollada para él.
La versión concreta desarrollada para el OnePlus One se llama CyanogenMod 11S, y destaca por ser un sistema ligero, seguro y configurable, con un aspecto muy agradable en este último estado, y sino te gusta, grandes posibilidades de personalización. Tenemos un potente gestor de temas, con el que podemos personalizar a nivel de elementos (iconos, fuentes, fondos).
El aspecto realmente no es muy diferente al de Android básico, pero bajo ese aspecto sencillo hay muchas posibilidades de configuración en el hardware y el software. Podemos hacer cosas como colocar los botones de navegación en pantalla, o dejarlas en su formato físico. También podremos jugar con la barra de estado superior y los elementos a mostrar, o acceder a dos barras superiores desplegables diferentes, según si lo hacemos con dos dedos o uno.
Nos gustan especialmente las posibilidades gestuales del sistema, como despertar o apagar el teléfono con un doble toque. Igualmente interesante es poder realizar gestos sobre la pantalla, con el teléfono apagado, que nos lo desbloquean y realizan un acceso directo dependiendo del gesto (círculo=cámara, v=linterna). Con dos dedos arriba y abajo, reproducimos y pausamos música.
Por último, Cyanogen incorpora un sistema de "escucha continua", similar al que vimos estrenar en el Moto X. El teléfono está siempre esperando a una orden con nuestra voz - en este caso, OK OnePlus -, con ella abrimos directamente Google Now.
Como aplicaciones propias que aporta Cyanogen, nos gusta la galería implementada, que toma la idea de la de iOS, con la posibilidad de ordenador los contenidos por momentos, o carpetas. La presentación y funcionamiento son atractivos. También nos ha gustado la aplicación que nos permite hacer screencast - con audio - de lo que hacemos con el One.
También encuentro cosas mejorables, por ejemplo, teniendo una pantalla tan grande no encuentro ninguna funcionalidad, o adaptación por parte del sistema operativo. Bien podrían haber implementado interfaces para ser usado con una sola mano, o modos que aprovechen varias ventanas, como las "pantallas partidas" que ya estamos viendo en otras personalizaciones.
Conforme realizamos el análisis van llegando actualizaciones de sistema, se van arreglando cosas que no funcionan del todo estables, se producen algunos cambios de aspecto, y posiblemente llegarán más en próximos días, así hasta que el producto realmente tenga que llegar a mano de clientes.
Cámara
Buenas noticias en el apartado de la cámara, el OnePlus tiene un sensor de 13 megapíxeles firmado por Sony, que además de nombre, tiene muy buenas condiciones. No es un Lumia 1020, a lo mejor tampoco un Samsung Galaxy S5, pero por el precio del terminal tenemos una cámara notable, en foto y vídeo, así que podemos estar satisfechos. De hecho, si comparamos con sus iguales, Nexus 5 o Moto X, el One está por encima en la mayoría de circunstancias.
Antes de entrar en detalle, estoy seguro de que hay mucho margen de mejora en él. La razón es que estoy probando su terminal gemelo, el Oppo Find 7a, que tiene exactamente el mismo módulo, pero los resultados - además de que me gusta más el software - son mejores. En China es posible colocarle la ROM Color OS, y la cámara funciona tan bien como el Oppo, así que esperamos que igualen la situación los chicos de Cyanogen y OnePlus.
El sensor retroiluminado de Sony es un Exmor IMX214, el mismo que lleva el Oppo, y también lo veréis en más teléfonos importantes de esta temporada. Está bien acompañado por una óptica compuesta de seis elementos y una apertura máxima f/2,0. Como apoyo - y potente linterna - hay un flash de doble LED.
Normalmente no me gusta pararme demasiado a evaluar la situación de las cámaras, pero no termina de gustarme que las coloquen muy cerca de laterales - caso de One -, ya que en muchas ocasiones provoca que tengamos que coger el teléfono de una forma poco natural para que nuestros dedos no aparezcan en pantalla.
El software que ha confeccionado CyanogenMod es completo, y con una interfaz sencilla que intenta ser original, como la posibilidad de realizar gestos para cambiar entre los filtros y modos que tengamos configurados. A mi no me termina de resultad cómodo, prefiero ir directamente a menús sencillos para cambiar las opciones.
Si nos liamos entre tanto modo, hay un "Smart Scene" que suele acertar con las condiciones de la imagen. También hay un efectivo y configurable modo HDR, o uno de larga exposición de hasta 8 segundos (en el Oppo Find 7a se puede hasta 32 segundos).
Volviendo a la interfaz, prácticamente nos encontramos con tres controles circulares: foto, vídeo y panorámicas. En un segundo plano, cuatro opciones: cámara frontal, flash, acceso a la configuración, y los citados modos especiales.
El formato de las imágenes que se toman a máxima resolución es 4:3, y como podéis comprobar en las muestras, la calidad es bastante buena. Los colores se presentan naturales, y la definición con buena luz es estupenda. Cuando tenemos problemas de iluminación, tampoco se porta mal, tanto en vídeo como en foto (ayuda la apertura de la lente), aunque peor que las principales cámaras del mercado (Nokia o Samsung).
Para el que tuviera duda, el OnePlus One no cuenta con un sistema óptico de estabilización de la imagen, aquí se hace el trabajo con software, pero tampoco podemos destacar el trabajo de Cyanogen en este aspecto.
En el frontal, también comparte cámara con el Oppo, tenemos un sensor de 5 megapíxeles con un acusado gran angular (80 grados) y destacable lente con apertura f/2,0. No se puede equiparar en resultados a la trasera, pero sus características le hacen estar por encima de la media del mercado.
Pasando al vídeo, este es otro de los teléfonos capaces de grabar vídeo en formato 4K, a un bitrate de 20Mbps. En tomas fijas y bien controladas los resultados son muy buenos, eso sí, ve preparando para dejar espacio en la memoria del teléfono: poco más de tres minutos se convierten en 1,5GB.
Otros ejemplos: 1080P - Slow 720p, 120fps - 4K
Si quieres, puedes ir bajando a un modo muy efectivo como el 1080p a 60 imágenes por segundo, o un atractivo modo de alta velocidad, con una resolución 720p y 120 imágenes por segundo. Al margen de los formatos, podemos cambiar codecs de vídeo y audio en los que se van a grabar los vídeos.
Con el sonido inicialmente experimentado algunos fallos extraños como que se pierde un canal, o que el equilibrio entre micros frontales y traseros no es el ideal, pero todo ello se está solucionando en las continuas actualizaciones.
Otro apartado notable, con margen de mejora, esperamos que no se olviden de actualizarlo pronto (entre las novedades esperadas está el formato RAW). Recordar que como complemento tenemos la cámara de Google, que es posible instalarla al estar con KitKat.
La opinión de Xataka
Terminamos el repaso a todos los aspectos importantes del teléfono, y no encontramos lagunas destacables. Y empezamos la valoración tal y como lo hicimos el artículo de análisis: el OnePlus One cambia las expectativas que podemos tener de un teléfono y su precio, aunque no estamos seguros de si otros podrán seguir el camino, o si OnePlus podrá cubrir la demanda.
No es el terminal ideal para todos, hay detalles que condicionan su compra, como el tamaño de pantalla. Tampoco estamos seguros del soporte que va a dar la empresa en sucesivos meses, y todavía tienen que pulir algunos detalles software antes de su comercialización real.
Una vez conocido el producto, hay dos opciones posibles que determinan color y capacidad de memoria. Blanco para el de 16GB, negro para el de 64GB (más adelante llegarán las carcasas).
Teniendo en cuenta que no podemos ampliar memoria, y que la diferencia es pequeña, yo optaría por el modelo de 64GB (299 euros), siempre esperando que no haya problemas para surtir a todo el mundo, y es que el sistema de invitaciones no garantiza que todo el mundo pueda comprarlo ya, ni tampoco están claras las fechas exactas para que el producto tenga un stock con garantías de surtir a todo el mundo que lo quiera.
Pensábamos que los días de los smartphones de 600 euros habían acabado cuando Nexus apareció en escena, pero la situación sigue más o menos igual, con los principales fabricantes poniendo un precio considerable a sus buques insignia. Con la llegada de OnePlus One nos encontramos con un nuevo protagonista que se atreve a ofrecer bastante por un gasto justo, esta vez sin un gigante como Google detrás.
Si tienes curiosidad por conocer cómo se consigue un precio así, por un producto así
- Pues la principal razón es que el teléfono lo están vendiendo sin ningún beneficio, por debajo de lo que les cuesta producirlo. No parece la mejor forma de ser rentable en una compañía recién nacida, pero sí una de darse a conocer. Creemos que se lo pueden permitir por estar bien soportada económicamente, y por contar con la experiencia de Oppo a un lado, más la de los profesionales que han conseguido reunir desde otros fabricantes chinos.
- Los grandes fabricantes gastan millones de dólares en marketing, este gasto no lo van a realizar en OnePlus. Se van a mover todo lo posible por Internet, en medios y redes sociales, presentando su propuesta.
- El tercer paso ya lo conocemos, vender directamente en una tienda online, sin intermediarios.
Hay cosas que algunos usuarios pueden echar en falta, teniendo en cuenta lo competido de la contienda, y las tendencias que estamos viviendo, algunos ejemplos: soporte para carga inalámbrica, ranura para tarjetas microSD, batería reemplazable, o la cada vez más presente y valorable resistencia.
Sony, y en un segundo lugar Samsung, te ofrecen propuestas resistentes al agua, polvo y golpes, que el OnePlus One no puede igualar. Vamos con las puntuaciones:
A favor
- Pagamos lo justo, por mucho
- Buenos materiales y construcción. Personalidad
- CyanogenMod 11S sobre KitKat
- Snapdragon 801, LTE, 3GB de RAM
- Calidad de la pantalla de 5,5 pulgadas
En contra
- Aunque está bastante conseguido, es grande
- No se puede ampliar memoria, batería fija con duración estándar
- Solo se vende a través de la red, con un sistema de invitaciones
- Primer dispositivo por parte de OnePlus, no tenemos precedentes del soporte
- Software verde, en constante actualización
En este artículo ha colaborado Pedro Santamaría con la realización del vídeo.
El teléfono ha sido cedido para la prueba por parte de OnePlus. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas
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