La pantalla AMOLED es un valor seguro que gana mucho en un formato de portátil convertible
Incluir el S-Pen de serie junto con software para aprovecharlo es una gran idea de Samsung
Los fabricantes clásicos del mundo del smartphone no suelen disponer de un catálogo amplio de portátiles y convertibles donde elegir. Su estrategia ha sido la de conseguir productos cada vez más redondos pero que quedan penalizados por quedar fuera del foco que sí tienen los fabricantes tradicionales del mundo PC.
Pero hay modelos en concreto, y pasa con más de una marca, que son ya una referencia anual en su segmento. El Samsung Galaxy Book4 Pro 360 es el ejemplo de los coreanos de Samsung. Si bien la nueva familia tiene muchos componentes, algunos incluso con gráfica integrada como el Ultra, este modelo convertible nos parece el más completo y equilibrado. Ofrece muchas posibilidades de uso y viene reforzado este año por los procesadores Ultra de Intel.
Ficha técnica del Samsung Galaxy Book4 Pro 360
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samsung galaxy book4 pro 360 |
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dimensiones |
355,4 x 252,2 x 12,8mm |
peso |
1,66 kg |
pantalla |
16" AMOLED WQXGA+ (2.880 x 1.800 px) 400 nits 120 Hz Táctil |
procesador |
Intel Core Ultra 7 Intel Core Ultra 5 |
gpu |
Intel Arc |
memoria |
16 / 32 GB LPDDR5X |
Almacenamiento |
512 GB / 1 TB |
cámara |
1080p |
conectividad |
WiFi 6E, BT 5.3 S Pen |
sonido |
Altavoces AKG (5Wx2 + 2Wx2) Dolby Atmos Micrófono dual |
batería |
76 Wh Carga 65W |
puertos |
2 x Thunderbolt 4, USB A, HDMI 2.1, microSD, jack 3.5mm |
sistema operativo |
Windows 11 Home |
precio |
Samsung Galaxy Book4 Pro 360 - Laptop 16" WQXGA+ AMOLED -Táctil (Intel® Core™ Ultra 5 Processor 125H, 16GB RAM, 512GB SSD, Intel Iris Xe Graphics, Windows 11 Home) Negro – Teclado QWERTY español
Un portátil convertible de acabado exquisito
Samsung no es un fabricante que en sus productos de gama alta peque de poco cuidado por los materiales y/o el diseño. El Samsung Galaxy Book4 Pro 360 nos lo demuestra al primer vistazo.
Estamos ante un equipo portátil con acabado en aluminio, mecanizado perfecto cuidando especialmente que sus bordes y aristas no resulten agresivas al tacto ni a la vista, y sensación en todo momento de producto de gama alta.
Pese a su diagonal de 16 pulgadas, el Galaxy Book4 Pro 360 es un equipo de peso contenido y grosor aceptable. En este modelo en concreto estos son datos críticos por tratarse de un convertible que no vamos a querer tener siempre sobre la mesa.
Las cifras nos hablan de un equipo con peso de 1,66 kg y grosor de 11,6 mm. Sus dimensiones no son muy abultadas y aunque sutil, hay diseño en cuña, pero sorprende la idea de ser un convertible tan grande. Se aprecia sobre todo en el marco de pantalla inferior, tres veces más ancho que los laterales y el borde superior. Incluso visualmente resulta extraño. Pero es necesario.
Un elemento que siempre debemos valorar en este tipo de dispositivo es la robustez de sus bisagras. En este modelo nos transmiten seguridad y resistencia, y algo que nos gusta mucho de este concepto: suficiente rigidez en cada grado de inclinación como para escoger la que más nos convenga en cada momento cuando lo estamos usando como portátil al uso.
Conectividad y comunicaciones “made in Samsung”
La conectividad del Samsung Galaxy Book4 Pro 360 cubre de manera satisfactoria las necesidades que creemos que tiene este tipo de equipo de trabajo.
Contamos con dos puertos USB-C (Thunderbolt 4), un puerto USB-A y un conector HDMI 2.1. La conectividad se completa con una ranura para tarjetas microSD y el puerto de auriculares.
Inalámbricamente, el nuevo convertible de Samsung viene bien preparado y ofrece conectividad Wi-Fi 6E y Bluetooth 5.3. También es compatible con S-Pen, como veremos más adelante.
Tratándose de Samsung, no podíamos esperar otra cosa que un cuidado especial por el software y las ayudas en todo lo que tiene que ver con las comunicaciones.
De entrada hay que indicar que la webcam, con un gran campo de visión y calidad por encima de la habitual en los portátiles de consumo, tiene resolución 1080p y viene acompañada de un sistema de micrófonos duales que se apoyan en la IA para la reducción de ruido.
En el apartado de imagen, Samsung ayuda con su software a que el encuadre sea siempre el adecuado y que podamos jugar con el fondo en nuestras videollamadas. Independientemente de que el software que usemos para realizarlas lo lleve integrado o no.
Para la identificación en el sistema Windows no hay sensores IR en la webcam así que tenemos que conformarnos con la identificación por huella. El lector está integrado en el botón de encendido del portátil, situado como parte del teclado principal del equipo.
Pantalla AMOLED táctil
Con el tiempo y la reducción de peso y dimensiones de los portátiles, ya no es un deseo sino realidad poder optar por modelos de gran diagonal sin perder las ventajas de un ultrabook a nivel de portabilidad.
El Samsung Galaxy Book4 Pro 360 ofrece al usuario una diagonal de pantalla de 16 pulgadas que luce un logo que no deja indiferente: Dynamic AMOLED 2X.
Este panel tiene una resolución 3K (2880x1800 píxeles) y un contraste de un nivel superior, como nos tiene acostumbrados Samsung en las pantallas con tecnología AMOLED de sus dispositivos de gama alta. Solo echamos en falta que el brillo, de 400 nits, no de un golpe sobre la mesa y aumente hasta niveles de equipo diferenciador.
Por ahora se queda solo ligeramente por encima de la media del segmento aunque la visualización no presenta problema alguna en interiores y también en exteriores se defiende gracias a la tecnología Vision Booster, la cual adapta el contraste y color de la pantalla según la cantidad de luz solar, en combinación con un cristal Gorilla Glass con DX, que reduce la cantidad de luz reflejada por la pantalla.
Este segundo aspecto se nota y agradece mucho, tanto en interiores como en exteriores. Sin eliminar por completo los reflejos, sí que es evidente que los reduce mucho y facilita como pocos la visibilidad de la pantalla sin tener que aumentar el brillo a valores muy altos que afectan a la autonomía.
El formato 16:10, de moda en los portátiles, busca un equilibrio entre ocio y trabajo. Igual que la frecuencia de refresco, de 120 Hz para mejorar la experiencia visual sin afectar en exceso a la autonomía del portátil. El panel ofrece una cobertura del 120% del espacio de color DCI-P3 y en la configuración del equipo, vía aplicación de la propia Samsung, podemos escoger entre diferentes modos de pantalla así como la temperatura de color del panel con la que necesitemos trabajar en cada situación.
Lógicamente la pantalla es de tipo táctil y tiene compatibilidad completa con el lápiz S-Pen de Samsung. No podía ser menos en un equipo que nos permite vía software bastantes opciones para ser usado como tablet para, entre otras cosas, tomar notas.
En esa situación destaca el excelente desempeño gracias a que podemos apoyar la palma para escribir sin que el panel lo detecte. Sin embargo, cuando queremos movernos por la interfaz de Windows 11 directamente desde la pantalla, la precisión y fiabilidad de los toques es completa.
Un buen centro multimedia
Necesites o no un portátil con formato tablet, que el panel sea táctil o la pantalla abatible 180 grados siempre suma. Piensa simplemente en poder usar esa flexibilidad para conformar un centro multimedia que admite varios modos de configuración.
Samsung probablemente haya pensado en ello porque ha cuidado muy especialmente el sonido del Galaxy Book4 Pro 360. Lo ha dotado de cuatro altavoces Dolby Atmos y de los que se encarga AKG.
El sistema de altavoces incluye dos woofers de 5W cada uno así como dos tweeters de 2W por unidad. El resultado es la suma de potencia, correcta nitidez sonora y sensación de sonido envolvente muy conseguida. Buen sistema de cine en casa portátil, al menos para parejas aunque sin la contundencia de graves que nos daría un equipo con más grosor.
Los Intel Ultra hacen acto de presencia
Los pequeños retoques respecto a la generación pasada, centrados casi exclusivamente en la pantalla OLED, no son suficientes para dotar de empaque al modelo de este año. Al menos mediáticamente. Sí que lo es, estemos de acuerdo o no, la acogida de los últimos procesadores de Intel, la familia Ultra (Meteor Lake).
El Samsung Galaxy Book4 Pro 360 puede contar con procesadores Intel Core Ultra 5 y 7, ambos con gráficos Intel Arc y el empuje de la IA en muchas facetas del trabajo diario con el equipo.
La versión que hemos analizado en Xataka venía equipada con la combinación del Core Ultra 7 155H y 16 GB de memoria RAM LPDDR5X soldada a la placa. La unidad de memoria interna era un SSD NVMe de 1 TB, con un rendimiento medio de 5.000 MB/s tanto en escritura como en lectura según nuestras pruebas.
La combinación del Intel Core Ultra 7 y la GPU Iris Arc funcionan perfectamente para las tareas que uno espera que este tipo de equipo pueda resolver. Lo demuestra en cifras con su rendimiento en nuestros test sintéticos habituales, con Cinebench 2024 a la cabeza. En este test exigente consiguió algo más de 620 puntos en la prueba MultiCore y se quedó rozando los 100 puntos en la prueba de un solo núcleo.
En PCMark, la puntuación de casi 6.600 puntos lo deja en las cifras media de los otros Core Ultra 7 que hemos analizado en Xataka. En GeekBench 6, sus datos fueron de 2.396 y 12.336 en las pruebas de uno y varios núcleos.
Dejando de lado las tareas básicas de ofimática, navegación, redes sociales o multimedia, donde la fluidez es máxima, con aplicaciones de vídeo, audio e imagen, el Samsung Galaxy Book4 Pro 360 sale bien parado, aunque siempre teniendo claro que no estamos ante un equipo tipo estación de trabajo portátil ni para jugar.
En la prueba 3DMark Night Raid, la más acorde con su ficha técnica al no contar con GPU dedicada, este Samsung Galaxy Book4 Pro 360 alcanzó los 26.600 puntos. en el test TimeSpy se quedó algo por debajo de los 3.850 puntos.
En las pruebas de rendimiento gráfico reales, la GPU Iris Arc ofrece lo justo para salvar los muebles en tareas de edición básicas y juego muy ocasional. No esperemos poder disfrutar de títulos exigentes a 1080p por encima de 20 fps salvo con aspectos gráficos medios. No es su liga.
El Samsung Galaxy Book4 Pro 360 controla el calor interno de los componentes con un sistema de refrigeración activa bastante contenido en ruido generado. Los ventiladores, incluso funcionando a pleno rendimiento en el perfil más contundente posible en el equipo, no suenan excesivamente altos y es un ruido continuado aceptable incluso en periodos largos de tiempo.
Pero no es lo habitual. La mayoría de tareas que realizamos con el Galaxy Book4 Pro 360 mantienen los ventiladores apagados o a un mínimo de revoluciones que no permiten apreciar ruido alguno salvo en un entorno en completo silencio.
Y no será porque no tienen tarea que realizar. En nuestras pruebas, la CPU, en los test de más carga, rozaban los 100 grados centígrados con facilidad. La buena noticia es que ese calor se disipaba muy bien y no se trasladaba térmicamente al chasis en zonas problemáticas. Todo el calor se concentraba en la parte inferior central, así que, más entrada una estación calurosa con temperatura ambiente alta, usarlo sobre las rodillas nos parece algo complicado e incómodo.
Pese a esas temperaturas pico al máximo rendimiento, en tareas que serán más comunes en este equipo, la gestión energética se resuelve bien y se mantiene una temperatura de la CPU en funcionamiento de alrededor de 60-65 grados en todo momento. Lo corroboramos con la prueba de estabilidad Night Raid de 3DMark, donde este nuevo convertible de Samsung supera el 99%.
A trabajar y luego ... descanso
El Samsung Galaxy Book4 Pro 360 cuenta con una batería de 76 Wh que no desequilibra especialmente el peso del equipo ni su grosor. Pero como vamos a ver, le deja ligeramente por debajo de las mejores marcas de autonomía de los equipos de este año analizados en Xataka.
En nuestras pruebas de uso real, con conectividad todo el tiempo, brillo al 50% y tareas mixtas donde predominan tareas de productividad y multimedia, el Samsung Galaxy Book4 Pro 360 ha promediado entre 6,5 y 7,5 horas, algo menos que la versión de la generación pasada, lo que nos demuestra una vez más en este 2024 que los Intel Ultra no están por ahora ofreciendo la mejora de eficiencia que se espera de ellos. Y ya llevamos un tiempo desde su lanzamiento.
Con tareas donde predomina más el vídeo y no es de trabajo continuado, podemos mejorar esa autonomía y rozar las 10 horas según nuestras pruebas reales. Si rebajamos el brillo y limitamos más las opciones y rendimiento del equipo, incluso podemos estirar esa autonomía que, en todo caso, nos cubre la jornada de trabajo siendo algo conservadores.
Para la carga de la batería hemos de recurrir a cualquiera de los dos puertos USB-C. Para ello contamos de serie con un compacto cargador de 65 W. Lástima que los dos puertos de carga se hayan colocado juntos en el lateral izquierdo y no haya ninguno en el derecho.
Un touchpad que lo domina todo
¿De qué manera puede un teclado completo, parte numérica incluida, parecer reducido a la vista en un portátil con 16 pulgadas de diagonal? Ya contesto yo: por culpa de un gigantesco touchpad.
El Samsung Galaxy Book4 Pro 360 saca partido a todo el espacio disponible colocando un monstruoso touchpad que hace pequeño a la vista al teclado del equipo.
El touchpad es el mejor en experiencia y tamaño que hemos probado en un portátil Windows. Desplazarse por él es rapidísimo sin perder en ningún momento la precisión. Y los toques y gestos siempre salen perfectos.
En cuanto al teclado, es de tamaño completo y ofrece una experiencia muy satisfactoria de tecleado, destacando por su estupenda estabilidad lateral y respuesta inmediata y ágil pese a que no tiene mucho recorrido. Pero el feedback es completo. Además es muy silencioso y viene retroiluminado con tres niveles de intensidad posible además de la opción de configurar el encendido y apagado automático cuando no hace falta.
El S-Pen y el ecosistema Samsung
A muchos fabricantes, especialmente en gamas de productos particulares donde se pide un extra en algunos aspectos, siempre les pedimos que realicen una aportación que ponga en valor su producto frente al de la competencia. Samsung es el rey en el ecosistema Android y también lo es bajo Windows.
La musculatura de la marca coreana asociada a este Galaxy Book4 Pro 360 lo encontramos en primer lugar en el S-Pen. El viejo conocido de los Galaxy viene de serie con el equipo en su formato convertible. Y le da un valor extra. Es cierto que como tablet es demasiado grande y cansado en mano, pero poder escribir, movernos por la interfaz o trabajar con audio, vídeo y fotografía apoyados en este accesorio, es todo un extra diferenciador como pocos.
La buena noticia es que Samsung no deja aislado de ecosistema a este accesorio y le coloca alrededor una serie de software que nos permite desde tomar notas a editar fotografía o vídeo. Y si queremos recurrir a software profesional y caro, tenemos buena compatibilidad.
Por cierto, el S-Pen de Samsung podemos acoplardo a la trasera del portátil. No es un lugar que evite que lo perdamos, pues es fácil que se desprenda al meter el equipo en una funda o la mochila, pero permite tenerlo a mano y localizado cuando estamos trabajando con él sin el riesgo de que quede en el caos de algunas mesas de trabajo.
Pero no se queda ahí el aporte de Samsung a este Galaxy Book4 Pro 360. Bajo Windows 11 encontramos una serie de aplicaciones y servicios que nos facilitan desde la configuración de parámetros básicos del equipo, como hemos visto para la pantalla, teclado, sonido o batería, hasta la integración transparente de otros dispositivos de la firma como tablets a modo de segunda pantalla de portátil. O la transferencia directa de archivos entre dispositivos del ecosistema Samsung.
Samsung Galaxy Book4 Pro 360, la opinión y nota de Xataka
Estamos viendo en los últimos años un desembarco asombroso de portátiles de gran diagonal de pantalla y aspiraciones de estación de trabajo. Entre las familias que se apuntan a esta tendencia tenemos desde los formatos clásicos que crecen y añaden gráfica dedicada hasta los modelos para jugar que recatan su apariencia games.
El Samsung Galaxy Book 4 Pro 360 es uno de los protagonistas más diferentes de esta carrera. Dentro de la nueva familia, es el modelo que más se diferencia si obviamos la versión Ultra con gráfica dedicada.
El nuevo convertible mantiene un excelente equilibrio entre potencia, diagonal de pantalla y dimensiones físicas, con el extra de los diferentes usos que podemos darle gracias a la inclusión del S-Pen y su pantalla abatible 180 grados. Y todo con un acabado del máximo nivel.
El equipo resulta suficientemente potente para tareas del día a día y algo más gracias a los procesadores Ultra de Intel, pero se quedan cortos en RAM y batería.
Y todo ello pese a que estamos ante un equipo con pantalla AMOLED, su verdadero valor. El panel, táctil y con un excelente recubrimiento antirreflejos de Corning Gorilla, es el gran argumento de compra de este convertible. Y disfrutable 100% con el buen complemento del sistema de 4 altavoces con sonido envolvente.
9,0
A favor
- El panel AMOLED de 16 pulgadas da mucho juego en este formato de portátil
- Interactuar con el equipo es un placer con su teclado, touchpad y S-Pen
- Para el formato que propone, el peso, grosor y dimensiones son de sobresaliente
En contra
- No hay muchas opciones de configuración y el precio de salida es alto
- Esperábamos más autonomía ahora que va equipado con los Core Ultra
- Lástima que los graves no tengan más presencia en el sonido
Samsung Galaxy Book4 Pro 360 - Laptop 16" WQXGA+ AMOLED -Táctil (Intel® Core™ Ultra 5 Processor 125H, 16GB RAM, 512GB SSD, Intel Iris Xe Graphics, Windows 11 Home) Negro – Teclado QWERTY español
El dispositivo ha sido cedido para la prueba por parte de Samsung. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas.
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