Xiaomi Redmi Watch 3, análisis: el reloj calidad/precio por excelencia ya puede hacer llamadas y se actualiza con una pantalla más grande

Junto a la avalancha de Redmi Note 12 de hace unas semanas -ya tenemos el análisis del Redmi Note 12 Pro+-, Xiaomi presentó su nuevo smartwatch. Se trata del Redmi Watch 3, un dispositivo que llega para ampliar todavía más el ecosistema de wearables de la compañía.

Tras una semana y media probando a fondo el reloj, te voy a contar mi opinión en este análisis, pero te adelanto que, pese a algunos detallitos que deben mejorar, me ha gustado. Cuesta 119 euros y pertenece a una liga en la que tiene bastante competencia, pero Xiaomi ha aprendido de errores pasados y ha creado un smartwatch de lo más interesante.

Ficha técnica del Xiaomi Redmi Watch 3


XIAOMI REDMI WATCH 3

DIMENSIONES Y PESO

42,58 x 36,56 x 9,99 mm

37g (incluyendo correa)

PANTALLA

AMOLED

1,75 pulgadas

Resolución 390 x 450 píxeles

Brillo de 600 nits

Modo Always On Display

SENSORES

Sensor óptico de frecuencia cardíaca

Acelerómetro

Giroscopio

Brújula electrónica

GPS, Beidou, GLONASS, Galileo, QZSS

BATERÍA

289mAh

Hasta 12 días de uso típico

Cargador magnético

RESISTENCIA

5ATM (sumergible 5 metros)

CONECTIVIDAD

Bluetooth 5.2

Compatible con Android 6.0 y superior

Compatible con iOS 12 y superior

OTROS

Hasta 121 modos deportivos

Medición de oxígeno en sangre

Llamadas Bluetooth

Cristal con revestimineto antihuellas

PRECIO

119 euros

Xiaomi Redmi Watch 3 - Smartwatch con pantalla AMOLED de 1,75", 121 modos deportivos, llamadas bluetooth, SpO₂, GPS, 5ATM, hasta 12 días de batería, negro (Versión ES + 3 años de garantía)


Un diseño que nos suena y que no tiene miedo a mojarse

Como siempre, vamos a empezar por el diseño, pero antes de hablar de la caja o del formato de la pantalla, quiero detenerme en la correa. El Redmi Watch 3 llega con correas en color negro o marfil y eso, junto al color de la caja, es la única diferencia entre ambos modelos. Tengo que decir que la correa en color marfil me parece preciosa y es bastante elegante.

Es de silicona y tiene un tacto espectacular. Es suave, no me ha provocado ninguna reacción en la piel (con algunas correas de silicona he tenido problemillas) y es lo suficientemente flexible como para ponerte los guantes en el gimnasio y que no te moleste. El sistema de cierre es sencillo, pero no se me ha salido en ningún momento esta semana, y algo que me encanta es el sistema de cambio de correas.

El ajuste en la muñeca es genial gracias al diseño de los enganches de la correa.

Para empezar, se pueden quitar muy fácilmente si quieres, por ejemplo, lavarlas o sustituirlas. Simplemente, pulsas el botón que libera la correa, tiras y listo, ya estaría fuera. Además, el sistema tiene un ángulo ideal para que no haya huecos entre la muñeca y la caja. En otros relojes suele haber holgura alrededor de la caja debido al sistema de enganche, pero aquí no.

Esto depende mucho de cada muñeca y su diámetro, pero la mía no es ni muy grande ni muy pequeña (17 centímetros, exactamente) y queda como un guante. La mala noticia es que el cierre no es el estándar de 20 o 22 milímetros, por lo que te tocará comprar correas nuevas en caso de que tu anterior reloj tuviera las del otro tipo.

He querido empezar por la correa porque es uno de los aspectos clave para llevar cómodamente un reloj y ya te digo que me ha gustado. Ahora sí, pasemos a la caja, aunque tampoco es que haya demasiado que contar.

Tenemos una caja rectangular que solo tiene un botón en la parte central del lateral derecho. Es el botón que nos permite entrar al menú, pero que también nos deja salir de “aplicaciones” y finalizar una sesión de entrenamiento. Está ubicado en un bisel con acabado metálico brillante, aunque realmente es de plástico, y justo debajo encontramos un micrófono y un altavoz. Sí, vas a poder responder llamadas, pero de eso te hablaré más adelante.

Ahí tenemos el micrófono y el altavoz para hacer llamadas. La verdad es que se escuchan (y nos escuchan) bastante bien.

La zona que está en contacto con la piel es de plástico y tenemos los sensores de ritmo cardíaco, así como los pines de carga. No vas a tener que quitar la correa para cargar el Redmi Watch 3, eso ya es cosa del pasado.

Y en el día a día es comodísimo por la correa, por lo bien que se ajusta a la muñeca y por el peso, de 24 gramos para la caja y de 37 en total. No pesa absolutamente nada y es algo que agradezco a la hora de hacer deporte. Además, es algo importante a tener en cuenta si no estás acostumbrado a llevar reloj durante todo el día.

Es resistente al agua, así que no te lo tendrás que quitar en todo el día.

Le he metido bastante caña esta semana en deportes que no son peligrosos para el reloj (como el cardio), pero también sesiones de CrossFit y jugar con mi perra (que ‘saca’ las uñas a la mínima y es bastante efusiva). Se ha llevado algún que otro golpe, además de algún ‘restregón’, y lo único que he notado es que hay un punto -imperceptible- en el que la pintura del bisel ha saltado.

Te tienes que fijar y, de hecho, me di cuenta al pasar el dedo para limpiar los laterales para hacer las fotos, ya que visualmente no es algo que se aprecie demasiado. Lo que me ha gustado es que la pantalla no tiene ni un arañazo, ni los típicos que son finísimos y no sabes como se los has hecho. Nada, está como nueva.

Pantalla grande y brillante, pero con una carencia importante

La pantalla como tal es plana, pero el cristal tiene una curvatura en los cuatro bordes para facilitar el paso del dedo por el mismo. Y el tamaño aumenta un poco en cada generación. El Redmi Watch tenía una pantalla LCD de 1,4 pulgadas, el Redmi Watch 2 añadió un panel AMOLED con 1,6 pulgadas y en este Redmi Watch 3 se mantiene el panel AMOLED, pero con un salto a las 1,75 pulgadas.

Son buenas dimensiones no sólo para las notificaciones, sino también para poder ver las estadísticas deportivas, los datos del GPS o la hora cuando estás entrenando y no puedes quedarte varios segundos mirándote la muñeca. Además, aunque tiene un generoso marco negro rodeando el panel. Esto es algo que cabía esperar por el precio del dispositivo.

Puedes despertar la pantalla con el botón lateral, con un doble toque o con el gesto de girar la muñeca. Para apagarla sólo tienes que cubrirla con la palma de la mano.

La resolución es de 450 x 390 píxeles y no vas a distinguir los píxeles a no ser que te pongas a mirar a una distancia inusual. Esta resolución hace que las letras sean nítidas y las esferas con líneas finas que imitan a los relojes analógicos se vean muy definidas. En el Watch hay unas cuantas carátulas o esferas, pero para personalizar de verdad tanto la apariencia como los widgets, tendrás que ir a Mi Fitness, la app de control.

Podemos colocar widgets más allá de la pantalla del reloj. Son personalizables y el diseño de tarjetas es atractivo.

Antes de hablar de eso, vamos a terminar con la pantalla hablando de un elemento fundamental: el brillo. Según Xiaomi, cuenta con un brillo de 600 nits y, en la práctica, es suficiente para no tener problemas en días soleados. No me habría quejado si tuviera un nivel algo más alto, pero en un día muy soleado pude ver bien los datos del GPS.

Lo que no me gusta tanto es que no tenemos un sistema de brillo automático. Entiendo que en modelos Lite sea algo que no se introduzca para ahorrar costes todo lo posible, pero habría sido un buen añadido en esta generación. Así que, el sistema es manual y tienes que ir a configuración → pantalla → brillo y ajustarlo a tu gusto.

El brillo sólo se puede controlar manualmente deslizando esa pantalla. Ojalá un sensor para que fuera automático...

No es un brillo dividido por niveles, sino un control deslizable. En el primer tercio, más o menos, no noto diferencia entre los distintos pasos, pero entre el segundo y el final de la barra sí se nota que el nivel de brillo es más intenso y va cambiando gradualmente. Mi recomendación es que lo dejes por la mitad, al 50% más o menos, y que lo pongas al máximo en un momento puntual que necesites más brillo, como en una excursión por el campo.

Personalización generosa en un sistema bastante limitado

Está “mal” decir que el Redmi Watch 2 Lite era la anterior generación cuando, en realidad, era la versión “recortada” del Redmi Watch 2, pero es el que llegó a España antes que Redmi Watch 3 y, por tanto, nuestro último punto de referencia. Bien, pues uno de los mayores puntos en contra del dispositivo era el rendimiento.

Si tiramos de abajo a arriba, desplegamos el panel de ajustes rápidos.

Mi compañero José García lo describió como un sistema errático y perezoso, algo que se apreciaba en el vídeo que dejó como ejemplo en el análisis. Así que… bueno, el rendimiento y la fluidez de este Redmi Watch 3 era algo que me preocupaba. Y tengo que confesar que el primer día la cosa no fue muy bien, pero lo solucioné y lo cierto es que el sistema va como la seda. Me explico.

En el momento de configurar el reloj, activé todo lo que tenía que activar excepto el medidor de estrés. Eso lo he probado manualmente unos días más tarde y te recomiendo que no lo actives o que, de hacerlo, no le prestes atención porque los datos son una lotería. Bien, pues uno de los parámetros que activé fue el de las notificaciones. Todas las del teléfono. Ahí estuvo el error.

Y si tiramos de arriba a abajo, aparecen las notificaciones. No vas a poder responder ni ver los emojis que te manden.

Me lo puse un viernes y los primeros días todo fue bien. Cuando llegó el lunes, sin embargo, empezaban a llegar muchísimas notificaciones juntas, lo que hacía que el reloj no dejara de vibrar y, además, se bloqueara. Imagino que estaba saturado. Tardé unas horas en darme cuenta de que Gmail era el culpable. Tengo configurada una cuenta profesional a la que llegan muchísimos correos y, ante esa situación, la app muestra un problema de sincronización. El resultado es que manda todos los correos de golpe al reloj y se provoca ese bloqueo momentáneo.

Me fui al apartado de configuración de notificaciones, desactivé Gmail y el resto de la semana fue perfecto. Las notificaciones llegaron en tiempo real, sin saturar el dispositivo y sin mayores problemas. No vas a poder responder mensajes, los emojis siguen sin mostrarse (en su lugar aparece un cuadradito) y los stickers ni mucho menos, pero todo lo demás va genial.

Podemos poner las apps instaladas (que no podemos desinstalar) en formato de lista o de cuadrícula.

Lo que sí vas a poder responder son llamadas con ese altavoz/micrófono integrado, pero además puedes guardar hasta diez contactos en la memoria de la app y a los que puedes llamar cuando quieras siempre que tengas el móvil cerca. No es un reloj LTE, así que seguirás necesitando tener el teléfono a la distancia de la conexión Bluetooth.

Esta posibilidad de llamar y recibir llamadas es un buen argumento de compra. Hay un par de ocasiones en las que me llamaron y me resultaba imposible coger el móvil. Tampoco tenía los auriculares, así que era responder desde el reloj o pasar de la llamada. Una fue en la ducha y la otra lavando los platos. Y tengo que decir que escuché muy bien lo que tenían que decirme y que a mí también me escucharon correctamente.

De nuevo, no está pensado para que salgas a hacer la compra y dejes el móvil en casa porque no vas a poder responder mensajes, no podrás pagar y no es un dispositivo autónomo, pero sí es un reloj que puedes llevarte en tu sesión de carrera diaria para registrar la ruta con el GPS y no llevar peso extra.

No es mi caso, ya que siempre que salgo de casa necesito llevar música y aquí no se almacenan datos, simplemente aparece un reproductor que nos permite controlar la pista y el volumen de lo que se reproduce en el móvil, pero bueno, puede que sí sea el tuyo.

El reloj no tiene almacenamiento interno, así que el reproductor de música se limita a los controles de lo que se reproduzca en el móvil.

Por otro lado, el sistema es fluido. Tienes cuatro esferas que puedes personalizar (una de reloj más hasta otras tres con diferentes diseños) con información de salud, pero también con el tiempo, el cronómetro o un temporizador; si desde la pantalla del reloj tiras hacia arriba, verás atajos para los ajustes, el modo cine, la linterna, el modo no molestar o activar/desactivar el gesto de levantar para activar la pantalla; y si tiras hacia abajo aparecen las notificaciones.

Puedes ver las aplicaciones instaladas en forma de cuadrícula o de lista y algo importantísimo que has de tener en cuenta es que lo que está instalado es sagrado: ni podrás desinstalar nada ni podrás añadir aplicaciones. Más allá de las apps básicas como la medición deportiva, el registro de actividad, la medición de salud, el control de cámara remoto, el registro de llamadas y los contactos, tenemos Alexa.

Si activamos Alexa en la app Mi Fitness, gracias al altavoz podrás ir al icono del asistente, decirle algo y que te responda con una notificación en pantalla. No te va a “cantar” el tiempo que hace, pero sí te da la información por escrito. Y sí, puedes controlar la domótica de casa. Funciona como una extensión de la app Alexa de tu smartphone y puede ser de ayuda en ciertas circunstancias.

Y ya que hablamos de la aplicación, en Mi Fitness vas a encontrar más detalles sobre las sesiones deportivas y las mediciones de salud que realices. No es la aplicación que más profundiza en los datos, pero nos vale para analizar las fases que hemos atravesado durante el entrenamiento, así como ver unos datos más pormenorizados de las rutas de senderismo o bici con GPS.

Vas a poder lanzar entrenamientos desde ella, pero al final imaginamos que terminarás haciendo eso siempre desde el reloj y, aunque hay varios parámetros que se pueden configurar directamente en el Redmi Watch 3, siempre es más cómodo hacerlo desde la aplicación. Me refiero al tiempo de espera de la pantalla, a los modos programados para que no salten notificaciones o se encienda la pantalla por la noche o los widgets.

Es una app estable que no me ha dado problemas durante los últimos días, pero los mencionados widgets me salen con nombre en chino desde el móvil y hay una alerta concreta del reloj, la de iniciar ejercicios automáticamente, que me aparece en alemán. Todo está perfectamente actualizado, es la versión estable de la aplicación y está configurado en español, así que no entiendo por qué aparecen elementos y avisos en otros idiomas.

Bien a la personalización de los widgets y sus numerosas opciones de diseño de tarjetas. Mal porque el nombre viene en chino.

En el caso de los nombres de los widgets te imaginas de qué va cada uno con el icono asociado, pero en el caso del “estás haciendo deporte, ¿quieres registrarlo?” supe que me quería decir eso porque le di a la primera opción y resultó que empezó a contar.

Haciendo deporte con el Redmi Watch 3

Así se ve la pantalla en el día más soleado del año. No está nada mal.

Aparte de sus funciones como visor de notificaciones y reloj, el Redmi Watch 3 tiene un enfoque deportivo y lo he puesto a prueba con una sesión de una hora diaria, así como un par de registros con el GPS. Voy a empezar hablando de esto.

En una prueba al aire libre, en mitad del campo, el GPS me ha parecido extremadamente preciso, hasta el punto de mostrar en el mapa una ligerísima desviación que hice durante el camino. Te muestra estadísticas sobre la cadencia, los pasos totales o la distancia y en ningún momento recibí un mensaje de alerta sobre la cobertura.

En ciudad fue algo diferente. Lo primero es que le costó pillar el satélite y en la ruta veo momentos en los que es muy preciso y otros en los que paso entre edificios (no muy altos, cuatro o cinco alturas) y muchos árboles en los que la ruta se inventa el camino. No es extremadamente impreciso, pero el resultado no es el mismo que tuve en el campo.

Sobre los entrenamientos, el conteo de pasos es correcto, mide 121 deportes aunque seguramente monitorizarás tres o cuatro regularmente y lo que me gusta es la consistencia entre las mediciones. A continuación, te dejo tres entrenos similares en intensidad, con alguna pequeña variación en los ejercicios, pero con la misma duración:

Mediciones muy similares en entrenamientos idénticos. Cambian los ejercicios, pero la intensidad total es más o menos la misma.

Como ves, no hay picos extraños en las gráficas y el total de calorías y pulsaciones es bastante similar. Si miro los detalles de las gráficas de los entrenamientos de pesas también encuentro un patrón y pasa exactamente lo mismo en mis sesiones indoor de bicicleta, con una gráfica mucho más plana y unas calorías quemadas que siempre rondan la misma cifra.

No estamos ante un dispositivo médico, pero me gusta que sea consistente. Eso es importante para marcarnos metas y ver si progresamos en nuestros entrenamientos. Para ser un dispositivo de este precio, me ha sorprendido esta característica porque hay muchos otros (varios de ellos de Xiaomi) que muestran resultados totalmente distintos ante sesiones de entrenamiento exactamente iguales.

La medición del sueño también ha sido acertada excepto un día que, no sé por qué, no me contó las horas de sueño. No sé realmente cuánto tiempo paso en cada fase del sueño (me tendré que fiar del sistema), pero muestra de forma bastante fiel las horas a las que me acuesto y a las que me levanto. La noche antes del Gran Premio de Australia de Formula 1, por ejemplo, me muestra inquieto y con pocas horas de sueño. Acertó.

Si usabas Zepp Life, puedes transferir los datos a Mi Fitness. Además, también puedes conectar la app a Strava para compartir datos.

Y ojo, olvida la multitarea. Al tratarse de un sistema RTOS, lo que estás ejecutando en ese momento es lo que verás. Si estás entrenando, puedes controlar la música, pero nada más. Olvida salir a la pantalla principal para ver cualquier otra cosa (como una notificación) o, incluso, ir a ajustes para cambiar el brillo. Es algo lógico teniendo en cuenta las limitaciones del sistema, pero también una característica que arrastramos desde hace años y que iría bien ir cambiando.

Más de una semana de autonomía con un uso intensivo

La autonomía es un punto clave en cualquier dispositivo, pero más aún en un smartwatch. Si podemos pasarnos varios días sin quitarnos el reloj, mejor que mejor. Xiaomi promete hasta 12 días de autonomía y en su web detalla una serie de condiciones de uso.

No son unos ajustes conservadores y muchos usuarios podrán llegar a esa cifra, con 60 minutos de ejercicio semanal con GPS activado y 50 notificaciones diarias. En mi caso, con una sesión de una hora de ejercicio diario, una hora y media de GPS y más de esas 50 notificaciones, he tenido para casi nueve días de autonomía.

De hecho, me lo puse el viernes 24 de marzo a las 15:00 y me lo quité para cargarlo con un 1% de batería restante el domingo 2 de abril a las 11:15. Considero que es una buena autonomía y se ajusta bastante a lo que dice el fabricante, pero lo que más me ha sorprendido es la carga.

La batería de 289 mAh me ha durado casi nueve días con un uso intensivo, sin quitármelo en todo el día y con el brillo alrededor del 50%

En estos dispositivos solemos ver que las cargas se van a la hora y media o dos horas cuando las baterías, realmente, no son muy grandes. Aquí tenemos una carga completa en una hora y, además, es de las más lineales que he visto: un 25% cada 15 minutos. No tenemos carga inalámbrica como tal, sino un cargador magnético con dos pines.

Xiaomi Redmi Watch 3, la opinión de Xataka

Llegamos al final del análisis del Redmi Watch 3 y las sensaciones son las de haber tenido una pulsera cuantificadora con una caja de reloj, pero con elementos de smartwatch. Que la pantalla sea grande permite que ver las notificaciones y cualquier tipo de dato sea muy cómodo.

No entiendo que no haya un sistema de brillo automático, pero el nivel máximo cumple en cualquier situación y la sensibilidad es la adecuada. Además, habiéndole metido bastante trote, la pantalla no tiene ni un arañazo. Que la barra de accesos rápidos sea dinámica (integrando los controles de la música cuando estás reproduciendo algo) es un puntazo y la autonomía me ha convencido.

Tiene todo lo que encontramos en una pulsera cuantificadora, pero el GPS y la opción de responder llamadas es un extra interesante y un motivo para apostar por este modelo.

Seguimos sin poder responder notificaciones, pero estar haciendo cualquier cosa en casa y responder una llamada, además con una muy buena calidad tanto del micro como del altavoz, es un buen añadido. Ojalá un sistema para responder mensajes con frases prefijadas o con emojis, ya que es algo que daría mucho valor al dispositivo.

Si esto último no es un requisito fundamental para ti, es un buen reloj. Tiene algunas limitaciones, pero eso ya tendrás que ponerlo en la balanza para ver si apuestas por él a sus 119 euros de lanzamiento.

8,5

Diseño 8,5
Pantalla 8,5
Software 8
Autonomía 9
Interfaz 8,5

A favor

  • Pantalla grande y brillante.
  • Se ajusta perfectamente a la muñeca.
  • Consistencia al monitorizar entrenamientos.
  • La función de llamadas es muy interesante.

En contra

  • Seguimos sin multitarea cuando entrenamos.
  • Sin sensor para el brillo automático.
  • Si llegan muchas notificaciones, se aturulla.


Xiaomi Redmi Watch 3 - Smartwatch con pantalla AMOLED de 1,75", 121 modos deportivos, llamadas bluetooth, SpO₂, GPS, 5ATM, hasta 12 días de batería, negro (Versión ES + 3 años de garantía)

El dispositivo ha sido cedido para la prueba por parte de Xiaomi. Puedes consultar nuestra política de relaciones con empresas.

En Xataka | Mejores smartwatch en calidad precio: cuál comprar y siete relojes inteligentes recomendados

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