Probamos mi DGT, la nueva aplicación de la Dirección General de Tráfico para llevar el carnet de conducir en el móvil

Los móviles actuales nos permiten llevar casi todo guardado en ellos, desde las tarjetas del banco para pagar hasta las entradas de cine, los billetes del tren y las tarjetas de fidelización. Y eso está muy bien, sobre todo cuando te acostumbras a no sacar la cartera para pagar o a no imprimir en papel, pero la cosa cambia cuando hablamos de identificación.

Por el momento, en España no tenemos un formato que nos permita llevar un documento oficial en el móvil, digamos un DNI, el pasaporte o el carnet de conducir, pero la Dirección General de Tráfico (DGT de aquí en adelante) ha dado un primer paso en este sentido: mi DGT, una aplicación en la que podemos llevar nuestro carnet de conducir... más o menos.

En Xataka, gracias a nuestros compañeros de Xataka Android, hemos tenido ocasión de probarla a través del archivo APK. La DGT publicó la app como una beta abierta, pero limitada, así que ahora mismo ya no es accesible. Para poder instalarla en el móvil será necesario esperar a que se activen más huecos, pero mientras eso llega te dejamos los enlaces a Google Play y App Store para que los tengas a mano (la versión de iOS es accesible por todos). Evidentemente, es completamente gratuita y sin anuncios. Dicho esto, vamos a ver qué ofrece.

Lo primero es el registro

Después de una presentación de la app en la que tenemos que seleccionar el idioma (castellano, gallego, catalán, euskera o valenciano), nos muestran un resumen de las funciones y nos adelantan que, próximamente, seremos notificados de multas para poder pagarlas y que podremos acceder a los principales trámites de la DGT, mi DGT nos pide que nos identifiquemos, usando el sistema Cl@ve.

Para poder usar este sistema es necesario haber obtenido previamente una credencial electrónica de identificación mediante algunos de los procedimientos. Para ello, hay que registrarse de forma presencial en alguna de las oficinas del registro, o bien online, usando un certificado electrónico reconocido. En resumen: para poder usar Mi DGT hay que estar registrado previamente en el sistema, y ese proceso es un poquito lento.

La app nos da la opción de acceder usando:

• DNI electrónico o certificado electrónico: para eso será necesario instalar el certificado electrónico en el smartphone, algo bastante sencillo de hacer.
• Usando un PIN 24 horas, que es lo más sencillo para probar la aplicación, ya que solo tenemos que introducir el DNI, la fecha de expiración y un código que nos llega por SMS.
• Usando una clave permanente, más adecuado para aquellos usuarios que accedan a menudo a los servicios electrónicos de la Administración.

Nosotros, para el caso, hemos usado el PIN 24 horas, tal y como puedes ver en las capturas superiores. Obtenerlo, si ya estás registrado en el sistema, es bastante rápido, así que para echar un vistazo a la aplicación es más que suficiente.

Un repaso a mi DGT

Lo primero que queremos destacar es que la aplicación no permite sacar capturas ni grabar la pantalla, motivo por el que todas las imágenes que ilustran este artículo son fotografías (los datos personales han sido difuminados). Es una medida de seguridad como la que implementan algunos bancos en sus aplicaciones y está pensada para que no podamos compartir información personal con otras personas.

De la misma forma, la app nos insta a añadir un bloqueo de pantalla en caso de que no lo tengamos para poder acceder a ella, y es recomendable porque, en fin, tienes tus datos en ella, y mejor que estén seguros en caso de que pierdas el teléfono o te lo roben. Que ojalá no pase, pero hombre prevenido vale por dos.

Dicho esto, la pantalla principal de la aplicación nos muestra la misma foto que hay en nuestro carnet de conducir y que no podemos cambiar como en las redes sociales (para mi desgracia, porque la foto que tengo es de cuando me saqué el carnet de conducir hace muchos años y bueno...), además de nuestro nombre y la cantidad de puntos que tenemos, en mi caso 14.

Justo debajo tenemos un registro de los vehículos registrados a nuestro nombre. Dejando de lado que a mí me aparece una Honda PES125 que me robaron a los 21 días de comprarla, dentro de la ficha del vehículo nos aparece su estado ("Baja por sustracción", en mi caso), si el seguro y la ITV están al día y todos los datos relacionados con la marca y modelo, la entidad aseguradora y el titular.

También podemos acceder al permiso de circulación con todos los datos y, como dato curioso, el fondo de pantalla que hay debajo usa el acelerómetro para cambiar los colores, como sucede en los billetes y el pasaporte. Conforme mueves el teléfono, el color del escudo de España y del logo de la DGT cambian. Destacar que podemos generar un código QR para el permiso de circulación que, teóricamente, debe poder ser escaneado llegado el momento.

Volviendo a la pantalla principal, justo al lado de nuestra foto y bajo nuestro nombre tenemos la opción "Ver mi carnet". Si pulsamos sobre ella accederemos a una reproducción digital de nuestro carnet de conducir (con el mismo fondo de pantalla mencionado anteriormente) y, si deslizamos hacia los lados, podremos alternar entre la cara delantera y trasera. Vamos, como un carnet de conducir, pero digital, aunque volveremos a esto más adelante. También podemos generar un código QR del carnet.

En la pantalla principal también tenemos un icono de una campana, que son las notificaciones. Allí aparecerán todas las notificaciones emitidas por la DGT que, en mi caso, son las de la caducidad del seguro, la ITV caducada de la moto y la baja por sustracción de la misma. A este mismo menú de notificaciones también se puede acceder desde el menú lateral.

Y ahora que hablamos de este menú, decir que se nos muestran cuatro opciones: "Inicio" (la pantalla principal), "Mis vehículos" (que también lo tenemos en la pantalla principal), "Verificaciones" y "Avisos y alertas". El que nos interesa es "Verificaciones", ya que es el único que no hemos visto hasta el momento.

En "Verificaciones" podemos comprobar la autenticidad de los documentos oficiales expedidos por la DGT mediante los códigos QR o los códigos de barras que se encuentran en ellos. Se nos muestran dos botones: "Permiso de conducción" y "Permiso de circulación". Pulsemos el que pulsemos, la app nos pedirá permiso para acceder a la cámara para poder escanear dichos códigos.

Por último, en los ajustes de mi DGT podemos añadir nuestro teléfono y correo electrónico, cambiar nuestro domicilio de notificación de forma oficial, cambiar el idioma, activar o desactivar las notificaciones y cerrar la sesión. Esto es todo lo que, por el momento, ofrece mi DGT, aunque no podemos olvidar que se trata de una app en fase de prueba, así que cabe esperar que cambie o se añadan funciones en la versión final.

Como punto negativo menor, el botón para ir hacia atrás no funciona siempre, teniendo que recurrir a los botones mostrados por la aplicación, que siempre se colocan en la zona superior, haciendo que no sea fácil acceder a ellos con una sola mano en móviles más alargados.

Por ahora no sustituye a la documentación física

Viendo la aplicación, parece que tenemos todo lo necesario para poder dejarse el carnet de conducir y los papeles del vehículo en casa, pero nada más lejos de la realidad. La propia aplicación advierte que sigue siendo obligatorio llevar la documentación en formato físico hasta que se aprueba una regulación que nos permita "llevar únicamente la app y olvidarnos de los papeles". ¿Cuándo llegará eso? No se sabe.

Este es un pequeño pasado para la identificación digital oficial en el smartphone, puesto que, como se establece en la Ley Orgánica 5/1985 del 19 de junio, del régimen electoral general:

"El derecho a votar se acredita por la inscripción en los ejemplares certificados de las listas del censo o por certificación censal específica y, en ambos casos, por la identificación del elector, que se realiza mediante Documento Nacional de Identidad, pasaporte, o permiso de conducir en que aparezca la fotografía del titular o, además, tratándose de extranjeros, con la tarjeta de residencia".

Pero por el momento, solo podemos esperar a que, por un lado, la aplicación salga de la fase de pruebas y, por otro lado, que la regulación se aprueba para que la aplicación sea útil en el sentido oficial.