Transmitir tu alegría en un email es casi imposible... a no ser que uses emoticonos ;)

Seguro que, en más de una ocasión, habéis vivido alguna confusión vía email o mensaje debido a que el receptor del mismo no pudo interpretar el tono con el que lo habías escrito. ¿Cómo saber si alguien está siendo sarcástico o frío con nosotros? Y si a eso añadimos la brevedad con la que algunos nos expresamos a través del móvil... bueno, digamos que responder un "ok" puede ser un "ok de me gusta lo que has hecho" o un "ok pero déjame en paz".

Pero ¿por qué es tan difícil transmitir un sentimiento a través de palabras escritas? En Fastcodesign creen tener la respuesta: es una mezcla de egoísmo y de negatividad. Según Kristin Byron, profesora experta en comunicación, por naturaleza tendemos a optar por lo neutro y por lo negativo. Por eso restamos importancia sin querer a una felicitación escrita, que percibimos en tono neutro, y asumimos lo peor cuando el tono no está del todo claro.

En el artículo citan varios estudios antiguos. Uno de ellos, de 2005, asegura que por email somos capaces de detectar seriedad o sarcasmo sólo un 56% del tiempo mientras que cara a cara la cifra sube hasta el 73%. En otro de 2011 estudiaron las comunicaciones entre los participantes: unos tenían que hablar cara a cara y otros sólo por correo. El hablar cara a cara conlleva más esfuerzo (tienes que interesarte y charlar con la otra persona estando frente a ella), pero los participantes aseguraron haber disfrutado más de una conversación así.

¿Y los emoticonos?

¿Y los emoticonos? Si bien no se mencionan en ninguno de estos estudios, hay otros informes que analizan su impacto en el receptor a la hora de procesar un mensaje. En una investigación dirigida por el Florida Institute of Techology propusieron a los participantes valorar los mensajes que os dejamos a continuación:

No puedo ir a la reunión que fijaste porque coincide con la reunión con mi equipo. Mándame un email para decirme lo que me he perdido

No puedo ir a la reunión que fijaste porque coincide con la reunión con mi equipo. Mándame un email para decirme lo que me he perdido :-)

Casi iguales, ¿verdad? Pues los participantes en el estudio detectaron un tono claramente negativo con el primer mensaje. Los que vieron el segundo, sin embargo, no lo vieron como una crítica, sino como un mensaje amable. ¿Por qué es esto? Según otro estudio, el cerebro humano reacciona a los emoticonos como si estuviera frente a una cara real. Así que ya sabes: puede que quede informal, pero para transmitir emociones en un correo, la mejor opción es recurrir a nuestros queridos smilies ;)

Imágenes | el_finco