El cinturón, ese dispositivo del vehículo que en determinadas ocasiones puede salvarnos la vida, aunque en muchas otra nos mate a nosotros... o a algo que querríamos más que a nuestras propias vidas.
Un invento español, más exáctamente de la Universidad Politécnica de Valencia, consiste en un cinturón que se ajusta a distancia dependiendo de las órdenes que le envie una persona, en este caso un médico. El uso que le han encontrado se refiere a los enfermos del corazón. El propio cinturón registra las señales biológicas del paciente, y las envía a su médico. Éste, a distancia (esté donde esté) puede ajustar y regular la presión del propio cinturón.
Otro ejemplo que se me ocurré es adaptar este mismo sistema al caso de una embarazada. El funcionamiento sería similar. Ahora, la duda que me planeto es: ¿Y si ocurre un accidente? El cinturón actuaría de la misma forma si anteriormente lo ha ajustado un médico, o si es uno normal como los que tenemos ahora. ¿No?