Tesla Motors, a algunos de vosotros es muy probable que os suene, aunque a otros si no seguís de cerca el mundo de los coches eléctricos puede que no mucho, de hecho en España es muy muy difícil encontrarse con un Tesla en la calle. Yo mismo ví el primero en el extranjero.
Sin ánimo de menospreciar al resto de marcas de automóviles, Tesla Motors se ha ganado en sus diez años de vida el poder ser considerada La marca de coches eléctricos. Así nació en el año 2003, como fabricante exclusivamente de turismos 100% eléctricos, con la vista puesta en el futuro y apostando con decisión y no poco riesgo por ellos.
Nacida en Silicon Valley
Qué bien nos vendría en España tener un Silicon Valley... Fue allí dónde nació esta marca que eligió como nombre el apellido de un gran inventor e ingeniero, de origen serbio aunque nacido en un pueblo de la actual Croacia, que probablemente no tuvo tanto reconocimiento internacional en su día como hubiera merecido: Nikola Tesla.
En el año 2003 dos equipos de trabajo propusieron a la empresa californiana AC Propulsion comercializar su prototipo de deportivo 100% eléctrico, el tzero (de 1997), realmente un coche de gasolina convertido a eléctrico. Pero AC no se decidía. Los dos equipos finalmente se unieron para sumar esfuerzos y poder comercializar un deportivo eléctrico.
Y así se juntaron Martin Eberhard, Marc Tarpenning, Ian Wright, J.B. Straubel y Elon Musk. Los dos primeros arrancaron Tesla Motors en 2003 y el resto se incorporó en 2004, aunque se considera que los cinco cofundaron la marca.
La sede de Tesla se encuentra en Palo Alto, California, y la fábrica en Fremont, también California (EE.UU.). Si os gusta la fabricación no deberíais perderos el documental sobre la moderna factoría de Tesla y los vídeos sobre la construcción del Tesla Model S (carrocería, pintura y montaje).
Elon Musk, el visionario
Detengámonos brevemente en uno de esos cinco nombres: Elon Musk. De nuevo a algunos de vosotros es muy probable que también os suene. Y no lo digo solo porque haya hecho algún cameo en el cine o porque se hayan inspirado un poco en él para el personaje de película de cierto millonario aficionado a las armaduras voladoras, sino también porque ha sido reconocido por la revista Time como una de las 100 personas más influyentes del mundo (y ya repite varios años, desde 2010).
Y es que Elon Musk ha sido un emprendedor que empezó a amasar su fortuna recién terminada la carrera y ha estado presente, o todavía lo está, en empresas de tecnología puntera, con una gran visión para los negocios, desde internet hasta el espacio, y por supuesto los coches, el tema que nos ocupa. Si queréis conocer con más detalle la historia de este visionario no dejéis de leer el artículo que hemos publicado en Motorpasión Futuro.
En un primer momento Musk no era el director ejecutivo (CEO) de Tesla, pero con el paso de los años finalmente sí asumió el cargo, poniendo además bastante dinero sobre la mesa para que la marca siguiera adelante, todo sea dicho de paso.
Tesla Roadster: el deportivo sin una gota de gasolina
Los comienzos son casi siempre duros, y los de Tesla Motors lo fueron. Fue en 2006 cuando se presentó su primer modelo, el Tesla Roadster. ¿Sabéis qué tipo de coche era? Sí, exactamente, un deportivo eléctrico, como aquel que tres años atrás querían comercializar. El Tesla Roadster era un biplaza de menos de cuatro metros, de techo desmontable, de genética Lotus, con propulsión trasera, con entre 252 y 292 CV según versiones, unos 394 km de autonomía, y que además era muy rápido.
Por aquel entonces la factoría Tesla de Fremont no existía, y se fabricaba en Hethel (Reino Unido) y en Menlo Park (EE.UU.). Fue toda una demostración de lo que un coche eléctrico podía ser, aunque eso sí, no era barato, costaba unos 100.000 euros (e incluso un poco más), pero si bien es mucho dinero, no era tan caro si se tenía en cuenta que su carrocería estaba realizada con plástico reforzado con fibra de carbono y que las baterías costaban lo suyo.
No se fabricaron demasiadas unidades del coche a pesar de ser de producción en serie. El primer año, entre 2007 y 2008, fue sobre todo de puesta en práctica, ensayo y error, teniendo incluso que cambiar la transmisión porque daba problemas. Hasta 2012 se vendieron finalmente algo más de 2.400 unidades en total en el mundo.
Los socios de Tesla Motors, y sobre todo Elon Musk, entendían que la apuesta era a largo plazo y que hay que invertir primero para recoger después. Él tenía claro que la finalidad no era fabricar solo coches deportivos, sino otro tipo de modelos que sirvieran para todos los conductores, también para la familia, y que por tanto pudieran venderse mucho más, con berlinas grandes y medias y hasta todocaminos.
Y durante varios años Musk fue invirtiendo más dinero en Tesla, aumentando su porcentaje en las acciones de la compañía. Las cosas no terminaban de ir bien, y no llegaban los beneficios, todo eran gastos y las ventas no eran tan altas como para amortizar costes.
Durante un tiempo incluso la viabilidad y continuidad de Tesla Motors estuvo en una situación delicada. El propio Musk lo reconoció el año pasado. En 2009 Daimler (Mercedes-Benz, Smart y compañía) compraron varios millones de dólares de acciones de Tesla, salvándola de la quiebra.
Este acuerdo con el grupo alemán ha servido para mantener ciertos contratos de trabajo de Tesla como proveedor de componentes eléctricos, motor y baterías principalmente, para varios modelos eléctricos de Mercedes-Benz, como el monovolumen Clase B Electric Drive y el compacto Clase A Electric Drive, o el Smart ForTwo Electric Drive.
Un poco después ese mismo año, recibieron un crédito de varios cientos de millones de dólares del Departamento de Energía de los Estados Unidos y gracias al aumento en las entregas del Roadster las cuentas empezaban a dejar de ser preocupantes.
Tesla Model S, la confirmación
Pero había que crecer. Y había que tener una factoría propia, con más capacidad, que pudiera fabricar el nuevo modelo de la marca, el Tesla Model S, una berlina eléctrica de casi cinco metros, con hasta siete plazas, hasta 422 CV y hasta 426 km de autonomía, que sin ser un deportivo tenía prestaciones como tal. Y esto exigía invertir más dinero aún.
En el año 2010 sale a la bolsa y consigue de nuevo un interesante acuerdo con otra marca de coches, Toyota. Esta compra varios millones de dólares de acciones y a cambio Tesla colaborará tecnológicamente en algunos modelos eléctricos nipones, como el Toyota RAV4 EV.
La estrategia es inteligente, si no se venden sus coches eléctricos, al menos venderá a través de los coches de esas otras marcas que llevan sus componentes.
Pero sí que se venden. El Tesla Model S fue todo un éxito en reservas. Empezó a fabricarse en 2012 y la marca tuvo que hacer grandes y costosos esfuerzos para fabricar muchas más unidades y tardar lo menos posible en entregar sus coches a los clientes, a costa de poner otra vez en peligro las cuentas de las compañía.
En 2012 Tesla Motors presenta también su nuevo, y por ahora último modelo, el Tesla Model X, un todocamino eléctrico. De nuevo causa sensación y es otra vez todo un éxito de reservas, y eso que se empezará a fabricar en 2014.
Y aún hay más, pensando en el futuro como siempre. Para 2016 o 2017 Tesla Motors espera poder comercializar otro nuevo modelo, más pequeño y más asequible que el Model S.
Como complemento a sus coches, a finales de 2012 Tesla presentó su supercargador de 90 kW, que recarga las baterías del Model S al completo en aproximadamente una hora. La propia Tesla Motors se está encargando de crear una red de estaciones de recarga ultra-rápida repartidas por las autovías que además los clientes pueden utilizar gratis. La estrategia otra vez ayuda a vender coches, pues hace que estos sean más utilizables para viajar y sobre todo cuida a quien se ha comprado un Tesla.
Pero no solo hay que vender. A principios de este año la empresa tuvo que replantearse la fabricación del Tesla Model S para ser más eficientes y reducir costes. Y lo bien invertido y bien gestionado, finalmente da sus frutos. Las ventas del Model S siguen subiendo, y eso que es un coche con un precio a partir de unos 70.000 euros. El coche gusta, y hasta ha sido reconocido su valor al ser galardonado como World Green Car of the Year 2013.
Para sorpresa de algunos en el primer trimestre del año ha sido el coche eléctrico más vendido en los Estados Unidos, por delante de modelos más baratos. Hace apenas unos días Tesla Motors anunciaba beneficios, 15 millones de dólares.
Han pasado diez años, se invirtió mucho dinero, hubo que pasar momentos delicados y esperar... pero en efecto, como creían desde el principio, finalmente, a más largo plazo, se pueden recoger los beneficios.
En Motorpasión Futuro | Elon Musk, la historia de un visionario
Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com
VER 20 Comentarios