Seguro que cosas como estas ayudan a disminuir los accidentes en las carreteras, así que tendremos que pasarle la nota a la DGT a ver que les parece.
Por ahora, no se trata más que de un diseño junto con la idea: una pulsera que controla el estado del conductor de un vehículo y se comunica con el coche a través de una etiqueta RFID, haciendo que, por ejemplo, si el conductor está cansado, la pulsera vibre para avisarle del peligro.
Pero, como ya he dicho anteriormente, sólo es un prototipo de un producto que, de hacerse realidad, podría salvar más de una vida. Habrá que estar atentos a su posible desarrollo.
Vía | Techeblog