Los llaman vehículos personales y todos ellos pugnan por convertirse en la solución definitiva a los problemas de tráfico en las grandes ciudades. La idea es crear un vehículo pequeño, maniobrable y de consumo bajo que permita a una o, como máximo, a dos personas colarse entre el tráfico en trayectos cortos.
Cualquier persona contestaría que esto ya existe y que se llama 'moto', pero la industria del motor no está de acuerdo y está convencida de que hay un santo grial oculto por ahí, un vehículo mítico más seguro y confortable que cabalgar sobre dos ruedas. A continuación os ofrecemos una recopilación de los diez vehículos personales más... digamos interesantes que hemos visto últimamente.
Segway
Inevitable comenzar con uno de los pocos vehículos personales que han logrado ir más allá de un prototipo de laboratorio para enseñar en ferias. Los Segway tienen el mérito de ser el primer vehículo basado en un giróscopo conectado a un ordenador que se encarga de mantener el vehículo en precario equilibrio.
¿Y qué ocurre cuando las baterías se van agotando? Pues que el conductor del Segway tiene muchos boletos para acabar con sus huesos en el duro suelo. Pese al enorme entusiasmo inicial cuando fue presentado en 1999, su éxito nunca ha sido el esperado. El que el millonario que compró la compañía en 2010, Jimmy Heselden, falleciera en un accidente mientras probaba uno de ellos tampoco ayuda. A pesar de todo, Segway tiene más de cien concesionarios abiertos en todo el mundo.
Hyundai E4U
El vehículo personal más reciente presentado por Hyundai sigue los pasos del Segway pero añadiendo unos ruedines en la parte trasera para mayor seguridad. También incorpora un chasis en forma de huevo para proteger nuestras piernas y un casco que sólo podemos definir como el accidente resultante de que el conductor del Hyundai E4U hubiese atravesado a toda velocidad una tienda de parabrisas.
El resultado estético es muy acertado si lo que queremos es brindar un sentido homenaje urbano a Calimero. Nos tememos que Hyundai tendrá que pulir algo el diseño para que sus ocupantes no sean blanco de palizas al pasar por ciertos barrios como muy bien apuntabais en vuestros comentarios.
Toyota i-Road
Allá por 2008, Toyota presentó su propia versión del Segway. Se llamaba Winglet y era un vehículo personal giroscópico con el que podíamos desplazarnos a la fulgurante velocidad de 6Km/h. No imaginamos para que puede alguien querer un vehículo con el que se va más lento que andando a buen paso, a menos que haya quedado lisiado tras accidentarse con un Segway. Afortunadamente para todos, Toyota abandonó la idea del Winglet y este año ha presentado el i-Road.
El i-Road es como si cubriésemos sólo el asiento del conductor de un coche y los mandos del vehículo con una carcasa cerrada y climatizada. Capaz de girar 180 grados en sólo seis metros y con posibilidad para dos plazas, el i-Road es más que una moto cubierta y menos que un coche. Al menos no parece incómodo ni peligroso para nuestra espina dorsal.
Modi Pius EV
Los habitantes de Japón parecen tener una especial querencia por desarrollar vehículos en los que el conductor parezca un dibujo animado para menores de 7 años. Si el Hyundai E4U nos ha parecido demasiado ridículo, siempre podemos retomar nuestros juguetes de la infancia y subirnos a bordo del Modi Pius EV.
Eléctrico y capaz de circular hasta a 35 kilómetros por hora, este vehículo nos llega en un kit que tenemos que montar nosotros mismos. Eso sí, no recomendaríamos su uso en público si somos mayores de 15 años o medimos más de 1.70.
Citroën E3-Pod
Este curioso vehículo resultado de cruzar un caza Naboo con un triciclo es el ganador del concurso patrocinado por la marca francesa en el Royal London College of Art de Londres. Al igual que el Toyota i-Road, el E3-Pod inclina sus ruedas en las curvas para mayor estabilidad y su contorno aerodinámico le permite circular con mucha menos energía de su batería eléctrica.
En su defensa debemos decir que su carcasa cerrada parece ofrecer mucha más comodidad que otros modelos y que su diseño es bastante atractivo. La pega es la de siempre. Aún está en fase de desarrollo y puede que no lleguemos a verlo nunca fuera de los salones de motor.
Exocar
Digamos que un exoesqueleto mecánico flexible mide nuestro cuerpo y se adapta para convertirse en un coche a medida en el que la carrocería somos nosotros mismos. Esa es la singular propuesta de diseño de Joshua Saling.
No existen datos concretos sobre de qué se alimenta o cómo se maneja esta propuesta, así que suponemos que habrá que esperar bastantes años para verla hecha realidad. El diseño se completa con un parabrisas individual de cabeza como el del Hyundai E4U para que no nos entren insectos en la boca abierta cuando gritemos de terror en la autopista.
Ewee PT
Por qué pagar una varios miles de euros para descalabrarse con un Segway cuando podemos correr el mismo riesgo por sólo 799 euros. La compañía alemana Ewee vela por nuestro espíritu aventurero con una versión más asequible del Segway capaz de alcanzar los 16 Km/h.
El vehículo se llama Ewee PT y su desplazamiento se controla inclinando el cuerpo hacia delante o hacia atrás. Los giros, en vez de depender de un acelerómetro, confían en un pequeño joystick.
BPG UNO III
Alguien en BPG debió de ver como un motero hacía el caballito poniendo su moto sobre una sola rueda y pensó: '¡Bingo!'. El BPG UNO III es una moto de una sola rueda. En realidad es una moto de dos ruedas sólo que estas van paralelas en vez de una delante de la otra. Una tercera rueda se despliega hacia delante para convertir al Uno III en un triciclo que parece una moto si lo ves de lado. Un lío.
El UNO III es la tercera versión del prototipo original, en el que el aguerrido piloto mantenía el equilibrio sobre una gran rueda. BMG mantiene su firme compromiso por dar trabajo a los traumatólogos de todo el mundo con otros vehículos fascinantes como el DTV Shredder, un patinete con ruedas de oruga todoterreno para que nadie nos encuentre cuando necesitemos que nos recojan del suelo.
Solowheel
Seguimos con las propuestas de una sola rueda con Solowheel, un monociclo eléctrico giroscópico que pudimos ver en el CES de este mismo año y que se maneja de manera similar al Segway, inclinándonos hacia adelante y atrás, o hacia los lados para girar.
La diferencia es que aquí ni siquiera hay lugar al que agarrarse. Tan sólo un par de pequeñas plataformas sobre las que poner los pies. El Solowheel ya se puede comprar en España por un precio que ronda los 1.700 euros. Pesa en torno a 10 kilos y alcanza los 20 Km/h.
Honda U3-X
Allá por 2009, Honda trabajaba en el U3-X, un vehículo complementario compuesto por una sola rueda autoestabilizada. Al igual que el Solowheel, el pasajero apoya los pies en dos pedales, sólo que esta vez apoya sus ilustres posaderas en dos discos desplegables. El U3-X se manejaba inclinando el cuerpo en distintas direcciones y estaba concebido como un accesorio de algunos vehículos Honda.
El que no hayamos vuelto a saber nada del U3-X demuestra que el futuro de los vehículos personales requiere de unos mínimos de seguridad y comodidad. En este sentido las propuestas de Citroën y Toyota parecen las más acertadas, pero incluso así nunca se sabe si algún día los veremos en nuestras carreteras.
Ver 37 comentarios