Uno lee esto y no puede evitar pensar en aquellos cristales en los que Superman tenía grabados sus vídeos familiares. Las técnicas de memoria holográfica con las que grabar datos en piezas de cristal llevan años dando vueltas en distintos proyectos de todo el mundo, pero todo parece indicar que han cobrado un nuevo impulso gracias a un avance alcanzado por la Universidad de Southampton.
Científicos de esta universidad han desarrollado un método para convertir un cristal del tamaño de una pantalla de móvil en un sistema de almacenamiento de hasta 50GB de capacidad y cuyos datos pueden leerse, reescribirse o borrarse.
El sistema utiliza un láser para reordenar la estructura molecular del cristal formando pequeños puntos de información llamados voxels, que pueden ser leídos mediante otro láser. El proceso, por cierto, aumenta la opacidad del cristal y lo polariza.
Según Martynas Beresna, directora del proyecto, los cristales de memoria obtenidos mediante este procedimiento no se ven afectados por las altas temperaturas (resisten hasta casi 1.000 grados). Además, pueden conservarse durante miles de años sin perder un sólo bit de información.
Los resultados del estudio han sido publicados en la revista Scientific journal of Applied Physics y el equipo de Beresna está trabajando con la compañía lituana Altechna para crear una versión comercial del invento.
Vía | The Telegraph