Tick-tock-tick-tock. Es el modelo de evolución de Intel mediante el cual se van alternando mejoras en el tamaño de los transistores (tick) o en la microarquitectura general (tock). Recientemente hemos pasado por el tick de Ivy Bridge con esos 22 nanómetros Tri-Gate, así que el año que viene toca tock: su nombre es Haswell, aunque esto es algo que se sabe desde hace varios años.
Haswell será en 22 nanómetros manteniendo los transistores 3D, pero debería mejorar notablemente en el rendimiento ofrecido por Ivy Bridge. Intel ya está preparando las fábricas para comenzar con la fabricación de los procesadores Haswell, cuyo desarrollo debería estar cerca de terminar. Se espera que llegue al mercado en verano de 2013, es decir dentro de poco más de un año.
A partir de ahora viviremos lo siguiente:
2012: Ivy Bridge (tick), 22 nanómetros.
2013: Haswell (tock), 22 nanómetros.
2014: Broadwell (tick), 14 nanómetros.
2015: Skylake (tock), 14 nanómetros.
2016: Skymont (tick), 10 nanómetros.
En el futuro parece confirmarse que tras los 10 llegarán los 7 nanómetros, y luego 5. Desde hace años se lleva hablando del Efecto Túnel que daría lugar a un tamaño mínimo de transistor. La gente de Intel por ahora continúa esquivando esta teoría, manteniendo la evolución cada dos años. De hecho no parece que vayan a parar en un futuro próximo, con lo que tenemos procesadores ‘clásicos’ asegurados durante muchos años.
Nota: si os apasiona el mundo de los microprocesadores, arquitecturas y demás echadle un vistazo al artículo de Wikipedia sobre Computación cuántica, mejor a la versión inglesa. Recientemente he asistido a una charla sobre ciertos algoritmos relacionados con ella y sin duda alguna es el futuro a que nos espera, aunque lamentablemente está muy en pañales. Decía el ponente que dentro de quince o veinte años empezaremos a ver los primeros resultados, aunque será difícil que consigamos ver con vida los primeros “ordenadores cuánticos domésticos”.