Una de las aplicaciones más prometedoras para los drones es en el campo de la logística (no en vano Amazon apuesta por ello). Repartir pequeños paquetes a menudo es mas cómodo y eficiente con un drone que con un coche. ¿El problema? Varios, uno de ellos es la limitación de los drones en su alcance debido a su escasa batería. Desde Stanford tienen una idea: que los drones usen el transporte público para ir de un lugar a otro.
El autobús o el tranvía no tiene por qué ser sólo para las personas, según plantean varios investigadores de la Universidad de Stanford en un estudio publicado en arXiv. Han desarrollado un sistema que permita conectar el almacén con el punto de entrega, los drones y la red de transporte público de una ciudad. Con todo ello la ida es mejorar la eficiencia de los drones al aprovecharse de la infraestructura ya presente.
El drone que coge el bus
Según explican, el sistema funciona de forma similar a las apps de transporte público ya existentes en el mercado como por ejemplo Moovit. Es decir, busca cómo es la forma más rápida de ir de un punto a otro aprovechando el transporte público de la ciudad. Pero en este caso no es para que un humano sepa qué autobús coger o en en qué estación bajar, sino para un drone.
Esquema de ejemplo en el que vemos cómo un drone sale con el paquete del almacén, se sube a un autobús, baja cuando se acerca a su destino y luego sube de nuevo a otro bus para llegar a otra base.
La idea es que el dron pueda acoplarse a un autobús o tranvía que esté en su camino para que de este modo no tenga que volar todo el trayecto hasta su meta. El dron sale del almacén con la carga, calcula cuáles son los autobuses o tranvías que van hacia su destino, se coloca sobre la parte superior de unos de ellos y cuando llega a la última estación que le conviene despega de nuevo para llegar hasta su destino. Podría incluso coger varios autobuses o tranvías.
Como resultado el drone no se encuentra durante todo su viaje en funcionamiento y en vuelo, por lo que el consumo de la batería es menor y puede cubrir distancias más largas desde su base hasta donde debe entregar el paquete. Para la vuelta a la base la idea es la misma, acoplarse a autobuses de la ciudad. Según los investigadores esto podría hacer que el drone aumente su alcance hasta un 360% en cada viaje.
Los investigadores plantean hasta soluciones si dos drones quieren subirse al mismo tiempo o si sólo hay espacio para uno de ellos.
De hacerse realidad un proyecto como estos podría reducir de forma considerable la congestión de los paquetes de entrega y las furgonetas que se encargan de ello. Sin embargo para ello se requiere de implementarlo para cada ciudad de un modo distinto y adaptar el transporte público a ello. También hará falta que evolucione lo suficiente el sistema autónomo de los drones o las regulaciones para que los drones vuelen sobre las ciudades. Otras apuestas por los drones en logística y ciudades incluye por ejemplo futuristas estaciones de carga y descarga.
Vía | Venturebeat
Más información | arXiv
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