El ejército chino ha construido un nuevo ave robot: un ornitóptero bajo el nombre de "pequeño halcón". Se trata de uno de los drones más similares a un ave real en el mundo, y aspira a ser la referencia en las investigaciones relacionadas con este tipo de aeronave no tripulada.
Sus funciones: reconocimiento militar, monitoreo ecológico y protección del medio ambiente. Una aeronave versátil en la que tampoco se descarta un uso enfocado al "ataque de precisión en operaciones especiales".
El ornitóptero es llamativo, pero no nuevo
Imagen del dron con forma de Halcón que utilizará el ejército chino
La Universidad Politécnica de Northwestern es uno de los principales aliados de China en materia de defensa, y uno de los proveedores de drones para el ejército chino.
Mostrado en una exhibición en Xi'an, provincia de Shaanxi, el dron ha demostrado una agilidad de vuelo sobresaliente. Es capaz de plegar las alas, lo que le permite realizar giros emulando el movimiento natural de un halcón. Pese a la mecánica de vuelo, similar a la de este ave, la principal innovación en este dron no está en su forma de volar, sino en las capacidades multifuncionales del mismo.
Camuflado como un ave, este dron se puede utilizar para tareas de vigilancia y operaciones especiales en las que un dron convencional no tiene cabida. Es, además, un dron más eficiente por su poca resistencia al aire. Abre también las puertas a tareas de reconocimiento en el ámbito medioambiental, al ser un dron menos intrusivo con el ecosistema.
Aunque este dron supone un importante salto para el ejército chino, no es la primera vez que el país experimenta con la forma de ave. De hecho, ya utilizan drones con forma de paloma para tareas de vigilancia en algunas regiones, y han logrado hitos como el de volar 10.000 kilómetros en ocho días con un ave robótica controlada en remoto.
Imagen | China News y Shawn Allen
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