Durante muchos años China se ha opuesto a reducir sus niveles de contaminación y siempre han utilizado como argumento lo que se conoce como la curva de Kuznets: una hipótesis que habla sobre cómo los países en desarrollo deben de contaminar para poder crecer y una vez se han convertido en economías potentes y con recursos suficientes invertir éstos en limpiar el desastre que han generado. La segunda potencia económica del mundo ha decidido cambiar el discurso y hoy ha aclarado su plan para combatir la contaminación y reducir la emisión de gases a la atmósfera.
Según el gabinete del primer ministro chino Li Kegiang, el nivel de contaminación máximo en el país llegará en 2030. Sin embargo, quieren luchar para reducir la fecha y que las emisiones no vayan en aumento. Tras varias charlas y reuniones con otras países, Li ha detallado el plan y los objetivos que se han propuesto.
Buenas intenciones a largo plazo
El gobierno chino tiene como meta reducir las emisiones de dióxido de carbono por PIB por unidad del uso de energía entre un 60 y un 65% de aquí a 2030, tomando como referencia los niveles de emisión de 2005. Todo sea dicho, no es la primera vez que hacen una promesa de ese tipo, ya en 2009 se comprometieron a eso mismo pero con unas cifras que oscilaban entre el 40 y el 45%.
El índice de intensidad de carbono también está entre los objetivos y se han fijado cortarlo entre un 40 y un 45% de aquí a 2020. En cuanto al consumo de combustibles no fósiles se han mercado 2030 como la fecha para que éstos alcancen una cuota de uso del 20%, siendo así la fuente primaria de energía en el país.
¿Renovables? También tienen un plan: quieren que el 15% de la energía que se genere en 2020 venga de fuentes limpias y no contaminantes. ¿Son esto buenas noticias? Según el analista David Shukman es sin duda un paso adelante pero al ser previsiones a largo plazo es difícil estimar que se vayan a cumplir los plazos. Desde hace más de dos años llevan hablando sobre la reducción de emisiones y lo de hoy solo hace que reforzar esa idea.
También es cierto que hay matices y detalles importantes. Curiosamente, a la vez que anuncian toda esta serie de medidas y acuerdos también hacen oficial un acuerdo con Rusia para ampliar la red de gaseoductos y traer este tipo de combustible a más lugares del país.
La contaminación en China es una cuestión que diferentes organizaciones, entre ellas Naciones Unidas, lleva años persiguiendo. Situada la primera en el ranking de países que más dañan al medioambiente, llevan décadas generando todo tipo de problemas y fenómenos desagradables como el hecho de que el 60% de las aguas subterráneas del país estén contaminadas.
¿Tiene la contaminación un efecto negativo en la economía? Según un estudio de 2012 el impacto es mínimo ya que además China ha sabido reconvertirse y dar un gran apoyo al sector industrial para seguir creciendo. Como decíamos al principio, durante muchos años han usado la tesis de la curva de Kuznets para justificar sus acciones. Veremos si con todos estos cambios, y algunos más, logran revertir la situación.
Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com
VER 11 Comentarios