Un CEO vendió su empresa convirtiendo en millonarios a todos sus empleados. Hizo algo que pocas personas hacen: compartir

  • Jay Chaudhry llegó de India para cumplir el "Sueño americano" y, de paso, hizo realidad el de muchos de sus empleados: los convirtió en millonarios

  • El caso de Chaudhry no es único. Mark Cuban o el propio Jensen Huang aplican una filosofía similar para ganarse el compromiso y fidelidad de sus empleados

Jay Chaudhry
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La historia de Jay Chaudhry bien podría ser el guion de unas de esas películas de sábado por la tarde que durante el verano nos induce ameniza la siesta. Un joven de origen humilde que creció en un pequeño pueblo rural de India que soñaba con viajar a Silicon Valley, estudiar ingeniería y hacerse millonario viviendo el clásico "sueño americano". La diferencia, es que él lo consiguió en 1980.

Un ascenso que no se deja a nadie atrás. En su ascenso para convertirse en uno de los empresarios más ricos del mundo Chaudhry ha ido haciendo millonario a todo aquel que ha trabajado a su lado. Eso no ha impedido que el empresario haya logrado reunir una fortuna valorada en 11.100 millones de dólares, según Forbes, y liderar una empresa de ciberseguridad valorada en más de 28.000 millones de dólares.

Sin embargo, lo que distingue a Chaudhry no es solo su éxito personal, sino su enfoque en compartir este éxito con sus empleados.

Su primer golpe certero. La carrera de Chaudhry como empresario despegó en 1998 con la venta de la primera startup que creó junto a su esposa, tras renunciar ambos a sus empleos en la industria de la tecnología e invertir en ella todos sus ahorros. Se trataba de SecureIT, una empresa de ciberseguridad que el empresario vendió por 70 millones de dólares a VeriSign.

En lugar de quedarse con todo el beneficio de la venta, Chaudhry optó por distribuir una parte significativa de la empresa en opciones sobre las acciones entre sus empleados. Estas opciones les permitían comprar acciones de VeriSign a un precio fijo, y resultaron ser una apuesta ganadora. "Casi dos años después, gracias al aumento del precio de las acciones de VeriSign, más de 70 de los 80 empleados eran millonarios sobre el papel", señalaba el millonario. Esto permitió a muchos empleados cambiar de casa, de coche e incluso tomarse unas largas vacaciones con su familia.

Crecimiento y recompensa: la clave para Chaudhry. Aconsejado por el entonces presidente de VeriSign, Jim Bidzos, Chaudhry puso en marcha su estrategia de vender parte de sus acciones de VeriSign en los picos de cotización oportunos. Esto no solo le permitió capitalizar el incremento en el valor de sus acciones, sino que también pudo ofrecer a sus empleados la oportunidad de beneficiarse del crecimiento de VeriSign a largo plazo, vendiéndoles a ellos las opciones de sus acciones.

Chaudhry recuerda cómo se sorprendió al darse cuenta del impacto de su decisión: "Fui a casa esa noche y miré el gráfico de todas las opciones sobre acciones que tenían mis empleados. Al multiplicar el número de opciones por el precio de las acciones de VeriSign, me di cuenta de que había creado entre 70 y 80 millonarios. Fue impresionante", recuerda el millonario. Para Jay Chaudhry, este éxito no era solo suyo, sino de los empleados que trabajaron junto a él en SecureIT, "son los empleados los que marcan la diferencia. Han trabajado día y noche por el éxito de la empresa".

Los “otros” Jay Chaudhry de Silicon Valley. Pese a que la historia de Chaudhry es digna de una serie de Netflix, no es el único caso en la meca de la tecnología de la costa oeste de Estados Unidos. Otro ejemplo notable es el de Mark Cuban, quien en 1999 vendió Broadcast.com a Yahoo por 5.700 millones de dólares, convirtiendo en el proceso a cientos de sus empleados en millonarios, como señaló CNBC.

Más recientemente, Jensen Huang se ha ganado la lealtad y fidelidad absoluta de sus empleados convirtiéndolos en millonarios a través de su plan de compra de acciones para empleados (ESPP por las siglas en inglés de Employee Stock Purchase Plan), que la compañía ha ido ofreciendo durante los últimos 18 años.

Una lealtad impagable. Al ofrecer una parte sustancial del capital de sus empresas a sus empleados, Jay Chaudhry, Mark Cuban o Jensen Huang han creado un sentimiento de pertenencia y lealtad sin precedentes.

Este enfoque ha resultado un importante incentivo para que sus empleados se comprometan con el éxito de la empresa, demostrando que compartir parte de su valor puede ser una eficaz herramienta para impulsar la motivación y el rendimiento.

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Imagen | Wikimedia Commons (BluBayou), Unsplash (Arif Riyanto)

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