La crisis de semiconductores se está alargando tanto que ya hay empresas comprando lavadoras para quitarles los chips

Hasta 2023 no se espera que la crisis de semiconductores cambie de situación. Las grandes empresas están avisadas, pero aún así muchas están sufriendo para adaptarse. No tener chips disponibles significa muchas veces parar la producción. Y hay mucho en juego.

Esto ha llevado a auténticas soluciones de emergencia. Según explica Peter Wennink, CEO de ASML, el gran referente en la fabricación de semiconductores del mundo, hay un gran conglomerado industrial que ha decidido comprar lavadoras para extraer sus semiconductores y utilizarlos como si fueran sus propios chips.

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El CEO de ASML no ha querido dar el nombre de esta gran empresa, pero ha afirmado que la situación es crítica y hay muchas empresas que están intentando extraer los chips de donde pueden. Para varios sectores, la falta de acceso a los semiconductores está provocando retrasos muy importantes, como por ejemplo en la industria automovilística.

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Otro de los factores que está forzando soluciones extremas es el auge disparado de la demanda de semiconductores. Wennink apunta al 'Internet de las Cosas', que ha sobrepasado sus previsiones y ha contribuido a que haya pocos chips disponibles.

La crisis de semiconductores afecta a prácticamente todas las grandes empresas, por lo que la solución no es inmediata. Los fabricantes no pueden incrementar la producción de la noche a la mañana y la demanda de chips se extiende a miles de empresas. Algunas de ellas van consiguiendo semiconductores poco a poco, pero otras empresas han adoptado medidas más directas para conseguirlos.

El precio para conseguir los chips de esta manera es mucho más elevado, pero algunas empresas están dispuesto a pagarlo. Como vemos, no se trata de una cuestión de precios, sino que directamente la producción es insuficiente, pese a que desde ASML, TSMC y el resto de fabricantes se están haciendo grandes esfuerzos.

Según datos de Susquehanna Financial Group ofrecidos por Bloomberg, el tiempo de espera en marzo para conseguir semiconductores desde China es de unas 26,6 semanas.

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