Nadie quiere ver un Getafe-Cádiz: LaLiga no ha recibido ofertas para emitir los partidos en abierto

Los primeros meses del año sirvieron para perfilar cómo se verían los partidos de fútbol en España durante el siguiente quinquenio, una pugna que ganó Movistar una vez más, con algo para DAZN. Resuelto lo principal, quedaba para este trimestre lograr un acuerdo para el fútbol en abierto, el que aglutinan los lotes 4, 5 y 6 que subasta LaLiga y que incluyen distintos contenidos para poder emitirlos de forma abierta, sin estar restringidos a decodificadores de pago o plataformas online bajo registro y suscripción.

No obstante, nadie ha realizado ofertas por los lotes, o solo se ha hecho alguna por debajo del precio de reserva que tenía fijado LaLiga. Un síntoma de concentración del interés por los partidos de los principales equipos: LaLiga ha logrado ir aumentando lo recaudado por los derechos del grueso de los partidos hasta rozar los 1.000 millones de euros por temporada. El fútbol en abierto, en cambio, queda desierto de momento.

Solo un lote recibió ofertas

El lote 4, un partido de LaLiga Santander en directo, con un asterisco del tamaño del Santiago Bernabéu: no podrá incluir a ningún equipo que esté jugando una competición europea en esa temporada, ni a Real Madrid, Barça, Valencia o Atlético de Madrid, independientemente de si juegan o no en Europa en ese curso, caso del equipo che. Se ofrecía por cuatro millones de euros, según MundoPlus.tv.

Este matiz, en la próxima temporada 2022/2023, significa que no se podrán emitir en abierto partidos que jueguen Real Madrid, Barça, Atlético, Sevilla, Betis, Real Sociedad, Villarreal ni Valencia. Ocho de los primeros diez clasificados, que agrupan entre todos a muchísimos más espectadores potenciales que el resto de clubes.

El lote 5 es el que incluye un partido de LaLiga SmartBank (segunda división) cuyo precio de reserva era de un millón de euros. Por último, el lote 6, que incluye los resúmenes de los partidos de ambos campeonatos, por diez millones de euros. Solo por este último lote se recibieron ofertas, pero ninguna alcanzaba los diez millones que pretendía conseguir LaLiga. El plazo acababa en la medianoche del 24 al 25 de mayo (página 37).

Ante esta situación, la entidad ha optado por realizar una segunda ronda de comercialización, una de las posibilidades que contempla el procedimiento de no obtener ofertas para algunos lotes. Otra posibilidad hubiese sido repetir la puja, pero con los derechos de emisión dejando de ser exclusivos; así como dar por buena la puja más alta que se haya recibido, aunque no llegase al precio de reserva, caso del lote 6. En todos los casos se ha optado por repetir la ronda de la misma manera.

El caso del lote 4 es quizás el más atractivo por tratarse de partidos completos de la primera división, pero excluir por completo de las emisiones a los equipos de las tres ciudades más grandes de España, además de a los que juegan en Europa, que esta temporada incluirá también a los dos de Sevilla, la cuarta; le deja con menos posibilidades de ser rentable en favor del fútbol emitido por operadora, caso de Movistar, que sí tiene asegurados todos los partidos de estos clubes.

En cualquier caso, son malos tiempos para el fútbol en abierto, que si algo quedaba vivo de él era a través de los partidos que emitía Gol hasta esta temporada, y que de momento nadie quiere asegurarse a los precios que se solicitan por ellos. Veremos en la segunda ronda.