Nos lo venían avisando desde finales de 2020, y en estas primeras seis semanas de 2021 se ha consolidado la tendencia, e irá a más: la escasez de chips en la industria está provocando un desabastecimiento en los mercados de portátiles, teléfonos móviles videoconsolas, televisores y productos de electrónica de consumo de toda índole.
El problema es que el resto de componentes de los productos están listos y hay disponibilidad, pero los chips no, y sin ellos, no puede haber producto final que vender. La pandemia paralizó la producción en múltiples plantas, algo que fue provocando un efecto dominó y retrasos en la producción y que está llevando a la industria hacia el colapso. Fabricantes como Lenovo tienen un inventario de solo un 30% del que tenían antes de la pandemia. Un problema monumental con consecuencias que cada vez se extienden más.
De esto hablamos en el último episodio de Despeja la X, en el que participamos Javier Lacort, (@jlacort); y Javier Pastor (@javipas), redactor de Xataka. La producción corre como siempre a cargo de Santi Araújo (@santiaraujo).
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Más allá de la electrónica de consumo
La escasez de chips también afecta a otra industria clave, la de los coches, cada vez más dependientes de estos componentes. La ausencia de un solo chip que a cada fabricante le puede costar entre uno y dos dólares impide la venta de coches que se pueden vender por 20.000, 30.000, 50.000 dólares... Una de las paradojas de nuestra era con consecuencias duras.
Consecuencias como la paralización o reducción de la actividad de cada vez más plantas de fabricación de coches, algo que puede impactar (y ya está impactando) en el empleo de esas fábricas y de los concesionarios que venden esos coches que simplemente llegan a cuentagotas.
Y hay un problema añadido: a la escasez de chips se le suma una escasez de contenedores que están en el mejor de los casos disparando los costes de envío de unos productos cada vez más demandados en un contexto de pandemia mundial y comercio electrónico aupado; y en el peor de los casos productos que directamente no pueden ser enviados.
Una tormenta perfecta que tiene entre sus consecuencias la destrucción de empleo, el encarecimiento de multitud de productos y el desabastecimiento potencial para ciertos bienes.
Cada semana, un nuevo capítulo
Y recuerda: cada jueves tienes un nuevo capítulo de nuestro podcast Despeja la X, en el que analizamos a fondo el gran tema tecnológico de cada semana.
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