Tink, la startup fintech europea de referencia en aplicaciones de banca abierta, ha sido comprada por VISA por 1.800 millones de euros. Un movimiento por parte de la empresa de pagos norteamericana que le permite entrar en un sector en auge como es el de la banca abierta.
¿En qué consiste la banca abierta? A continuación os explicamos este nuevo modelo de negocio financiero, regulado por la directiva PSD2 que entró en vigor a finales de 2028. Una banca abierta que representa una de las corrientes con más fuerza dentro del ecosistema fintech y donde Tink integra más de 3.400 bancos e instituciones.
Los datos financieros no pertenecen a los bancos
La información financiera de un usuario no pertenece al banco donde tenga abierta esta cuenta. Los distintos bancos deben permitir el acceso a terceros de estos datos siempre que el usuario así lo pida. Es decir, nuestro banco no puede negarse a colaborar con otras aplicaciones fintech u otros bancos. Esto es así desde la aplicación de la normativa PSD2.
La banca abierta llega como consecuencia de esta regulación. Y aquí es donde surgen iniciativas como Tink, que no deja de ser una empresa que ofrece una API para facilitar que los distintos bancos y aplicaciones intercambien información. A través de APIs como la que ofrece Tink se pueden crear herramientas y aplicaciones financieras, sea desde apps para controlar los gastos, apps para enviar dinero o para verificar la identidad de la persona que está pagando.
También es a partir del concepto de banca abierta donde se crea la posibilidad de reunir en una misma aplicación cuentas de varios bancos.
De un entorno cerrado, empresas como Tink permiten reunir en un mismo sitio cuentas de miles de bancos diferentes. En 2020, Tink compró la empresa española de banca abierta Eurobits por unos 15,5 millones de euros.
Eurobits ya trabajaba con más de 50 bancos, entre los que se encontraban BBVA, Santander, Sabadell o la aplicación Fintonic. Bancos que ahora también colaboran con Tink.
Entre los servicios que ofrece Tink a través de su API están los de transacciones, para que los clientes puedan visualizar en tiempo real sus datos, el de validación de pagos, para poder sincronizar por ejemplo con Paypal de forma rápida e identificarse correctamente, pagos y facturas y control de finanzas, con acceso a estadísticas combinadas de las distintas cuentas.
VISA apunta con Tink más allá de las tarjetas
Con la compra de VISA, Tink mantendrá su marca y equipo en Estocolmo (Suecia). El gigante de los pagos ofrecerá su infraestructura para mejorar la seguridad y el alcance de las APIs de Tink.
"Esta adquisición es una señal de nuestro compromiso con Europa. En Tink, hemos encontrado un socio fuerte con el que podemos acelerar la innovación en la banca abierta en beneficio de nuestros clientes colectivos y los ciudadanos del Reino Unido y la UE", explica Charlotte Hogg, directora ejecutiva de Visa Europa.
No es una casualidad que exprese de forma directa este apoyo por la startup europea y es que a principios de año, Visa intentó comprar Plaid pero tuvo que frenar sus planes por los organismos reguladores de los Estados Unidos. En vez de comprar Plaid, la gran startup de banca abierta estadounidense, por unos 5.300 millones de dólares, VISA ha acabado adquiriendo la gran referencia europea y uno de sus principales rivales.
Hasta la fecha, Tink ha conseguido una financiación de 300 millones de dólares y cuenta unos 250 millones de clientes de diferentes bancos. Se trata de una de las 440 empresas de banca abierta registradas en Europa, fundada en 2012, con 400 trabajadores y presencia física en 13 países.
De aprobarse esta adquisición por los reguladores europeos, VISA se adentrará en el sector de la banca abierta, ofreciendo así su infraestructura a los distintos bancos no solo para la realización de pagos a través de sus tarjetas, también como una solución de banca abierta que puede convertirse de facto en una alternativa al débito, al facilitar el intercambio de datos y pagos. Las tarjetas físicas empiezan a perder protagonismo con el auge del fintech, pero empresas como VISA quieren seguir siendo imprescindibles para gestionar el movimiento del dinero.
En Xataka | Cómo los bancos españoles parecen no estar reaccionando ante los neobancos
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