Almería ha recurrido a la energía solar flotante para tratar de frenar la sequía. Aragón ha optado por prohibirla

La agricultura está buscando todas las formas posibles para seguir creciendo hacia la transición energética y han puesto el foco en los embalses. A parte de usarlos como baterías, también están llenando los pantanos y canales de riego con paneles solares. Almería a diferencia de Aragón se suma al proyecto.

¿Qué ha pasado en Almería? Los agricultores almerienses han recibido la planta solar fotovoltaica flotante construida sobre la balsa de Abellán, a través del SEIASA del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Este sistema cuenta con una inversión de 1.143.545,90 euros.

El parque solar flotante producirá la energía necesaria para bombear agua hasta la balsa de Ballabona, beneficiando a 150 regantes que cultivan 800 hectáreas. De esta manera, reducirán los costos energéticos y dispondrán de más agua para el riego.

¿Qué ocurre en Aragón? A diferencia de Almería, en Aragón han tomado una decisión totalmente contraria. Las Cortes aragonesas han prohibido la instalación de placas fotovoltaicas flotantes en los embalses.

A pesar de que en julio el Consejo de Ministros aprobará un Real Decreto que regula su instalación, en Aragón han tomado otra iniciativa por considerarlo un problema paisajístico y de sequía. Además, esto se le suma a los problemas que tienen sobre la gran capacidad solar y eólica en la comunidad.

Los paneles solares frente la sequía. Aunque parezca lo contrario, los paneles solares flotantes en los embalses reducen la evaporación del agua en zonas de sequía. Al cubrir parcialmente la superficie del embalse, los paneles disminuyen la exposición directa al sol y al viento. De esta manera, la energía generada facilita el bombeo de agua a otras zonas.

El Real Decreto. El pasado mes de julio, el Consejo de Ministros de España aprobó un Real Decreto para regular los permisos de instalaciones solares flotantes en embalses públicos, con coberturas del 5% al 15% de la superficie útil, según la calidad del agua (nivel de eurofización).

Las instalaciones deben ser compatibles con el Plan Hidrológico y con el estado ambiental del embalse hasta por 25 años, asegurando una integración sostenible de esas infraestructuras.

Otros usos de los embalses. Si algo se le caracteriza a España es por sus numerosos pantanos y, actualmente, por el aumento de las energías renovables. El excedente de energía que producen las energías limpias necesita de almacenamiento. Por ese motivo, las renovables tienen claro donde guardarlo: en los embalses. Así podrán lograr almacenar el excedente energético y contribuir a la estabilización de la red eléctrica.

Imagen | SEIASA

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