La privacidad en las comunicaciones se ha vuelto desde hace años en un tema crítico y muy sensible. Llevarlo al interés público ha hecho que muchos hayan comenzado a cuidarlo más y, por extensión, ha favorecido la creación de empresas dedicadas a ofrecer soluciones para blindar estos servicios tanto a nivel personal como profesional.
Son muchas empresas dedicadas a ello y algunas las conocemos desde hace tiempo. En España tenemos algunos casos (Blackphone, Spotbros en sus orígenes…) y desde hace poco, sin hacer mucho ruido, una tercera startup se ha unido a este grupo de compañías dedicadas por velar en la seguridad y privacidad de las conversaciones telefónicas y videollamadas. Su nombre es Enigmedia, son de San Sebastián y tienen todo listo para convertirse en una de las referencias de este nicho.
En el algoritmo está la clave
Gerard Vidal, fundador de la compañía, estaba desarrollando su tesis doctoral sobre la teoría del Caos. Fruto de su investigación dio con un algoritmo único y decidió ver cómo podía aplicarlo a la criptografía para que, con apoyo de las tecnologías de la información, convertirlo en un cifrado para sistemas de comunicaciones. Junto a Carlos Tomás e Iker Hernández, nació esta compañía a finales de 2011.
Enigmedia nace con un propósito claro: un servicio de seguridad en las comunicaciones que sea lo suficientemente flexible al mismo tiempo para adaptarse a todo tipo de circunstancias, quitando así elementos de integración y que se pueda usar en cualquier circunstancia. Hace tres años comenzaron sus andaduras como una pequeña startup y poco a poco se han ido dando a conocer.
En todo este tiempo no han salido a la palestra con grandes anuncios o causando mucho revuelo. Sus movimientos han ido orientados a crear y pulir su servicio para ofrecer la que, según ellos, es la mejor tecnología de cifrado del mercado. Cierto o no, el tiempo dirá, hay que reconocer algunos de sus logros económicos hasta la fecha.
A día de hoy su principal apoyo financiero es el respaldo de un fondo semilla creado entre el Gobierno Vasco y la Kutxa. A esto hay que sumarle una inyección de 200.000 euros que consiguieron hace poco por parte de Banco Sabadell y Caixa Capital. Quizá su servicio no es el más conocido por el gran público, pero ha ganado unos cuantos premios a startups desde que nacieron.
"Fue la suma de una idea necesaria para un producto innovador, la voluntad de proteger el derecho a la privacidad de cada individuo y entidad como filosofía empresarial y la conciencia de que existía una necesidad como se decidió crear la empresa."
Desde 2011 hasta 2013 han invertido un total de 800.000 euros. Una época que, según ellos, les ha servido para crecer, ahora mismo son 23 personas en plantilla, y plantarse un objetivo: comenzar en 2014 a comercializar sus productos. Una aplicación móvil y una solución hardware orientada a las videoconferencias.
Enigmedia a día de hoy basa su modelo de negocio en ofrecer dos soluciones basadas en el mismo denominador común: el algoritmo KVC. Como no podía ser de otro modo, el fuerte de una empresa dedicada a la seguridad en las comunicaciones tiene que ser su solución para protegerla y la propuesta que hace esta compañía vasca es muy interesante.
Su algoritmo se basa en la teoría del caos. Una forma de llamar a ciertos sistemas dinámicos susceptibles de tener variaciones en sus condiciones iniciales que, a largo plazo, imposibilitan su predicción a largo plazo, salvo que se conozcan por completo las condiciones iniciales. Partiendo de esta base, e inspirándose en la máquina Enigma utilizada por la Alemania Nazi en la II Guerra Mundial, tenemos los principios básicos de KVC.
"Pensamos que si la amenaza se actualiza, la respuesta protectora también se tiene que modernizar. Así que basándonos en la Teoría del Caos, un campo relativamente nuevo dentro de la matemática, damos otro enfoque a un problema clásico."
Las claves que se generan son secuencias pseudo alteatorias que, siguiendo el principio de la teoría del caos, elimina los patrones haciendo más difícil la predicción y la obtención de la misma. Además, a diferencia de otros algoritmos usados por empresas parecidas la información —según Enigmedia— se encripta 20 veces más rápido. Apuntan un dato más: el ahorro de consumo en la CPU es del 95%.
De San Sebastián a Silicon Valley
Su servicio se distribuye en dos pilares. Por un lado una aplicación móvil para iOS y Android encargada de codificar las comunicaciones tanto por voz, mensajes y videoconferencia utilizando dicho algoritmo. Llama la atención que en este caso no hayan decidido depender de un dispositivo y centrar todo en un servicio, confiando en el hardware que ya hay en el mercado.
Llegados a este punto nos planteamos un problema: la conectividad. A veces la conexión no siempre es buena (mala calidad, muchas personas al mismo tiempo...) pero Enigmedia emplea un sistema de optimización entre calidad y capacidad que evalúa la disponibilidad de red e infraestructura de manera que cuando existe buena disponibilidad se prioriza la calidad de la comunicación pero si la cobertura falla, se da prioridad a la posibilidad de comunicación.
La segunda pata de Enigmedia lo encontramos en su kit de videoconferencia que, además del software que ya hemos mencionado, quiere ser una herramienta que permita a cualquiera realizar una videoconferencia con garantías tanto de calidad como de seguridad. Algo que además se agradece ya que si conocéis los equipos de oficina para este fin son algo aparatosos.
Las comunicaciones, en todas sus formas, se pueden recuperar mediante un mensaje cifrado provisto por el operador telefónico o con una clave de cifrado provista por el propietario de una unidad central. Es decir, un acceso para gestionar la seguridad de las comunicaciones de forma que es quien verifica las identidades y participa en el proceso de generación de las claves de encriptación dando cada unidad de servicio a varios usuarios. En resumen: somos propietarios de nuestras comunicaciones.
La privacidad de las comunicaciones trae muchos beneficios pero también riesgos y problemas como que se haga un uso indebido de la la misma con fines maliciosos. En Enigmedia, de momento, están tranquilos al respecto:
Nosotros creemos firmemente que la privacidad no es una arma y no debería serlo, sino más bien un derecho que tenemos todos los individuos, tal y como expresa la Carta de los Derechos Humanos de la ONU.
Cuando existe libertad, es cierto que puede ser utilizada para hacer el bien o para hacer el mal. Así, el mal de una minoría no se puede prevenir encarcelando a la mayoría como medida de precaución y lo mismo ocurre con la privacidad.
Según las necesidades, Enigmedia ofrece unidades central en tres formatos: Saas (el UC lo pone Enigmedia), Private (en la nube, somos dueños de la unidad central) o On premise (UC en Cliente situada en el CPD). La información de cada comunicación nunca pasa por la unidad central. Siempre lo hace de forma cifrada a través de las redes de telefonía ordinarias.
A día de hoy los principales competidores de Enigmedia los encontramos en Silent Circle con su Blackphone, un terminal presentado en el Mobile World Congress y con una presencia bastante discreta desde entonces, y BlackBerry que con QNX y otras iniciativas busca reforzar todo lo posible su sistema de comunicaciones.
Sus próximos pasos van más allá de ser una empresa local y dar el salto más allá de nuestras fronteras. Ellos lo tienen claro cuando le preguntamos por ello:
"Desde febrero de 2014 tenemos una delegación de Enigmedia en Silicon Valley y hemos participado en dos misiones comerciales y de inversión patrocinadas por el ICEX. Hemos estado presentes en ferias como el Tech Match de Nueva York ó RSA de San Francisco, siempre con el objetivo doble de buscar el apoyo de inversores en tecnología por un lado (financiero), y el establecimiento de contactos comerciales para llegar a acuerdos de licenciamiento de tecnología o de desarrollo de productos a medida (comercial).
El camino no es fácil porque existe una gran competencia, pero es muy motivador porque existe un gran interés en nuestro sector y se aprecia el valor de la innovación en seguridad que aportamos. Recientemente, hemos incorporado a Whitfield Diffie (criptógrafo de fama mundial, pionero en la criptografía de clave pública y profesor en Stanford) como miembro de nuestro Advisory Board lo que nos está reportando ya un gran apoyo en EEUU.
Por otro lado, en Europa hemos empezado a darnos a conocer en Francia y en el Reino Unido, especialmente. Estuvimos en la feria especializada de Cartes Secure Connections de París obteniendo contactos muy significativos que progresivamente se van materializando en nuestro negocio.
También hemos abordado los mercados de Oriente Próximo (Dubai) y América Latina (especialmente México, Ecuador y Brasil) donde estamos ya trabajando en las ventas del producto."
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