Enviamos muchas cosas al espacio exterior (luego pasa lo que pasa), pero no todas logran atravesar el sistema solar y cuando lo hacen no tienen una misión aún en activo. No es el caso de New Horizons, cuyo propósito es llegar a 2014 MU69, un cuerpo celeste que ahora parece un poco más interesante de lo que ya se consideraba.
Haciendo un poco de recordatorio, la misión New Horizons nos acercó en un primero momento a Plutón, nuestro vecino más lejano, permitiéndonos saber mucho más de él. Pero esto no era más que la primera parada de un viaje que tenía que seguir hasta el cinturón de Kuiper (lo que sería más o menos el cercado del jardín si el sistema solar fuese una casa) para llegar donde ninguna misión en activo lo ha hecho.
Más leña en el asador para cuando llegue New Horizons
Era 2015 cuando New Horizons escrutaba el lejano (ex-)planeta para la satisfacción de investigadores y de nuestras retinas, logrando traernos imágenes con un detalle sin precedentes. Y ese mismo año se conocía por fin la decisión de la NASA en lo concerniente al siguiente objetivo de New Horizons: el objeto 2014 MU69, situado como decíamos en el cinturón de Kuiper.
¿Qué tiene de especial ese objeto, si ni siquiera cuenta con un apodo más allá del nombre genérico? Como nos contaban en Naukas, además de lo práctico (la cercanía a la trayectoria de la sonda) este cuerpo de unos treinta kilómetros de diámetro sí es uno de los objetos típicos del cinturón (Plutón es anormalmente grande) y se considera que es un resto de la creación del sistema solar apenas modificado desde su creación.
La sorpresa ha sido que al parecer MU69 tiene al menos una luna. Lo comunicaba el investigador jefe de la misión, Alan Stern, a Space.com., tras haber presentado los resultados en la convención de la American Geophysical Union. Hicieron falta varias tandas de observaciones desde varios observatorios, pero los datos sugieren que se trata de una luna de unos 5 kilómetros de diámetro que orbita a entre 200-300 kilómetros cada dos-tres semanas.
A la espera de Año Nuevo de 2019
Falta poco más de un año para que New Horizons llegue a MU69 si no hay ningún percance en el viaje, hablándose del día 1 de enero de 2019. Según explican los investigadores, a la sonda le daría tiempo de recolectar información sobre el objeto y su satélite, en torno a tres semanas antes de este día, tiempo suficiente para al menos monitorizar una de las órbitas de la presunta luna.
Aunque lo importante de esto no es que el objeto tenga un satélite, porque es algo relativamente habitual en el cinturón de Kuiper, sino lo que permitirá determinar. Explicaba Stern que puede que sea posible estudiar la masa de ambas estructuras, lo cual permitirá determinar la densidad de MU69 y poder tener una idea aproximada de su composición.
¿Qué hará New Horizons tras esta parada? Por el momento no se sabe con seguridad. Si bien es cierto que Cassini tuvo su gran final precipitándose contra Saturno y que a Juno le espera algo parecido, otras sondas han seguido su camino (como Voyager 1 y las que veíamos al principio) y a New Horizons le da para estar operativa hasta mediados de 2030 y 2040, según Stern.
Veremos si la NASA dedica más presupuesto a la misión y si como se espera desvele información sobre la creación del sistema solar, así como de cómo funcionan las cosas en los confines del mismo. Quizás se le descubran más satélites a MU69, o se llegue a visitar algún otro objeto más del cinturón.
Imagen | NASA/JHUAPL/SwRI/Alex Parker
En Xataka | Las supertierras vienen a pares: al planeta potencialmente habitable K2-18b se le conoce mejor y además tiene un vecino
Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com
VER 2 Comentarios