De todas las videocámaras compactas de Kodak, la semisumergible Playsport ZX3 es, probáblemente, una de las más populares. La compañía ha renovado el clásico para este CES 2011, dotándolo de mayor resistencia a los elementos.
La nueva Kodak Playsport ZX5 es ahora sumergible a tres metros de profundidad y resistente tanto a choques como a la entrada de polvo y suciedad, lo que la hace inmejorable como acompañante de deportistas, aventureros y gente de vida activa y campestre.
Físicamente, la ZX5 no ha variado mucho. Sus dimensiones son de 5.8 × 11.2 × 1.8 centímetros y pesa 125 gramos. La carcasa frontal ha sido recubierta con una capa de goma que la hace más cómoda de sujetar, mientras que la tasera cuenta con carcasas en tres animados colores.
Internamente, poco han cambiado las cosas. La Kodak Playsport ZX5 cuenta con un sensor CMOS 1 / 3.2 de 5 megapíxeles y unas lentes de 5.5 milímetros equivalentes a una 35 milímetros en fotografía tradicional.
El zoom, desgraciadamente sólo digital, es un 4x y la resolución de vídeo es de 1080p a 30fps con posibilidad de reducirla a 720p a cambio de 60 fotogramas por segundo. El almacenamiento es exíguo,con 128MB internos que se deben apoyar en tarjetas SD de hsta 32GB.
Los controles siguen siendo los mismos salvo el botón Share, que se ha mejorado en agilidad y ahora también es compatible con Twitter. La ZX5 es sencilla de usar y sus modos se limitan a normal, macro y sus equivalentes subacuáticos. También cuenta con accesorios lúdicos como una lente gran angular.
La ZX5 no deja de ser mejor que la anterior Playsport, aunque Kodak debería exigirse un poco más si quieren competir con las cámaras de fotos subacuáticas que también graban vídeo en HD y cuyo tamaño es equivalente.