La nueva Lumix G7 es una de esas cámaras que no dejan indiferente. Panasonic presentó esta propuesta sin espejo con sensor Micro Cuatro Tercios este lunes, y una hora después del evento pudimos hacernos con una de las primeras unidades de prueba para analizarla con cierta calma y comprobar de primera mano qué nos ofrece realmente este modelo con objetivo intercambiable.
Su característica más llamativa es su capacidad de grabar vídeo UHD/4K, pero lo cierto es que tiene otras cualidades interesantes, como su visor electrónico OLED de alta resolución y baja latencia, su pantalla táctil extraíble y rotatoria, o la nueva función 4K Photo. La cámara que hemos probado es una unidad de pre-producción, y, por tanto, no se trata de un dispositivo final. Pero, aun así, nos ha venido de perlas para comprobar si realmente merece la pena tener a la Lumix G7 en cuenta, y por qué. Vamos con ella.
Lumix G7: principales características
Panasonic es una firme defensora del formato Micro Cuatro Tercios, por lo que esta cámara incorpora un sensor Live MOS de este tipo con una resolución efectiva de 16 megapíxeles, filtro de color primario y un tamaño físico de 17,3 x 13 mm. El procesador de imagen de la G7 es un chip Venus Engine con cuatro núcleos diseñado para procesar hasta 8 imágenes por segundo (AFS) o 6 imágenes por segundo (AFC).
Este dispositivo juega un rol central en la cámara porque es el responsable de lidiar con el elevado caudal de datos que recoge el captador al grabar vídeo UHD o utilizar alguno de los modos de disparo 4K Photo (los veremos con detalle más adelante), pero Panasonic también asegura que es capaz de mejorar la reproducción del color mediante un análisis de la saturación y la luminosidad.
Por otra parte, la Lumix G7 utiliza un enfoque automático por contraste que ha sido optimizado gracias a una nueva tecnología a la que en Panasonic llaman DFD (Depth From Defocus), y cuyo objetivo es incrementar la velocidad de enfoque. Esta mejora es posible porque calcula la distancia a la que se encuentra el sujeto fotografiado, evalúa dos imágenes con distintos niveles de enfoque y analiza las características ópticas de la composición. Esta estrategia hace posible, según la marca, velocidades de enfoque de 0,07 s (como veremos unos párrafos más adelante es una cámara realmente rápida en este apartado).
No obstante, Panasonic no ha innovado en materia de enfoque introduciendo en esta cámara únicamente la tecnología DFD. Además ha incorporado en la G7 el sistema Low Light, que permite enfocar con precisión en entornos poco iluminados; el enfoque Pinpoint, que sirve para ampliar una zona de la imagen y establecer el punto de enfoque de una manera precisa, y la prestación Starlight AF, para astrofotografía. Como veis, no está pero que nada mal.
Otra de las bazas relevantes de esta cámara es su visor electrónico, que apuesta por una pantalla OLED con una resolución de 2.360.000 puntos y un factor de ampliación de 1,4x. El monitor también ha sido bastante cuidado por Panasonic; de hecho, la G7 recurre a una pantalla táctil LCD TFT de 3 pulgadas con una resolución de 1.040.000 píxeles, un ángulo de visión total y una cobertura del 100%. Además, es extraíble y rotatorio, con las ventajas que esto conlleva a la hora de permitirnos adoptar una postura cómoda y estable cuando nos vemos obligados a levantar o bajar mucho la cámara para materializar el encuadre que tenemos en mente.
Por último, en lo que concierne a la conectividad esta Lumix incorpora WiFi 802.11b/g/n, aunque no NFC, una prestación con la que sí cuenta, por ejemplo, la que de alguna manera es la «hermana mayor» de la G7, la Lumix GH4, pero que solo echarán en falta los usuarios que tengan un smartphone o un tablet que incorpore esta tecnología de negociación de la conexión inalámbrica.
Modo de disparo 4K Photo
Una de las señas de identidad de esta nueva cámara de Panasonic es la función 4K Photo, diseñada para sacar partido a la capacidad de grabación de vídeo UHD de la Lumix G7, pero en el ámbito de la fotografía. Esto significa, simplemente, que podemos extraer con sencillez fotogramas de 8 megapíxeles a partir del vídeo UHD que grabemos. Pero lo más interesante es que tenemos a nuestra disposición tres modos de trabajo diferentes. El primero de ellos se llama 4K Burst Shooting, y nos permite lanzar una ráfaga de 30 FPS que solo requiere que accionemos el botón de obturación.
El segundo modo es 4K Burst Start/Stop, y nos invita a iniciar el disparo en ráfaga presionando el botón de disparo, y a detenerlo volviendo a apretarlo. Y al tercer modo de trabajo lo han llamado 4K Pre-Burst, y graba de forma automática 30 FPS un segundo antes de que apretemos el disparador, y otros 30 FPS un segundo después, por lo que nos entrega nada menos que 60 fotografías. A partir de ese momento solo tendríamos que seleccionar aquellas instantáneas que han conseguido capturar el instante que teníamos en mente.
Para ilustrar qué es lo que podemos hacer con los modos de disparo 4K Photo no hay nada mejor que recurrir a un escenario de uso real. Las tres imágenes que os dejo justo a continuación las tomé fotografiando una taza de café en la que arrojé un terrón de azúcar. Para obtenerlas utilicé el modo de disparo 4K Pre-Burst, y, como podéis ver, el resultado es bastante espectacular.
Así se porta «en combate»
Para hacernos con el manejo de la Lumix G7 no es necesario que le dediquemos mucho tiempo. Los modos de disparo tradicionales no plantean ninguna dificultad, y los modos 4K Photo de los que acabamos de hablar, el disparo en ráfaga convencional y el disparo con temporizador pueden habilitarse accionando un dial dedicado que Panasonic ha alojado en la parte superior izquierda de la cámara, junto al visor electrónico.
Cambiando de tercio, la ergonomía de la cámara está lograda, sobre todo gracias a su grip, que es bastante pronunciado. Los botones tienen un diámetro generoso y los diales están correctamente mecanizados, así que no tengo nada que objetar en este ámbito. Su construcción también es muy correcta, aunque no alcanza el nivel de modelos más caros, como la mencionada Lumix GH4. En cualquier caso, no ha sido esto lo que me ha calado más hondo de la G7.
Una de las principales bazas de esta cámara sin espejo es su visor electrónico OLED. Me ha gustado, y mucho, por tres razones: su resolución es muy alta, su latencia es mínima y reproduce el color con bastante precisión. En lo que concierne a la latencia pocas cosas me parecen más molestas que un visor electrónico lento que puede provocar que nos perdamos el instante que realmente queremos fotografiar. Afortunadamente, con el visor de la G7 es difícil que esto nos suceda. De hecho, me ha recordado mucho a uno de los mejores visores electrónicos que he tenido la ocasión de probar hasta ahora, el de la estupenda X-T1 de Fujifilm, que, dicho sea de paso, es bastante más cara que esta Lumix.
Otra característica de la G7 que me parece muy importante es el rendimiento de su enfoque. Panasonic nos vende que en esta cámara se han esforzado para poner a punto un enfoque automático rápido en condiciones muy diversas, y lo cierto es que no es ningún farol. En la mayor parte de las circunstancias es tan rápido que casi parece instantáneo. Además, también nos permite delimitar el área de enfoque utilizando la pantalla táctil, un método que resulta bastante cómodo y que gustará a los usuarios que están habituados a tomar fotografías con su teléfono móvil.
El disparo en ráfaga, como cabe esperar, se beneficia del elevado rendimiento del enfoque automático, pero si optamos por enfocar de forma manual mediante el focus peaking la G7 se transforma en una auténtica ametralladora que nos ayudará a capturar justo el instante que estamos buscando. Sin duda, esta es una de las razones que nos invitan a tener muy presente esta cámara.
Calidad de imagen
A la hora de poner a prueba la Lumix G7 pude utilizar tres ópticas diferentes: la Lumix G Vario 14-140 mm f/3.5-5.6 ASPH, la Lumix G Macro 30 mm f/2.8 ASPH MEGA O.I.S. y el objetivo Lumix G 42,5 mm f/1.7 ASPH POWER O.I.S. Gracias a ellos pude revisar el comportamiento de la cámara en un amplio abanico de escenarios de uso. Y, como vamos a ver, demostró sentirse cómoda en todos ellos, lo que la posiciona como una opción muy versátil.
La fotografía que os dejo debajo de este párrafo la tomé disparando en ráfaga. Como podéis ver, su nivel de detalle es alto y su gama dinámica no está pero que nada mal, lo que puede invitarnos a pensar que ha sido tomada con una cámara profesional con un precio claramente mayor, algo que deja en buen lugar a la Lumix G7.
Esta sin espejo también se siente muy cómoda en compañía del objetivo Lumix G Macro 30 mm f/2.8 ASPH MEGA O.I.S. Su resolución, y, sobre todo, su amplia gama cromática, la hacen muy apetecible para fotografía de alimentos y bodegones. Además, el enfoque con una óptica como la que usé en la instantánea que tenéis a continuación rindió muy bien, algo que no siempre sucede al utilizar distancias de enfoque de solo unos pocos centímetros.
Por otra parte, con el objetivo Lumix G 42,5 mm f/1.7 ASPH POWER O.I.S. podemos obtener un bokeh realmente bonito, por lo que resulta una gran opción para retratos. De nuevo podemos ver que el nivel de detalle de la G7 es alto, y, de propina, en presencia de abundante luz el enfoque es muy preciso y prácticamente instantáneo.
Esta fotografía es otra buena muestra de lo que podemos hacer utilizando los modos de disparo que pone a nuestra disposición la función 4K Photo. Lo más interesante es que la gama dinámica, el nivel de detalle y la riqueza cromática de la G7 no quedan en entredicho al disparar en estas condiciones, por lo que podemos utilizarlos a discreción. Aunque, eso sí, es importante tener en cuenta que nos entregan imágenes de 8 megapíxeles, y no de 16 megapíxeles, que es la resolución efectiva del sensor de esta cámara. No obstante, a menos que queramos imprimir nuestras instantáneas con un tamaño descomunal, esa resolución puede ser suficiente en la mayor parte de los escenarios de captura.
Primeras conclusiones
Esta primera toma de contacto con la nueva Lumix G7 me ha dejado un «sabor de boca» muy agradable. Está bien construida, su ergonomía es muy correcta, cuenta con un visor electrónico fantástico, un enfoque realmente rápido, graba vídeo 4K/UHD, y, además, su calidad de imagen es muy alta en circunstancias diversas. En esta ocasión solo tuve una tarde para probar la cámara, y esta limitación me impidió comprobar cómo rinde en escenarios con poca luz ambiental, y también analizar qué nivel de ruido arroja al recurrir a valores de sensibilidad muy elevados (llega hasta 25.600 ISO). Cuando caiga en nuestras manos una unidad final de este modelo podremos arrojar luz sobre estos interrogantes, pero en una primera aproximación la G7 me parece una cámara muy lograda que merece la pena tener en cuenta si buscamos un modelo en su franja de precio.
Para terminar solo me queda recordaros que estará disponible a partir del próximo mes de julio con un precio de 799,99 euros el kit que incorpora el cuerpo de la cámara y la óptica de 14-42 mm f/3.5-5.6 II.
Sitio oficial | Panasonic
En Xataka Foto | Panasonic Lumix G7, todos los detalles acerca de la sin espejo Micro Cuatro Tercios con grabación de vídeo 4K
Ver 5 comentarios