La Pentax X-5 es la nueva cámara de tipo bridge que la compañía quiere mantener en liza en estos tiempos en que esta gama parece abocada al olvido apretada por debajo por las compactas avanzadas, y por encima por las sin espejo.
Pero hablemos a fondo de esta Pentax X-5 que llegará al mercado en septiembre luciendo un sensor retroiluminado de 16 megapíxeles capaz de trabajar con sensibilidades de hasta 6400 ISO. El otro gran argumento de esta cámara compacta embutida en un atractivo cuerpo de réflex es su zoom de 26 aumentos que arranca de un angular de 22 mm.
Esta nueva cámara también presume de un doble sistema de estabilización mecánico y digital, así como una pantalla de 3 pulgadas con 460.000 píxeles que podemos mover libremente en horizontal. Si queremos controlar mejor lo que vamos a fotografiar, también se incluye un visor electrónico.
La Pentax X-5 incluye bastantes modos automáticos y diferentes filtros (hasta 12) para aplicar a las imágenes que almacenamos en tarjetas SD. Si queremos realizar fotografías a gran velocidad, disponemos de una función de ráfaga de hasta diez imágenes con un máximo de treinta instantáneas al tiempo.
La salida microHDMI, la grabación de vídeo y el que use baterías AA (cuatro) son otras de sus características principales.