Uno de los secretos del éxito de Fortnite son sus populares emotes, bailes de la victoria basados en los movimientos de moda. Pero durante estas últimas semanas hemos visto que a algunos artistas no les ha gustado que Epic Games esté lucrándose con sus bailes y han iniciado una serie de acciones legales para reclamar por su uso.
Las distintas demandas todavía no han iniciado su juicio, por lo que todavía es pronto para determinar si el juego deberá retirar estos bailes o indemnizar a los creadores. Pero ¿qué dicen las leyes de propiedad intelectual? ¿es posible registrar un baile? Hemos consultado la opinión de un abogado para que nos arroje un poco de luz ante este tema.
Estos son los conflictos abiertos por la apropiación de un baile, las distintas soluciones que puede realizar la empresa del juego y los detalles que solicitan las leyes para permitir el registro de un movimiento o baile.
Los distintos casos abiertos por un baile
Alfonso Ribeiro, reconocido por interpretar a Carlton Banks en la serie 'The Fresh Prince of Bel-Air', ha sido uno de los actores en demandar a Epic Games por el uso de su icónico baile para el juego Fortnite. Los creadores del juego han obtenido récords en ganancias a través de contenidos descargables y precisamente gestos como 'Fresh' están entre ellos.
En este caso la inspiración está clara, ya que no solo se trata de un baile fácilmente reconocible y muy relacionado a su persona, sino que además el nombre de 'Fresh' proviene del título original de la serie. A lo que hay que añadir que Fortnite no ha sido el único juego demandado por el abogado de Ribeiro: 2K Games también incluyó el baile de Carlton en la serie NBA 2K.
El rapero 2 Milly con su coreografía Milly Rock, también conocida como Swipe It en Fortnite.
Antes del caso de Ribeiro, el cantante de rap 2 Milly ya demandó a través del mismo despacho a Epic Games por apropiarse de su movimiento sin permiso ni crédito. Se trata de un movimiento como si se estuviera dando un cachete que el artista creó para su canción "Milly Rock". Según TMZ, el autor solicita una indemnización y que el emote "Swipe it" sea eliminado de Fortnite.
El último caso contra el popular Battle Royale llega por parte del "chico de la mochila", nombre popular con el que se conoce a Russell Horning. A través de su madre, se ha interpuesto una demanda por el uso del Swish Swish en Fortnite. Un movimiento muy característico que se volvió viral después de un vídeo de Katy Perry y que en el juego tiene como nombre "Floss".
Al contrario que el rapero, el creador de Swish Swish no busca compensación económica y solo pide que retiren su baile. Tres denuncias en un mes que buscarán forzar a Epic Games que reoriente su estrategia respecto a los artistas, pagando licencias o dejando de utilizar algunos bailes.
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— BlocBoy JB (@BlocBoy_JB) 2 de mayo de 2018
Un conflicto para Epic Games que podría ir más allá de las denuncias hasta la fecha, ya que actores como Donald Faison también se han visto afectados por esta situación.
BlocBoy JB, comunicó a través de su cuenta de Twitter personal que Epic Games debería recompensar económicamente a los artistas por el uso de sus bailes, en este caso el movimiento "Hype" basado en el baile de su canción "Shoot".
Anne Teresa De Keersmaeker vs Beyoncé. Otro conflicto debido a la similitud de los bailes.
Más allá del juego, también hay casos de conflictos entre artistas como el que en 2011 enfrentó a la popular cantante Beyoncé con la artista Anne Teresa De Keersmaeker. La coreógrafa acusó a la artista estadounidense de plagiar su ballet 'Rosas danst Rosas' en el vídeo de 'Countdown'.
Beyoncé acabó emitiendo un comunicado afirmando que "Claramente, el ballet fue una de sus muchas referencias para el video. Constituyó una de las inspiraciones utilizadas para dar forma y sentimiento a la canción". En ese conflicto no hubo una resolución oficial de la polémica, pero los rumores indican que Keersmaeker fue recompensada por Sony en un acuerdo privado.
Qué dice la propiedad intelectual
Según el texto de la Ley de Propiedad Intelectual, aprobado por Real Decreto Legislativo 1/1996, de 12 de abril, la propiedad intelectual protege:
Las creaciones originales literarias, artísticas o científicas expresadas en cualquier medio, tales como libros, escritos, composiciones musicales, obras dramáticas, coreografías, obras audiovisuales, esculturas, obras pictóricas, planos, maquetas, mapas, fotografías, programas de ordenador y bases de datos. También protege las interpretaciones artísticas, los fonogramas, las grabaciones audiovisuales y las emisiones de radiodifusión.
Por tanto, como vemos estos bailes sí son objeto de propiedad intelectual mientras sean creaciones originales expresadas en cualquier medio o soporte. De manera adicional, estos derechos de propiedad intelectual permiten el reconocimiento a los creadores y poder recibir una retribución económica que les corresponde por la realización de sus obras y prestaciones. Una compensación que según la ley, beneficia a la sociedad en su conjunto.
Para conocer más detalles sobre esta situación hemos preguntado a Sergio Carrasco, Licenciado en Derecho y especializado en Derecho Público y Derecho Tecnológico.
"Estas coreografías, si cumplen los requisitos, son obras de propiedad intelectual en ambos casos, y hay que tenerlo en cuenta antes de utilizarlos de forma comercial. Es por eso que resulta llamativo que Epic Games no se haya comunicado previamente con los titulares de derechos para negociar su participación en los ingresos."
Respecto al tema de Antonio Ribeiro, comenta lo siguiente:
"Han llamado la atención por la fama del juego en el que aparecen, y lo fácilmente identificable que resulta identificable el baile del personaje de Carlton en la serie del Príncipe de Bel Air, hecho que resulta además agravado por el uso del nombre "fresh" para identificar al baile."
El propio especialista nos enlaza al caso específico de España, donde sí resulta posible registrar coreografías o pantomima. La solicitud es un sencillo modelo donde hay que ingresar el título de la obra, el tipo de movimiento, si desea mantenerse en el anonimato y una descripción escrita del movimiento escénico acompañada de una grabación de la obra.
¿Se puede patentar todos los bailes y movimientos?
La cantante Rosalía haciendo el tradicional gesto de las palmas flamencas.
En el caso de Alfonso Ribeiro, el actor todavía se encuentra en proceso de registro de su baile. Esto es debido a que no se trata de un proceso tan sencillo, ya que no todos los gestos o movimientos pueden patentarse.
Como leemos a través de Antonio Martínez Bodi, abogado experto en propiedad intectual, para que dicha obra sea registrable debe ser una "creación original, capaz de trasladar al espectador la impronta de su autor o su especial forma de observar la realidad a través de su obra." Y para complicar más la gestión, también está el elemento de la música. En algunos casos, se habla de obra compuesta donde la música forma parte inseparable de la pieza.
Para esclarecer las posibles dudas, en los Estados Unidos se emitió la Circular 52 de la Copyright Office. El documento afecta a todas las coreografías y pantomimas creadas a partir de 1978. Una pantomima que puede definirse, entre otras descripciones, como una serie de movimientos, gestos y expresiones faciales realizados por alguien que definan una secuencia definida y en un ambiente definido, como por ejemplo un escenario.
El documento también especifica aquellos bailes que no están protegidos por la propiedad intelectual. En este caso encontraríamos por ejemplo el vals básico, la posición de ballet o la posición de música disco. Tampoco estarían sujetos los bailes sociales, aquellos ejecutados por miembros del público y basados en rutinas simples como por ejemplo una conga, los bailes de salón o las palmas.
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