A falta de unos días para cerrar el año de la pandemia, es un hecho que las consecuencias del Covid han dejado un agujero de enormes dimensiones en el turismo de nuestro país. Cifras que llevábamos sin ver desde hace más de medio siglo. En total, el turismo ha tenido un batacazo de sus ingresos superior al 75%, según los últimos datos registrados. Un hundimiento sin precedentes para una de las principales fuentes económicas de España. Y la recuperación pinta muy lenta. Estamos ante la peor crisis vivida por el sector turístico de nuestro país en toda su historia.
Los datos. Los números no son para nada esperanzadores. El ejercicio turistico va a cerrarse este año con menos de 20 millones de llegadas de turistas extranjeros, mientras que el año pasado llegaron 83,5 millones. Y lo mismo sucede con el dinero que dejaban en nuestra tierra: su gasto no llegará a los 20.000 millones de euros, en comparación con los casi 92.000 millones de 2019. Esto supone una caída superior al 75%. Tanto, que se traduce en un récord histórico en la historia. Nunca llegaron tan pocos turistas extranjeros desde hace medio siglo. Solo se consiguieron cifras tan pésimas en 1968, cuando visitaron el país menos de 19,2 millones de turistas. Y entonces no había una pandemia brutal que sacudiera los cimientos de nuestra economía.
Ingresos. Los ingresos generales de todas las actividades derivadas del sector turístico son también devastadores. Según Exceltur, acabarán el año en torno a los 46.000 millones de euros: alrededor de 110.000 millones menos que el año pasado. El PIB turístico registrará así un retroceso sin precedentes: pasará de representar el 12,4% del producto interior bruto en 2019 a poco más del 4% en este 2020. Pero la huella del Covid no solo ha destrozado la economía de nuestro país. También lo ha hecho en el resto del mundo. De hecho, España está en línea con la caída que calcula la Organización Mundial del Turismo para el conjunto de países: un descenso en llegadas del 70%.
Tardía recuperación. Se avecina una incertidumbre creciente, principalmente porque no se sabe cuándo podrá volver a la normalidad el turismo. Un futuro gris al que hay que sumarle otros acontecimientos que moldearán el sector como el Brexit o la reducción de la capacidad de gasto derivado de la crisis económica general. La casa de análisis Funcas estima una recuperación de tan solo el 40% para 2021 y del 80% para 2022. El Gobierno ha sido más optimista y cree que la vacuna recientemente repartida en nuestro país será el pistoletazo de salida para la reactivación económica, que esperan iniciar a partir de la Semana Santa de 2021. Quizás una estimación demasiado esperanzadora.
Echar el candado. Según el último informe del Banco de España, entre el 5,9% y el 9,9% de los negocios podrían acabar convirtiéndose no sólo en "insolventes", sino también en "inviables" a raíz de la pandemia. Y dentro de este último porcentaje, el 6% del total de los negocios serían actividades inviables, abocadas a su liquidación, ante la expectativa de que sus resultados negativos se mantendrán a largo plazo.
Asimismo, la Confederación Española del Comercio (CEC), la patronal del sector, estima que unos 67.500 establecimientos se han visto obligados a cerrar por el impacto del coronavirus, lo que supone que un 15% de los comercios de España han cerrado durante la pandemia.
La llegada del ERTE. A diferencia de otras crisis recientes, esta vez el uso de la fórmula de los ERTE se ha generalizado. Según el Ministerio de Trabajo, ha habido 974.000 afectados este año, y de ellos el 60% pertenecen al sector "servicios de comidas y bebidas" o "servicios de alojamiento". Una cifra sin precedentes. Son 18 veces más de las personas que recurrieron a este procedimiento en el mismo periodo del año anterior.
¿Y el desempleo?
En el último año el sistema ha perdido más de 350.000 trabajadores. Y de 19 millones de ocupados, cerca de 750.000 están con el empleo suspendido o una reducción de jornada, lo que significa que aún hay más de 1,1 millones de trabajadores afectados por esta crisis, de los cuales cerca de 370.000 se han ido al paro. La tasa actual de desempleo en España en octubre era de 16,26%. Y tampoco parece que vaya a mejorar: la estimación del FMI es que alcance los niveles de 2019 (14,1%) hasta, por lo menos, 2026. En comparación con el resto del panorama internacional, somos el segundo país con más desempleo de la OCDE. Y duplicamos con creces la media de la organización, que que es del 7,1 %.
Imagen: Javier Barbancho (GTRES)