Vamos a sumar dos noticias de los últimos días. La primera, una serie de encuestas realizadas sobre más de un millar de jóvenes ingleses desvelaba que una de las principales razones por las que los chicos y chicas se decantaban para elegir sus destinos vacacionales no era el relax o el contexto histórico, sino más bien las posibilidades de que ese lugar sea intagramizable. Es decir, de que puedan llevarse un trocito del paisaje a su perfil en la red social estrella de la provocación de envidias ajenas.
Paréntesis: antes de que fustiguemos a los millenials por sus respuestas, el estudio también indicaba que los adultos también mostraban unas puntuaciones altas de vanidad digital para elegir sus vacaciones, aunque se centraban más en redes como Facebook que Instagram.
Segunda: el universo de los realizadores de fotografía extrema se nos está yendo un poco de las manos. Solo con ver la última sesión de la rusa Angela Nikolau se te quitará el hipo y se te cortarán las ganas de mirar hacia abajo.
Así que... ¿qué sucede si mezclamos estas dos ideas? Que nos encontramos con que buena parte de los trabajadores estarán ya planeando su verano y tal vez quieran recoger algunas ideas de posibles destinos que permitan combinar esas dos facetas, la de las instantáneas exóticas muy hermosas y que además puedan realizarse en lugares de vértigo. De ahí que hayamos querido traeros esta selección de los espacios turísticos que despertarían el deseo entre tus contactos y te ayudarían a disfrutar de una visita de vistas impagables... Siempre que no te de miedo mirar abajo.
Y si nos hemos dejado algún rincón ineludible dentro de esta idea, no dudes en dejárnosla en los comentarios.
La piedra del Peñol
“Bienvenido al mejor mirador del mundo”. Así saluda el peñón de Guatapé, en Antioquia, a los visitantes que hayan subido el enorme monolito compuesto por cuarzo, feldespato y mica. Son más de 700 escalones hasta la cumbre, pero según cuentan, son de las mejores vistas de toda Colombia.
El Pailón del Diablo
El Pailón del Diablo, en la región de Baños (Ecuador) es una enorme cascada de aguas calientes y de más de 80 metros de altura. El mirador, en la falda de la montaña, permite al excursionista observar en todo su esplendor la caída de agua, y dicen que si te asomas desde el puente colgante en la roca se divisa la cara del diablo.
Terrazas de Arroz Longji
Hay en el condado de Longsheng, en China, unas extensiones de cientos de kilómetros llamadas Terrazas de Arroz Longji. A lo largo de estas laderas, de escalones artificiales pronunciados que pueden llegar a tener hasta 800 metros de altura, se encuentran en algunos casos hogares cuyos miembros están más que acostumbrados a hacer hiking constante.
Montañas Amarillas de Huangshan
¿Un paisaje digno de aparecer en un antiguo cuento chino? ¿Tal vez el escenario de una épica batalla wuxia a lo Tigre y Dragón? Huangshan es un inmenso conjunto de picos rocosos que se extiende a lo largo de 154 kilómetros cuadrados. Los autóctonos la consideraban una morada de los dioses. Pasear por sus pasadizos laterales se convertirá en todo un desafío para tu mente.
El Templo Xuankong o el Monasterio suspendido
Esta impresionante concatenación de templos de madera está edificada en una pared a 75 metros de altura cerca del Monte Heng en la Provincia de Shanxi, China. Se dice que tienen más de 1.500 años, y son conocidos no solo por su localización, también porque es el único centro de culto que combina las tres religiones tradicionales chinas: budismo, taoísmo y confucianismo.
Castillo Nido de Golondrina
En la cima de un acantilado de 40 m de altura, con diseño neogótico, este edificio decorativo en las inmediaciones de Yalta, en la península de Crimea, se ha convertido en uno de los símbolos de la guerra de Crimea y popular atracción turística. Desde ahí podrás observar el oleaje del mar negro en total calma con el mundo que te rodea.
Monasterio de Phugtal
No es un panel de abejas, sino una concentración de viviendas de un monasterio indio hechas de barro y madera con más de 800 años de historia. Encontrarás este sitio santo en la región sudoriental de Zanskar, al norte del país. El edificio lo empleaban los antiguos monjes viajeros para protegerse y meditar. Dentro hay más de 70 habitaciónes y hasta una biblioteca. Y sí, está abierto al público.
El Balcón del Coño
¿Ves ese pequeño balcón que se asoma a cientos de metros de altura en la segunda foto? Si te imaginas ahí dentro en este rincón de Andalucía oficialmente conocido como el Mirador de la Peña de Berlanga, podrás entender bien por qué lo peculiar del nombre popular del emplazamiento.
Meteora
Los Monasterios suspendidos en los aires de la llanura de Tesalia en Grecia son uno de los rincones más cotizados entre los turistas extremos, aunque antes lo era para los que buscaban una vida ascética. Los más de 800 metros de altura por los que se rodea este enclave existente desde hace cientos de años lo convierten en un lugar idóneo para solitarios y también muy mal lugar para jugar al fútbol.
Las Escaleras al infinito de Huayna Picchu
“Escaleras al infinito” o como decían los antiguos incas: ¿quieres morir? Al parecer, la prueba física, mental y emocional de subir hasta la cima se pone en juego en cada peldaño, y hay quien vive experiencias extransensoriales durante el ascenso.
Fortaleza de Mehrangarh
En lo alto de una colina a 125 metros de altura, se sitúa la fortaleza de Mehrangarh, una majestuosa construcción junto a la ciudad de Jodhpur, en Rajastán, considerada una de las más impresionantes y mejor conservadas de toda India. La belleza es tan fuerte en su exterior como en su interior, así que, si tienes la oportunidad, no sólo puedes sentir vértigo al observar su altura, sino al maravillarte con sus decorados de delicadas pinturas y vidrieras coloridas.
Las Montañas de Cangyan
Este paraje, también conocido como las montañas de roca verde, es una pequeña y bellísima zona montañosa en Jingxing, en China. Aunque hay zonas con más de 1.000 metros de altura, el popular templo budista Celebración Fortuna está un poco más bajo, rodeado de bosque y conectado con un puente que atraviesa una garganta estrecha a la que podrás asomarte tras subir más de 300 escalones. Aquí sí que se grabó de verdad Tigre y Dragón.
Cuevas de Maijishan
Ni el lateral de un panal de abejas ni un terrario de hormigas. Otra construcción escarpada sobre pierda arenisca y a decenas de metros de altura en el monte homónimo en Tianshui en la provincia del Gansu, China. Sus 194 grutas contenían unas 7.200 esculturas budistas de terracota, manuscritos y pinturas murales, pero muchos de estos tesoros fueron saqueados a lo largo de los siglos.
El pilar de Katskhi
Estamos ante un monolito de piedra caliza, de 40 metros de altura, situado en Katskhi, una aldea de la región occidental georgiana de Imereti. El pilar de la cumbre es una pequeña iglesia construida por los cristianos ascetas entre los siglos VI y VIII. Subir ahora no puede ser mucho más de lo que lo era entonces: lo que te espera es una terrible ascensión por una frágil escalera fina de hierro, tal y como te lo imaginas.
Taktshang
Su traducción es Nido del Tigre y es uno de los puntos del budismo más venerados en la zona del Himalaya, en Bután. Fue construido en 1692 y a pesar de que el acceso a los visitantes está muy restringido, bien vale el esfuerzo de intentar conseguirlo: si llegas a la estructura estarás a 3.140 metros con respecto al nivel del mar. Un lugar idóneo para aclarar tus ideas.
El Pabellón de Ajedrez
Otro paisaje que parece más un dibujo de una película de animación que algo real, pero este sitio existe de verdad. El Monte Hua es una de las Cinco Grandes Montañas sagradas del taoísmo, y aunque desde hace 20 años hay un teleférico para acceder, todavía puedes hacer el recorrido por los laterales de la pared rocosa a golpe de piquetes. La ruta del monte Hua sigue considerándose la más peligrosa del mundo, pero échale un vistazo a esa imagen y dinos que no deben ser unas vistas que te quiten el aliento.
Setenil de las Bodegas
En el caso de este monumento humano y natural lo hemos planteado justo a la inversa: el miedo no es estar en lo algo, sino que sea el propio medio el que pueda asfixiarnos por arriba. Esta bonita zona gaditana es famosa por la singularidad y belleza de su entramado urbano, y como se ve en las fotos, es la misma roca la que aprisiona y amenaza contra el suelo a las casitas blancas del municipio.
Positano
Y después de este recorrido de emociones fuertes, te dejamos con un turismo más casero y asequible. Este pintoresco pueblo italiano a 40 kilómetros de Nápoles se abraza a una roca casi vertical en la costa de Amalfi. Sus edificios, de arquitectura árabe, te enamorarán. Patrimonio de la Humanidad de la Unesco y un lugar que, aunque elevado, no va a intentar provocarte una taquicardia con ello.
Fotos: Hugo A. Quintero G., Angie Carvajal, Pedro M. Martínez Corada, Oisin Prendiville, Andrei Dimofte, Xaxumu, Drolexandre, Blbrk, Chi King, Gisling, Zhangzhugang, Dave Proffer, Иерей Максим Массалитин, hamon jp, Klomiz, Manfred Werner, Dido3, Vaggelis Vlahos, JuanPabloSan, Valerie Hinojosa, severin.stalder, Shitha Valsan, Daniel Villafruela, Rolfmueller, nozomiiqel, MarsmanRom, Anagoria, ლევან ნიორაძე, Douglas J. McLaughlin, Göran Höglund (Kartläsarn), Strudelt, Chensiyuan, Jensens, Eric Hossinger.
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