El nuevo presidente de los Estados Unidos odia a los periodistas, pero los periodistas, recelosos entre sus maneras bravuconas y autoritarias y su fuente inagotable de titulares, han encontrado en él una mina de oro. Vale tanto para The New York Times o The Washington Post como para Der Spiegel o The Economist: Trump es una perenne inspiración.
El revitalizado carácter opuesto de la prensa frente al poder no le va a devolver la influencia perdida, manifestada en su clara derrota electoral (porque también fue suya) del pasado otoño. Pero, al menos, le está sirviendo para recuperar parte del esplendor perdido. Y no hay mejor modo de observarlo que a través de las portadas más recientes de algunas de las revistas más prestigiosas. Si Trump es un fenómeno nuevo, oscuro y, en muchos sentidos, temible, habrá que contarlo de formas provocativas y atrevidas.
Esta es una pequeña recopilación de las portadas más interesantes que Trump ha generado hasta la fecha.
1. Der Spiegel: Trump vs. la libertad
Una de las más polémicas hasta la fecha: Der Spiegel ha caracterizado a Trump cortando la cabeza de la estatua de la libertad a raíz del cierre de las fronteras a siete países musulmanes. "America First".
2. The Atlantic: el espejo del nuevo populismo
Una portada brillante por cómo construye el juego de significados: Trump personificado y puesto frente a la masa que le ha aupado hasta la presidencia, y también elevado sobre ella, oscurecido por las sombras, amenazante. "Cómo construir una autocracia".
T3. he Economist: la insurgencia oficial
"Un insurgente en la Casa Blanca". La rebelión está dentro, según The Economist.
4. New Yorker: la llama que se apaga
Posiblemente, la portada más simbólica.
5. New Yorker (II): un facepalm histórico
JFK, Lincoln, Teddy Roosevelt, Franklin D. Roosevelt y Washington observan con espanto el ascenso de Trump, el 45º presidente de los Estados Unidos, meses antes de que se consumara su elección. El New Yorker contraponía la histórica dignidad y alta clase política de algunos de los presidentes más notables de la historia del país frente a las maneras zafias y demagogas de Trump.
6. Time: el hombre del año
A lo que Trump respondió: ¿por qué "la persona", por qué no "el hombre"?
7. Time (II): un hombre que se derretía
A finales de campaña, los escándalos y la incapacidad de Trump de remontar en las encuestas hacían prever un descalabro en noviembre. Time lo ilustró así: "El derretimiento". La portada era muy buena, pero también fracasó en su predicción de forma estrepitosa.
8. New Yorker (III): el elefante en la habitación
En mayo del año pasado, Trump era ya el candidato por el Partido Republicano, lo que llevó a muchos a preguntarse si no sería el fin del GOP. El New Yorker lo ilustró con un elefante aún vivo pero sólo por arte de magia (el elefante es el símbolo del partido).
9. The Economist (II): tenemos un problema
Nada es más identificable en Trump que su extraño peinado. The Economist se valía de él para predecir, a un año vista, lo que podría pasar si Trump accedía a la Casa Blanca. Un problema para toda la élite política de Washington.
10. Mother Jones: en armas
Una llamada a la acción de una revista a la izquierda del espectro político: "Rise up" significa "Levantaos", una forma de "enfrentarse a los extremistas que están capitalizando la victoria de Trump".
11. Bloomber Business: la portada hecha meme
"Inserte aquí una precipitadamente diseñada, legalmente dudosa, económicamente desestabilizante orden ejecutiva". Bloomberg, siguiendo el meme que tanto ha disfrutado Internet estos días, pero llevado a la portada.
12. Time (III): el tipo entre las sombras
Una semana después del inicio de la presidencia de Trump, Time señalaba al hombre detrás de gran parte de las primeras órdenes ejecutivas: Steve Bannon, "el gran manipulador".
13. New Yorker (IV): el muro que no cesa
La portada tras la victoria de Trump. Es muy buena y por eso se explica sola.
14. The Economist (III): ¿en serio?
En marzo del año pasado, The Economist apenas se lo creía. "¿En serio?", se preguntaba. En serio.
15. Esquire: el odio al frente
Esquire jugaba hace un año con la idea de "Commander in Chief", comandante en jefe, habitual forma de refereirse el Presidente de los Estados Unidos, que en manos de Trump quedaría resumida en un "Hater in Chief", el alentador oficial del discurso del odio.
16. Letras Libres: el fascista americano
También se explica sola.
17. Newsweek: el estado de la resistencia
En referencia a California, bastión demócrata y estado más importante a nivel económico de la unión, capaz, quizá, de enfrentarse y resistir a Trump.
18. Harper's: cómo sobrevivir a Trump
Haciendo a América grande otra vez. Pero no del modo en el que se refiere Trump. Sino de otro muy distinto. Todo simbolismo.
19. The Advocate: ha llegado la hora
Tras la presidencia de Trump y sus primeras medidas, el momento de asustarse (para todos los que no estén con él) y de mirar al vacío.