21 motivos por los que el verano te está amargando la vida

21 motivos por los que el verano te está amargando la vida
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El verano, el periodo del año más adorado por todo ser humano. ¿Por todos? No exactamente. En los confines de la marginalidad, un irreductible grupo de millones de personas detesta con toda la sinceridad de su alma los meses estivales. Su letanía es silenciosa, porque afirmarla en público conllevaría el desprecio de sus iguales, pero está argumentada en torno a certeros razonamientos. Aquí hemos recopilado 21 motivos por los que el verano te está en realidad amargando la vida.

1. Porque hace CALOR

Sun

"Qué ganas de que llegue el veranito para disfrutar del buen tiempo, jejeje". Veamos, alma cándida, ¿qué consideración tienes por "buen tiempo"? El tiempo durante el verano no es más que el reverso tenebroso de las gélidas temperaturas de febrero, su perversa cara de la moneda. Buen tiempo no es disfrutar de agradables 38º C a las 21.00, buen tiempo no es sufrir de insomnio crónico por la ausencia de frescor nocturno, buen tiempo NO es derretirse en sudor al salir de la ducha.

El tiempo del verano español es un horror.

2. Porque es el festival del insecto

Avispa

Recluidos durante el resto del año en sus seguras madrigueras, todos los insectos del planeta hacen su estelar aparición cuando llega junio, sólo para recluirse de nuevo en sus cuevas al término de septiembre. Su único objetivo es destrozar todo elemento de paz y tranquilidad en tu vida. El mosquito que zumba en tu oído mientras intentas dormir, la mosca que interrumpe tu sesteo con el Tour después de comer, la avispa que quiere robarte la sangre y convertirte en un infectado.

3. Porque todo está lleno de gente

Plague

Sí, es cierto, las grandes ciudades no turísticas, allí donde sueles vivir, se vacían y mueren víctimas de la tiranía de los rayos solares. Pero el resto del mundo, todos los sitios interesantes a los que quieres ir, está lleno de gente. De demasiada gente. Visitar cualquier ciudad europea en verano es hacerlo entre una marabunta aún peor de turistas. Acudir a la playa es sumergirte en las fauces de las pesadillas de la civilización moderna. Ni siquiera el retiro rural en el monte se salva.

4. "Mira dónde estado, pringado"

Katy

Cuando las barreras de la privacidad cayeron, nadie esperaba que una de las peores consecuencias fuera todo tu TL de Facebook tratando de hacerte sentir peor persona de forma compulsiva. "Mírame, soy más feliz que tú", parecen decir todas esas fotos que inundan las cuentas de tus amigos todos los meses de julio y agosto. Mientras tanto, el reloj jamás se mueve en la oficina, y tú maldices aquel momento en el que ver las fotos de vacaciones de los demás se convirtió en una obligación.

5. Porque "Aquí, sufriendo"

Boo This Man

6. Porque nunca pasa nada

Grump

Cualquier plan queda derivado a septiembre. ¿Apuntarte a una academia de italiano? Mmmmm, estamos a principio de julio, ya lo haré cuando termine el verano. ¿Aprender a tocar la guitarra? Deja, deja, hasta que no llegue septiembre no me pongo con ello. ¿Hablamos aquel plan de montar un bar? No, es ¡agosto!, ¿por qué no mejor hacerlo ya cuando empiece el curso?

El verano es el periodo en el que todo se postpone de forma indefinida. Da igual las ganas que tengas de hacer algo en el momento: son dos meses, tres, en los que se pierde el tiempo de forma incomprensible. Todo se deja para el fin de las vacaciones, aunque sólo hayas tenido dos semanas de vacaciones a mediados de julio y no vuelvas a disfrutar de otras hasta Navidad. En consecuencia, convertimos a septiembre en un lógico infierno. Pero no es su culpa, ¡es del verano!

7. Porque todo es más caro

Trap

Dado que la humanidad se sincroniza para hacer las mismas cosas al mismo tiempo, quienes se dedican a sacar beneficio de ello lo hacen sin misericordia. Hacer cualquier cosa en verano es mucho más caro que hacerlo en cualquier otro momento del año. "Pero es que en verano hace buen tiempo y no voy a ir a la playa en octubre". Exacto, ese es precisamente el problema.

8. Por el horror estético

Micky

Humanidad, ropa; ropa, humanidad: tenemos que hablar. De algún modo, la llegada del buen tiempo nos convierte a casi todos en un puñado de cosas estampadas con palmeras y barquitos, chancletas y elementos fosforitos cuya mera visión haría vomitar a una cabra. ¿En qué momento las grandes cadenas de ropa decidieron de forma unánime que el calor tenía que llegar aparejado de forma irremediable con algunas de las camisas, camisetas y pantalones más horteras de siempre?

9. Por los mojitos

Ronswansonremovethisman

Tío, en serio, estás en Valladolid, a 400 kilómetros de la playa más cercana, NO CUELA.

10. Porque sólo puedes salir a la calle de noche

Morlocks

"Voy a salir a correr... Uhm, no, vale, ahí fuera está lloviendo fuego, mejor espero tres horas para hacerlo". En ese periodo de tiempo, te tumbas en el sofá, pierdes el tiempo, no haces lo que te apetece hacer y, en el camino, pierdes las ganas de salir a correr. Porque cuando lo haces volvemos al punto 2: cenas mosquitos. "¿Te vienes de compras al centro?". No, claro que no, quién querría levantar bolsas y probarse ropa a 40º C a la sombra.

En verano sólo vives de noche, y eso no está mal, pero te hace perder el resto del día.

11. Porque siempre se te olvida regar las plantas

Not Again

Dado el punto 1 y el punto 10, regar se convierte en una actividad que siempre te pilla a desmano. Quieres a tus plantas, pero te da una pereza terrible coger la manguera y regarlas a las 22.00. Lo recuerdas de forma repentina pasada la medianoche, acudes a la terraza hipocondríaco rezando porque aún sigan vivas, en mitad de la cena, cuando ya estás en la cama y es demasiado tarde, cuando estás viendo una película y NO te apetece. Y siempre, siempre mueren.

12. Porque no puedes dormir

Insomnia

Si pones el aire acondicionado, te resfrías, porque el aire acondicionado es LO PEOR. Si pones el ventilador, el ruido te molesta demasiado, y además también te vas a resfriar. Si no pones ninguno de los dos, mueres de calor por más ropa que te quites. Si subes la persiana, entra demasiada luz o demasiado ruido. Si vives en el campo, entra demasiado frío o demasiados insectos.

13. ¿Vacaciones, qué vacaciones?

Wok

¿Ves a ese niño cuya sonrisa es la sonrisa de la felicidad a mediados de junio? Bien, pues no es la tuya. Desmitifiquemos de una vez la idea de que el verano está asociado a las vacaciones. Es falso: pasas la mayor parte del tiempo trabajando, y también lo hacen tus compañeros. El problema es que creamos una ficción en la cual el resto del mundo está disfrutando en la playa y sólo nosotros en la oficina. Y eso es frustrante, pero no es real: verano dejó de ser igual a vacaciones a los 23 años.

14. Porque han colonizado tu piscina

Pool Bear

"Venga, vamos a relajarnos un poco a la piscina de al lado de casa". Jamás: estará repleta de niños hiperactivos con una inmensa cantidad de tiempo libre chapoteando, gritando, lanzando objetos por encima de tu cabeza, gritando aún más, peleándose, pasándolo bien. Cosa que tú, hombre o mujer de mediana edad creyendo que en una piscina existe tal cosa como "un momentito de relax", no vas a conseguir. Abandona toda lucha, es fútil. Lo que nos lleva a...

15. Porque NIÑOS

Kids

Están por todas partes. No hay lugar donde puedas huir. Son felices. No tienen límites.

16. Porque como todos los meses de agosto

Las televisiones se llenarán de los mismos reportajes sobre ocupación hotelera en Benidorm (alta, siempre alta, gracias por preguntar), los periódicos publicarán temas del día a doble página sobre la nueva ola de calor que se repite cada año (es verano, hace calor, hazte a la idea), y los programas vespertinos de radio debatirán sobre el nuevo deporte de aventura que lo está petando entre la gente que siempre parece molar mucho más que tú.

Y porque webs como esta publicarán artículos sobre las 21 verdades del verano que tienes que leer.

16 (bis). Alerta estereotipo

Verano Estereotipo

O la terrible carencia imaginativa de la humanidad durante los meses de verano. Una playa de arena blanca, aguas turquesas, balones de playa, mojitos, palmeras, hamacas, la gloria del cliché.

17. Por los fichajes

Iniesta

Y sus tautologías asociadas. Periodistas deportivos, dejadnos vivir.

18. Porque el Tour ha empezado

Cunao

Y si te gusta el ciclismo, se habrá convertido en la feria de monstruos futbolística de cada año. Ya en su bar más cercano, la última tertulia improvisada sobre si Quintana debería haber atacado en los Pirineos o si Movistar hizo bien guardando fuerzas para el podio de Valverde. "Qué aburridas son las etapas llanas", "echo de menos a Pantani porque todos mis ídolos son cocainómanos", "¿te acuerdas de aquel ataque de Chiappucci", "buah, eso sí que eran buenos tiempos".

19. Porque el Tour ha terminado

Tristeza

Y las 21 mejores sobremesas de todo el año se han esfumado en un abrir y cerrar de ojos, dejándonos huérfanos de una carrera maravillosa que pone alivio allí donde el verano causa estragos. Y porque aún quedan tres semanas hasta que empiece la Vuelta.

20. Por las canciones del verano

¿Escuchas ese ritmo latino que domina cada rincón de tu barrio, todos los bares a los que estás yendo de fiesta? ¿Esas frases vacías sobre palmeras y enamorarte en una playa? ¿Ese compendio de clichés sobre el buen tiempo, la piscina y las sonrisas imperecederas? Son las canciones del verano, un éxito continuado de horror y desvergüenza desde mediados de los '90. Ahora con extra de electrolatino y anuncios de Spotify con aguas turquesas como banner.

21. Y porque dura demasiado poco

Anguish

No hay ninguna época del año que dure tan poco como el verano, y se trata única y exclusivamente de una cuestión de mentalidad. Vivimos obsesionados por la carencia de días del verano, por la vuelta a la dura realidad en septiembre que no es tal, porque el disfrute se acaba demasiado pronto. Una cuenta atrás estresante y permanente que no se repite en el otoño, en el invierno o en la primavera, cuya duración parece ser sempiterna. Y eso también es un problema del verano.

Quizá el principal: el más amargo.

Imagen | Pixabay

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