Colonización consentida o territorio en disputa: así marcha la guerra por la propiedad de Cisjordania

Nota del editor: El Secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, afirmó el 18 de noviembre que los asentamientos israelíes en Cisjordania no violan el derecho internacional, algo que complació a los judíos israelíes que ven el territorio como legítimamente suyo y enfureció a los palestinos que viven allí y lo reclaman como su tierra._

En este artículo, un profesor universitario de estudios israelíes y autor de un nuevo libro sobre el conflicto palestino-israelí explica la historia de los asentamientos de Cisjordania y el por qué de su controversia._

1. ¿Por qué es tan discutida la propiedad de Cisjordania?

En mayo de 1967, ni un solo israelí vivía en Cisjordania: una región montañosa del tamaño de la provincia de Tarragona. Se trataba del hogar de aproximadamente un millón de palestinos que habían estado viviendo bajo el control jordano durante dos décadas.

Israel conquistó Cisjordania durante la Guerra de los Seis Días en junio de 1967 y poco después los civiles israelíes comenzaron a trasladarse a la región, inicialmente a zonas como Kfar Etzion, que habían sido el hogar de comunidades judías antes de la fundación de Israel en 1948.

En 1968, un rabino llamado Moshe Levinger y un pequeño grupo de seguidores que apoyaban una versión mesiánica del sionismo religioso se mudaron a la antigua ciudad de Hebrón, en el corazón de Cisjordania. Hebrón es una ciudad santa para los judíos porque se cree que es el lugar de sepultura de los patriarcas y matriarcas judíos Abraham, Isaac, Jacob, Sara, Rebeca y Lea.

El número de israelíes que reside en Cisjordania se ha multiplicado a lo largo de los años. Se calcula que unos 430.000 judíos israelíes viven actualmente en 132 "asentamientos" reconocidos oficialmente y en 121 "avanzadillas" no oficiales que requieren, pero aún no han recibido, la aprobación del gobierno. Estos "colonos", que constituyen alrededor del 15% de la población total de Cisjordania, viven en sus propias comunidades, separados de los aproximadamente 3 millones de palestinos que residen en la zona.

2. ¿Por qué los palestinos se oponen a los colonos israelíes?

Aunque son vecinos y a veces compañeros de trabajo, las relaciones entre judíos y palestinos en Cisjordania rara vez son amistosas. Los palestinos de Cisjordania, mayoritariamente musulmanes, se consideran a sí mismos como los habitantes autóctonos de la zona; muchos de sus antepasados llevan muchos siglos viviendo en Cisjordania y cultivando sus tierras.

Los palestinos sostienen que los asentamientos israelíes en Cisjordania se han construidos sobre tierras robadas y que el uso del agua por parte de los colonos (un recurso escaso) es igualmente ilegal.

Los palestinos son a menudo víctimas del acoso de colonos israelíes extremistas, a veces cuando los soldados israelíes los examinan con la mirada. Existen cientos de informes de colonos extremistas, muchos de ellos armados, en los que se describe cómo atacan violentamente a palestinos, quemando sus campos y arrancando sus olivos.

Además, Israel se ha apropiado de tierras de Cisjordania para construir una red de carreteras que conectan los asentamientos con Israel y entre sí. Estas carreteras están generalmente fuera de los límites para los conductores palestinos, lo que dificulta su libertad de movimiento y hace que viajar dentro de Cisjordania sea más difícil y lleve más tiempo.

Los puestos de control de seguridad del ejército israelí que salpican Cisjordania, destinados a proteger a los israelíes de los ataques terroristas, también restringen y complican la capacidad del pueblo palestino para desplazarse.

3.  ¿Por qué quieren los israelíes vivir en Cisjordania?

Los israelíes eligen vivir en Cisjordania por muchas razones.

El estereotipo popular de que los colonos judíos son fanáticos religiosos decididos a reclamar toda la antigua patria que creen que Dios otorgó a los judíos no es del todo exacto. Se estima que sólo una cuarta parte de los colonos de Cisjordania viven en estas tierras por convicción ideológica.

Sin embargo, estos fervientes colonos son una minoría vocal muy visible. Generalmente viven en asentamientos más pequeños, ubicados en las profundidades de Cisjordania.

Ven su presencia en la zona como una forma de asegurar el control judío permanente sobre Cisjordania, a la que denominan con los nombres bíblicos "Judea y Samaria". Estos colonos creen que al vivir en Cisjordania están sirviendo a la voluntad de Dios y ayudando a que se produzca la tan esperada llegada del Mesías.

Sin embargo, la mayoría de los colonos judíos de Cisjordania viven en la zona por motivos económicos. La inversión del gobierno israelí y los incentivos destinados a alentar a los judíos a establecerse allí hacen que el costo de la vida sea más bajo que dentro de Israel.

Muchos judíos de Cisjordania son laicos, en particular los que emigraron procedentes de la antigua Unión Soviética desde principios de la década de 1990.

Otros, como el creciente número de judíos ultraortodoxos que viven en Cisjordania, pueden que crean que Dios otorgó Cisjordania a Israel, pero se mudan a la zona principalmente porque pueden encontrar viviendas asequibles y una mejor calidad de vida.

4. ¿Son legales los asentamientos israelíes en Cisjordania o no?

La mayoría de los expertos jurídicos y las Naciones Unidas coinciden en que los asentamientos israelíes en Cisjordania violan el derecho internacional.

La Convención de Ginebra de 1949, firmada por Israel, prohíbe a cualquier Estado ocupante trasladar a sus propios civiles al territorio que ocupa. Según la Corte Internacional de Justicia, el principal órgano judicial de la ONU, Cisjordania se considera territorio ocupado porque no era parte de Israel antes de que el ejército israelí lo conquistara en 1967. La conquista territorial también está prohibida por el derecho internacional.

El gobierno israelí afirma que la Convención de Ginebra no es aplicable a Cisjordania porque sólo se refiere a un estado que ocupa tierras de otro estado. Israel considera que el "territorio en disputa" de Cisjordania es un territorio no ocupado.

Además, el gobierno de Israel ha argumentado que, incluso si se aplicara la Convención de Ginebra, sólo prohibiría los traslados forzosos de población, como las deportaciones masivas llevadas a cabo por la Alemania nazi, y no el movimiento voluntario de personas a los territorios ocupados.

La nueva posición de la administración Trump de que los asentamientos israelíes no son ilegales impulsa las reivindicaciones de Israel sobre Cisjordania. Pero es poco probable que legitime los asentamientos israelíes a los ojos de la comunidad internacional.

Fotos: Justin McIntosh, Heinrich Böll Foundation, Anthony Baratier,
Czech160
.

Autor: Dov Waxman, Doctor de Ciencias Políticas, Asuntos Internacionales y Estudios de Israel, Northeastern University.

Este artículo ha sido publicado originalmente en The Conversation. Puedes leer el artículo original aquí.

Traducido por Silvestre Urbón.

Conversation

Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com

VER 0 Comentario

Portada de Xataka