La deuda pública española ya supera el 100% del producto interior bruto. Pese a que hay dudas sobre los datos desvelados hoy por el Banco de España (los análisis de prensa), como apunta el corresponsal en España del Financial Times, toman como referencia el dato de la deuda de del primre trimestre de 2016, pero no actualizan al mismo periodo de tiempo los del PIB), hay algo que sí es evidente: el montante de lo adeudado por el estado español continúa creciendo, alcanzando máximos históricos. Y superando una barrera psicológica, la del 100%, hace tan sólo unos años remota y reducida a un puñado de países.
¿Cómo entender mejor el alcance de la deuda española? Interpretando su contexto internacional, el de su entorno, y observando qué estados se enfrentan a problemas parecidos. Y también repasando el desarrolo histórico de la deuda tanto española como del resto de países de su esfera, tanto en Europa como en América. Nosotros hemos optado por acudir a un relato gráfico en once gráficas que explican la deuda española.
España y su deuda: un problema reciente
Datos: Fondo Monetario Internacional.
El crecimiento exponencial de la deuda española es un problema relativamente cercano, que comienza a tomar su actual forma con el estallido de la crisis económica mundial de 2008. Los ingresos del estado español se desploman y el gasto aumenta, provocando un déficit disparado que los sucesivos gobiernos han sido incapaces de reducir (o de cumplir lo pactado con las instituciones europeas) desde entonces. Es entonces cuando la gráfica de arriba detiene su progresivo descenso desde 1995 y comienza a escalar.
Un problema, además, compartido con otros
Datos: Eurostat.
La crisis de deuda de los países de la eurozona no se ha reducido de forma exclusiva a España. Otros lo han tenido peor. El caso más evidente es el de Grecia, que ha necesitado tres líneas de rescate distintas y que afronta hoy una situación económica de extrema gravedad. Su deuda se eleva por encima alrededor del 200%, la más alta de Europa. Portugal e Irlanda, las otras dos economías rescatadas, observan repuntes similares al español a partir de 2008. Todos ellos han atravesado dificultades, sólo Irlanda parece haberlas superado.
Islandia sufrió un profundo revés económico en 2008, y su deuda alcanzó casi el 100% de la noche a la mañana. Desde entonces, la economía se ha recuperado. Aunque continúa por encima del 80%, se espera que descienda de forma progresiva. Datos: Fondo Monetario Internacional.
Mención aparte merece Italia. También forma del selecto grupo de PIGS, pero sus problemas de deuda se arrastran desde décadas anteriores. Pese a que la crisis de 2008 empeora su situación, lo hace de forma más suave que sus compañeros sudeuropeos. En el anterior grupo, por cierto, también puede incluirse a Islandia: país en bancarrota y rescatado pese a estar fuera de la eurozona, aún tiene una gran deuda pública, fruto de su colapso de hace ocho años.
La brecha con el resto de Europa no es tan grande
Datos: Eurostat.
Los anteriores gráficos muestran cómo la deuda española ha crecido acompasada al del resto de países cuya economía se vio muy resentida tras las turbulencias económicas de finales de la pasada década. ¿Cómo evolucionó comparada con los países que menos sufrieron? De forma muy vertical: antes de la crisis, España contaba con niveles de deuda menores a los de Suecia, Alemania, Gran Bretaña y Francia. Exceptuando el país escandinavo, cuya economía va muy bien, la deuda de los otros tres también ha crecido. Solo que la de España lo ha hecho mucho más. Pero la brecha no es tan abismal.
Estados Unidos ha sufrido un proceso similar
Datos: Fondo Monetario Internacional.
La deuda nacional de Estados Unidos, la primera potencia económica mundial, se encuentra en niveles semejantes a los de España. Desde la tormenta financiera de 2008, su montante de deuda pública no ha hecho sino crecer. A día de hoy, también supera el 100% de su producto interior bruto, aunque es improbable que esto le cause problemas de financiación alguno. La economía estadounidense se ha recuperado mejor que la europea de la recesión, y su deuda sigue siendo un valor seguro.
La deuda española está en niveles medios
Datos: Fondo Monetario Internacional.
De las principales potencias mundial, al menos. Es cierto, está creciendo de forma dramática, pero aún se mantiene en niveles relativamente semejantes a los del resto de grandes economías del planeta. Es superior a la de la media de la Unión Europea y de la Eurozona, pero no en demasía, y está por debajo del cálculo global que el Fondo Monetario Internacional hace para las "economías avanzadas". Comparada con la de las siete mayores potencias del mundo, es pequeña: Italia, Estados Unidos y Japón tienen muchísima deuda.
Pero no si la comparamos con otras economías
Datos: Fondo Monetario Internacional.
El anterior gráfico pierde de vista un aspecto fundamental para entender la deuda: es un problema, a grandes rasgos, de países europeos, de Japón y de Estados Unidos, precisamente las economías más importantes del mundo. Pero no lo es en los países en vías de desarrollo. Una leve comparación con los estados sudamericanos demuestra hasta qué punto la deuda de España sí es desproporcionada: está muy por encima de la mexicana, la ecuatoriana o la colombiana, países cuyos problemas de deuda fueron solventados hace décadas.
Datos: Fondo Monetario Internacional.
El caso asimilable más reciente, en América Latina, sería el de Argentina: sus problemas económicos a principios de la pasada década dispararon sus niveles de deuda hasta niveles insostenibles, corralito mediante, pero decayó rápidamente al poco tiempo. Hoy está muy por debajo de la española.
España está a la cabeza, pero otros le superan
Datos: Fondo Monetario Internacional.
La deuda pública española se cuenta entre las más extensas del planeta, hablemos de economías desarrolladas o en vías de desarrollo. Pero aún tiene un largo camino por delante para superar los niveles de deuda de los actuales campeones en la materia. La de Japón se dispara, inalcanzable, por encima del 250%. La de Grecia se encamina al 180%, la de Jamaica sólo se queda algo por debajo y la del Líbano y la de Italia supera el 120%. España está en el 100%, y con previsiones de crecimiento moderadas.
En perspectiva, es un problema de unos pocos
Y terminamos con un mapa que apoya lo mencionado con anterioridad: a niveles generales, son los países más desarrollados y potentes económicamente los que más problemas de deuda tienen. Exceptuando casos notables como el de Sudán, Venezuela, la India o Zimbabwe, la mayor parte de países africanos, asiáticos y sudamericanos están en niveles de deuda por debajo del 50%. No es algo que puedan decir muchos países europeos, ni tampoco Estados Unidos o Canadá.
