Atención: este artículo contiene spoilers
Son muchos los que se han visto conmovidos por la serie de Netflix Making a Murderer. Una de las partes que más ha emocionado ha sido la confesión de Brendan Dassey de haber sido parte de un horrible asesinato durante su interrogatorio. Normalmente la gente considera que una confesión de ese tipo es un claro indicador de que el sujeto es culpable ¿Por qué iba alguien a confesar un crimen si no es culpable?
Hay gente inocente que se confiesa culpable de crímenes que no han cometido. A fecha de hoy, el Innocence Project ha trabajado para exonerar a 337 personas en los EE.UU. En 88 de las primeras 325 exoneraciones (un 27 %), el sujeto inocente había confesado, incluso dando detalles sobre el crimen ¿Qué es lo que lleva a una persona inocente a declararse culpable de un crimen?
Cómo se fuerzan las confesiones falsas
La coacción física es uno de los factores más obvios que pueden llevar a una falsa confesión pero es raro que se use en un interrogatorio criminal hoy en día. Sin embargo, la coacción psíquica es una herramienta muy común y poderosa que puede hacer que el sospechoso mienta sobre las pruebas o puede dar a entender a los sospechosos que recibirán un trato más indulgente si confiesan.
En Estados Unidos el método interrogatorio más común que aprende la policía se basa en el método reid, aprovechándose de estas tácticas psicológicas para obtener confesiones de los sospechosos. Este método tiene dos partes clave: la entrevista pre-interrogatorio y el interrogatorio.
Durante la entrevista pre-interrogatorio, el interrogador ha de determinar si el sospechoso está diciendo la verdad cuando niega su participación en un crimen. Los interrogadores que utilizan el método de reid han aprendido que los sospechosos sinceros se diferencian mucho de los mentirosos en su comportamiento. Por ejemplo, los sospechosos que están siendo sinceros se sientan cómodamente erguidos, mientras que los sospechosos mentirosos mantienen una postura rígida o esquiva.
Para un interrogador que conoce el método de reid, simplemente el comportamiento de Dassey hubiera sugerido que sus negaciones iniciales eran mentiras. Pero no existen distinciones tan sencillas entre los mentirosos y los que dicen la verdad. La gente, incluyendo la policía, no es muy buena a la hora de determinar si alguien miente o dice la verdad. La tasa de precisión no pasa del 50/50.
La policía también tiende a ser imparcial a la hora de decidir si una persona está mintiendo. La entrevista previa al interrogatorio del método reid tiene el riesgo de poner a sospechosos inocentes en peligro de ser considerados falsos por los interrogadores que se inclinan a juzgar así a la gente y menos en la precisión de la detección de mentiras. Si el interrogador decide que un sospechoso está mintiendo (y es culpable del crimen), el sospechoso pasa a la fase del interrogatorio, de ahí que el método reid considere a los sospechosos como culpables.
Ahora el objetivo del interrogatorio es el de conseguir una confesión por parte del sospechoso usando una serie de tácticas psicológicas. Por ejemplo, el interrogador tiene que acusar al sospechoso, confrontarlo con pruebas reales o fabricadas y rechazar las negaciones del sospechoso. El interrogador también tiene que empatizar con el sospechoso e implicar que su confesión será recibida con comprensión.
Esta interacción pone al sujeto bajo mucha presión, independientemente de si es culpable o inocente, para que confiese. La predeterminación del interrogador es que el sujeto es culpable y esto es algo que influye mucho tanto en el comportamiento del interrogador como en el del sujeto.
En un experimento, los interrogadores que presuponían la culpabilidad del sospechoso eran más agresivos a la hora de hacer las preguntas e incluso hacían que los sospechosos sonaran más angustiados y a la defensiva según el testimonio de otras personas que estaban escuchando el interrogatorio.
Algunos sospechosos son muy sensibles a la presión psicológica y con su bajo cociente intelectual, Dassey era muy vulnerable. Las personas con alguna discapacidad intelectual cuentan con una gran representación entre las falsas confesiones (demostradas) en los EE.UU.
Estas personas necesitan grandes dosis de aceptación, especialmente si se trata de figuras autoritaria y es algo que se pone de manifiesto en una tendencia a estar de acuerdo, incluso con argumentos que no tienen sentido. La discapacidad mental también es algo que limita la capacidad de la gente para prever las consecuencias de sus actos a la hora de tomar decisiones legales, esto es algo que aumenta considerablemente el riesgo de realizar una falsa confesión.
El método PEACE y el caso Australia
Si bien las falsas confesiones son siempre una posibilidad, los métodos de la policía en Australia hacen que sean menos posibles. En Australia no se utiliza el método reid en parte porque la legislación impide su uso. El método reid promueve confrontar al sujeto con pruebas falsas si fuera necesario y la legislación en Australia prohíbe a la policía mentir a los sospechosos durante un interrogatorio.
El hecho de que la ley en Australia reconozca que los métodos coercitivos usados en los interrogatorios sean problemáticos ha hecho que se utilicen formas diferentes en Australia. En vez de usar el método reid, en Australia la norma es el uso del modelo PEACE (desarrollado en el Reino Unido).
La principal ventaja del modelo PEACE es que la policía ha aprendido a centrarse en obtener información y no en presumir la culpabilidad del sujeto con el objetivo de que confiese.
En Australia no se usa el término “interrogatorio”, sino que llaman al proceso “entrevista de investigación” para enfatizar que la entrevista es una parte del proceso de investigación en curso y para desvincularla de los interrogatorios norteamericanos.
Con estas garantías, la policía australiana prioriza la búsqueda de información y no el conseguir una confesión. Ningún sistema legal es perfecto, pero una legislación apropiada y un buen entrenamiento pueden ayudar en caso de confesiones como la de Dassey.
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Diane Sivasubramaniam, profesora titular de Ciencias Psicológicas en la Universidad Tecnológica de Swinburne
Este artículo ha sido publicado originalmente en The Conversation. Puedes leer el artículo original aquí.