De una forma similar a la que ocurre ahora mismo con Pyongyang, no mucha gente visitaba la capital soviética durante los años siguientes a la Segunda Guerra Mundial. Envueltos en el misterio de la división este-oeste, y también por sus mayores controles de movimiento de los turistas, era raro que los occidentales pudiesen apreciar cómo era la vida en el corazón del mundo soviético.
Uno de los afortunados en poder ver esta realidad de primera mano fue Martin Manhoff, un comandante militar estadounidense que trabajó en la embajada de su país en la Unión Soviética de 1952 a 1954. No sólo estuvo allí de servicio, sino que llevó consigo una cámara con la que pudo hacer fotos a color de las costumbres del pueblo ruso. Eso sí, siempre que los soldados se lo permitieron.
El historiador Douglas Smith ha seleccionado las mejores fotografías de esa colección de los Manhoff que han estado ocultas por más de 50 años. Unos raros tesoros que, mientras buscan algún espacio de arte donde ser exhibidos, se podrán ver en Magnet con el permiso del autor. Son un pedazo de la historia política que no tiene desperdicio.
Todas las fotos de esta selección pertenecen a Mr Manhoff y Douglas Smith. Todos los derechos reservados.
Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com
VER 0 Comentario