2018 fue el año de menor número de nacimientos en España desde que hay registros, en 1941. Cada año nuestro país entra en un saldo negativo de 46.590 personas menos con respecto al año anterior. De seguir así, contaríamos con 5.3 millones de habitantes menos en 2050, según el INE Entre los años 2000 y 2009, aproximadamente, esta tendencia había conseguido paliarse gracias a la inmigración, que venía como mano de obra y se quedaba formando familias.
Después de la crisis, la inmigración voló y perdimos buena parte de ese bálsamo poblacional.
Actualmente el 51% de las mujeres extranjeras está en edad fértil, mientras que, entre las españolas, esta cifra alcanza sólo al 28%. En el contexto actual y de manera urgente sólo la inmigración sería capaz de compensar la pérdida natural de población, un remedio que ya están notando nuestros países vecinos en Europa, mientras que aquí sigue sin ser así.
Una de cada 10 mujeres españolas mayores de 30 no desea tener hijos, un porcentaje que sube hasta las 27% entre las menores de 25 años. Sin embargo, tres de cada cuatro mujeres quieren tener al menos dos hijos. Las "razones laborales", de "conciliación de la vida familiar y laboral" y "económicas" se interponen en su deseo de fertilidad. Las españolas quieren tener hijos, pero, según ellas mismas, el panorama laboral no se lo permite.
Por si fuera poco, España es uno de los países de la OCDE que menos ayudas fiscales ofrece a la formación de familias.
Otro fenómeno relacionado, aunque su impacto no sea el mismo, es el de los menores abandonados. Actualmente hay entre 35.000 y 40.000 menores viviendo en centros de acogida o tutelados por las administración pública. La mayoría de ellos tienen más de 7 años, cuentan con alguna enfermedad o vienen en grupos de hermanos que la administración intenta no separar. Son los “niños de la pasarela” que no encuentran hogares de adopción o acogida.
Se trata de uno de los conflictos más acuciantes de nuestro país, vinculado al porvenir económico común y a la sostenibilidad de las pensiones.
PSOE: más apoyos según la ruta establecida
(GTRES)
Permisos por paternidad/maternidad iguales e intransferibles que se ampliarían a las 16 semanas por progenitor de forma progresiva en los próximos 3 años (actualmente se ha aprobado el de 8 semanas). Racionalización de horarios laborales para apoyar la conciliación, medidas de apoyo para la adopción y el acogimiento y gratuidad de las escuelas infantiles para al menos el 50% de los niños y niñas españoles de cero a tres años, comenzando por las familias más vulnerables.
También cambiarán las consideraciones de familias numerosas: el PSOE quiere que ahora pueda ser numerosa también las familias monoparentales y monomarentales con dos hijos o más y que haya un nuevo tipo de familia numerosa “especial” para quienes tengan cuatro o más hijos.
PP: cheques e incentivos a la adopción
(GTRES)
El PP se compromete a otorgar un cheque familiar de 1.000 euros al año de gasto en guardería y cuidadores para familias con hijos de 0 a 3 años, así como una reducción de cargas fiscales (indeterminada). También ofrece una batería de ayudas institucionales (apoyo a la formación, incentivos de inserción laboral) para madres jóvenes y solteras en caso de riesgo de exclusión. La familia numerosa también saldría reforzada, ampliando los plazos de inclusión y creando una especial a partir del cuarto hijo.
Casado planea un código de buenas prácticas empresariales que fomente contratación de mujeres después de haber tenido hijos y que apoye la conciliación, especialmente mediante teletrabajo y bancos de horas para necesidades familiares. En caso de cumplir los requisitos, las empresas recibirán incentivos que también servirán para dar puntos en caso de concursos de contratación con la administración.
Uno de sus puntos de campaña más polémicos fue su propuesta de no expulsar a las mujeres inmigrantes en el caso de que decidan dar en adopción a sus hijos hasta que entreguen a los pequeños a las administraciones encargadas de gestionar la adopción. Tanto la no expulsión de migrantes como la confidencialidad en los procesos de adopción o informar a las mujeres que buscan abortar sobre sus alternativas son medidas dentro nuestro sistema.
Por último, y en cuanto al fomento de la natalidad inmigratoria, cuentan que "la inmigración puede ser parte de la solución pero no es la solución".
Podemos: reducción general de la jornada completa
(GTRES)
Mismas peticiones que el PSOE, en su misma línea, pero ahondando aún más en las prestaciones sociales.
Permiso de paternidad y maternidad igual e intransferible inmediato de 16 semanas más un aumento de dos semanas al año hasta alcanzar las 24 en 2023. Gratuidad de las escuelas infantiles para menores de 0 a 3 años para el 100% de los niños españoles. Dotación de 1.200€ anuales para el cuidado de menores de 18 años, que llegará a los 2.000€ para las familias en pobreza extrema (incrementable en un 50% para familias de una sola progenitora o progenitor).
Medidas de fomento de acogimiento y adopción, protección de “las distintas realidades familiares elegidas con libertad” (familias LGBT, monoparentales, otras formas de convivencia estables) y de los menores extranjeros (entre otras, prohibir repatriaciones en contra de la voluntad del menor).
La medida que les diferencia del PSOE es, principalmente, la petición de una nueva jornada laboral de 34 horas semanales: 7 horas de lunes a jueves y 6 los viernes sin reducción de salario. También buscarían una mayor flexibilización de horarios y penetración del teletrabajo.
Ciudadanos: autónomos y gestación subrogada
(GTRES)
En la versión del programa electoral para el 28-A que estaba activa en la página de Ciudadanos hasta la semana pasada, el partido proponía un plan de bajas de paternidad y maternidad combinado: 10 semanas personales e intransferibles por progenitor más otras 10 que son transferibles. En el caso de que esas 10 semanas se repartan de forma igualitaria, el Gobierno bonificaría a la familia con otras dos semanas extra para cada progenitor.
También prometen un cheque de 1.400€ anuales para los 2 millones de familias más empobrecidas del país y el acceso universal (aunque no gratuito) a la educación de 0 a 3 años Las mujeres autónomas verían mejorar enormemente sus condiciones: no pagarán las cuotas a la seguridad social en los dos años siguientes a tener hijos, y también en caso de baja previa al embarazo por riesgo médico.
Fomento a empresas para ofrecer guarderías y otros servicios de cuidado infantil en empresas. Más guarderías cerca de los negocios pequeños y pago de cuotas del trabajador contratado para las sustituciones por maternidad y paternidad. Ampliación de los horarios de atención en guarderías y escuelas infantiles. También más actividades extraescolares para adaptarse a los horarios laborales de los padres.
Por último, Ciudadanos no se olvida de su Ley de Gestación Subrogada, aunque no especifican si elegirán un modelo de aplicación libre o específico para casos de altruismo.
Vox, más "familia natural" y menos IBI
Los de Abascal abogan por crear un "Ministerio de la Familia" que proteja sólo a la "familia natural". También darán más prestaciones familiares que nos equiparen a la media europea, como por ejemplo:
Una prestación universal por hijo a cargo para las madres (pero no a los padres) españolas por un mínimo de 100€ al mes, bonificaciones en los gastos domésticos (luz, gas) o infantiles (libros escolares, transporte público), reducir en un 50% el IBI de familias con hijos y una exención para las numerosas. También rebajas fiscales para las empresas en caso de bajas por enfermedades relacionadas con el embarazo.
(GTRES)
Como PSOE y Podemos quieren ampliar el permiso de maternidad, en su caso a 25 semanas (medio año) que se prolongarían a un año en el caso de hijos con discapacidad. Vox también contempla un fomento del teletrabajo y trabajos de media jornada, así como un plan de reincorporación laboral de padres (pero no para madres) que hayan estado cuidando de los hijos
En su programa apuntan a una “defensa de la vida desde la concepción hasta la muerte natural”, lo que puede leerse como un intento de modificación de la vigente ley del aborto. La formación sólo ha hablado de estar en contra del “aborto libre y gratuito” y de los actuales supuestos de libre aborto en las primeras 14 semanas.
Vox promete que ofrecerá información y alternativas a las mujeres “con embarazos no deseados” para que “puedan evitar el drama del aborto”, cosa que ya se hace en el actual sistema de aborto español, por el cual la mujer debe pasar por un periodo de reflexión de tres días hasta la realización de la interrupción, tiempo en el que las administraciones le ofrecen todas las posibilidades que tiene antes de realizar la operación.
Vox no está a favor de revitalizar la natalidad por la vía de la inmigración. Esto se desprende de medidas como las del apoyo a los “trabajadores españoles” con reducciones de un 10% de cotizaciones para las empresas, la eliminación del acceso a la sanidad gratuita para ilegales o suprimir el arraigo como forma de regular la inmigración ilegal, una vía que permite la concesión de nacionalidad a miles o decenas de miles de inmigrantes anualmente.
Por último, algo que puede suscitar controversias con uno de sus posibles socios de gobierno es su plan para “prohibir los vientres de alquiler”, uno de los temas de agenda más publicitados por Ciudadanos.
