Los tanques Leopard se han convertido en el centro del debate diplomático europeo con respecto a la guerra en Ucrania. Hace unas horas, llegaba la noticia de que España se sumará al plan de entregar estos vehículos militares a Ucrania. "Nosotros siempre hemos defendido que tenemos que ir de la mano de todos los países en esta cuestión", explicaba Pedro Sánchez. Sin embargo, este esfuerzo común europeo ha visto hasta ahora algunas resistencias dentro del bloque por parte de países como Alemania.
Veamos por qué son tan importantes y concretamente qué están sopesando tan delicadamente los países para tomar la decisión de mandarlos o no.
¿Qué son los tanques Leopard 2? Krauss-Maffei Wegmann, su fabricante alemán, lo promociona como "el tanque de batalla líder en el mundo". Se trata de un tanque moderno que combina potencia de fuego, protección, velocidad y maniobrabilidad, siendo adaptable en muchos tipos de combate. Los expertos afirman que incluso un Leopard 2 más antiguo vence fácilmente a cualquiera de los tanques exsoviéticos actuales de Ucrania o Rusia en una pelea cara a cara.
Pesa unas 55 toneladas, mide 10 metros de largo y tres de alto. Es capaz de alcanzar los 70 km/hora pero necesita cuatro tripulantes para su uso: un comandante, un artillero, un cargador y un conductor. El vehículo porta un cañón de 120 milímetros que dispara munición que alcanza los 5.000 metros y dos ametralladoras que se controlan de manera digital.
¿Por qué son importantes? Lo primero es que hay muchos en Europa. Se han desplegado más de 2.000 en más de una docena de países del continente y Canadá. Y Ucrania está pidiendo 300 de ellos, decisión que apoyan la mayoría de líderes de la UE. Y segundo, y más importante, que podrían tener un impacto significativo en la lucha contra Rusia, según el Instituto Internacional de Estudios Estratégicos, quienes explican que tales tanques permitirían que Ucrania pase a la ofensiva en un conflicto que se ha estancado recientemente.
Es decir, dichas entregas del Leopard 2 podrían ayudar a equipar a Ucrania con mejores municiones de alto calibre y reemplazar sus propias (y peores) reservas en deterioro de la era soviética y ganar más potencia.
El papel de la UE en los envíos. Polonia y otros países como Finlandia o España han sido de los primeros en comprometerse en enviar tanques Leopard a Ucrania si se alcanzaba un acuerdo entre los aliados. El presidente francés, Emmanuel Macron, dijo que le había pedido a su ministro de Defensa que "trabajara" en la idea de enviar algunos de los tanques de batalla Leclerc de Francia a Ucrania. Y Reino Unido también enviará los suyos.
Sin embargo, Alemania, que posee la licencia de exportación del Leopard 2 y tenía la última palabra sobre si se podían entregar (incluso desde los arsenales de otros países), se había mostrado reticente hasta ahora. De hecho, resistió durante 11 meses los esfuerzos europeos para rearmar a Ucrania con los tanques, señalando que eso intensificaría la guerra.
La decisión de Alemania. Pero tras la intensa presión de sus aliados, sobre todo de Polonia, Alemania no solo ha aprobado exportar a Ucrania tanques Leopard 2, sino que Berlín también donará su propio lote. La decisión marca un hito para Alemania, que pone fin a meses de debate y examen de conciencia, y es la primera vez que los tanques alemanes pisarán el terreno de combate en Europa desde la Segunda Guerra Mundial.
Ha sido, de hecho, el pasado nazi de Alemania lo que ha frenado a los responsables de la toma de decisiones, preocupados de que el aumento de la potencia de fuego a través del despliegue de tanques escale el conflicto.
España se suma a la causa. Sin embargo, Alemania no estará sola en el rearme de los batallones ucranianos. Y entre los que también aportarán su grano de arena está España. "No se entendería que estuviéramos en otro lugar. La posición es estar con nuestros aliados", afirmaba el ministro de Presidencia, Félix Bolaños. Nuestro país se sumará a la entrega de tanques Leopard a Kiev para dotar a su Ejército de un sistema capaz de contrarrestar la potencia de fuego rusa.
Según se indica en este artículo de Europa Press, el Ejército español es uno de los que más carros de combate Leopard tiene, 347 en total. De esta cifra, 239 corresponden al modelo Leopard 2E, fabricado en España, y 108 son Leopard 2 A4, comprados de segunda mano a Alemania en 1995.
Imágenes: Wikimedia Commons