Vivimos en un mundo donde la tecnología nos ha orillado a querer saber todos los detalles de nuestra actividad física, por ello los cuantificadores personales han sido tan exitosos. El tener un dispositivo que nos diga cuánto caminamos o corrimos, cuál ha sido nuestro ritmo cardíaco, si dormimos lo suficiente, o cuántas calorías quemamos, se ha vuelto indispensable para muchas personas. Pero si a esto le sumamos la capacidad de compartir nuestros logros y actividad con otros amigos, o desconocidos, entonces estamos ante el negocio redondo.
Pero aquí está entrando otro factor que empieza a ganar terreno en este sector, que es el de la actividad sexual, donde han surgido una gran cantidad de dispositivos que prometen medir nuestra actividad e incluso compartirla y compararla con otros usuarios alrededor del mundo. Hoy estamos ante un nuevo dispositivo que precisamente promete todo esto y más, el cual se promociona como "el primer condón inteligente" y que está causando revuelo en todo el mundo.
i.Con
La compañía British Condoms está finalmente poniendo a la venta su i.Con, el cual fue presentado en junio del año pasado donde nos adelantaban que estaríamos ante "una revolución de la tecnología wearable en la cama". Aunque la compañía lo anuncia como "condón inteligente", en realidad se trata de un anillo que se ajusta a la base del pene.
Habrá que tomar este invento con reservas, ya que la compañía sólo ha presentado la caja y el diseño del dispositivo sigue siendo todo un misterio. Entre las bondades que promete este anillo está el medir diversos aspectos de nuestra actividad sexual, como duración, velocidad, calorías quemadas, circunferencia del pene, frecuencia de las sesiones sexuales, cantidad de penetraciones y hasta número de posturas usadas.
Se dice que el anillo es ajustable y se puede usar en repetidas ocasiones. Su diseño es en goma sintética y en su interior hay un pequeño componente de fibra de carbono que aloja los componentes electrónicos. Cuenta con un puerto micro USB para recargarlo y tenerlo listo para la siguiente sesión, su batería tendrá una duración de entre seis y ocho horas en uso continuo.
La compañía asegura que incluso es capaz de detectar clamidia y sífilis. Pero lo más interesante, y que no podría faltar en un dispositivo tecnológico, es su enlace con nuestro smartphone a través de una aplicación móvil, la cual nos permitirá conocer todos los detalles de nuestra actividad sexual, e incluso compartirlo en redes sociales, o bien, entrar a una especie de comunidad donde podremos compararnos con el resto de los usuarios.
El i.Con se puede reservar de forma directa en la web de la compañía por un precio de 59,99 libras (74 dólares), y lo más impresionante es que según la compañía ya han recibido más de 90.000 reservas. Se espera que este anillo se entregue hacia finales del año, momento en el que sabremos si todo es cierto o es una broma muy elaborada.
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