Las impresoras 3D se han convertido en una tecnología bastante curiosa a la que muchos le siguen la pista. La posibilidad de imprimir cualquier objeto 3D abre un mundo de posibilidad y aunque a priori parece que su uso se limita a lo lúdico hay quienes buscan en ella nuevas formas de producir que, entre otras cosas, reduzca costes y haga que sea más fácil.
Utilizando este gadget, un equipo de investigadores ha creado WREX, un exoesqueleto que sirve como prótesis para niños pequeños con discapacidad y problemas a la hora de coger objetos. Un proyecto interesante que no busca postularse como una panacea médica sino más bien como una alternativa a la hora de crear este tipo de equipos médicos.
Para demostrar su efectividad, sus creadores han grabado un pequeño vídeo donde podemos ver la utilización de este exoesqueleto en una niña con artrogriposis, una enfermedad congénita que afecta a uno de cada 3.000 nacimientos y se caracteriza por una serie de contracturas de nacimiento que afecta desde las extremidades a las articulaciones.
La posibilidad de imprimir rápidamente las piezas hace que según vaya creciendo el niño se puedan introducir piezas nuevas de forma sencilla. A día de hoy, quince niños utilizan WREX para hacer su vida un poco más fácil. No pretende ser una solución definitiva a la artrogriposis pero el proyecto es un paso más en resolución de este problema.
Vía | The Verge