El ejército chino ha sido autorizado para utilizar la vacuna desarrollada por CanSino Biologics y sus propios investigadores del instituto de investigación de la Academia de Ciencias Militares, según explicaba la propia empresa. Hace ya un mes, la empresa biotecnológica publicó los primeros datos de los ensayos llevado a cabo tanto en China o en Canadá. Sin embargo, no se esperaba este movimiento. Al menos, no tan pronto.
Sobre todo, porque, aunque sabemos que China ya estaba ofreciendo vacunas experimentales a la gente que salía de su territorio, lo que tenemos son preguntas. Por la información de la que disponemos, parece que la vacuna de CanSino no ha terminado de la ruta habitual de los ensayos clínicos y, por otro lado, no sabemos cuál será su uso.
No sabemos casi nada de esta vacuna (y así va a seguir siendo)
El Ad5-nCoV, la vacuna de CanSino, es uno de los ocho candidatos chinos que habían conseguido llegar a pruebas con humanos. De hecho, estas pruebas también estaban llevándose a cabo en Canadá por lo que confiere de una mayor seguridad en relación con los estándares biomédicos occidentales. No obstante, la afirmación de CanSino de que "los ensayos clínicos demostraron que era seguro y mostró cierta eficacia" y la misma falta de datos nos hacen pensar que no se ha estudiado si su uso aporta algún extra frente a lo que ya se viene haciendo.
Es decir, no hay Fase III del ensayo. Y esto es bastante irregular porque lo que significa es que China ha aprobado su uso por un año sin tener suficientes datos que avalen no ya la ausencia de efectos secundarios raros, sino que su uso merece la pena. No obstante, junto con la vacuna de la Universidad de Oxford, la de Sinopharm y la de la compañía estadounidense Moderna, la vacuna de CanSino era una de las más avanzadas. El problema es que CanSino se escuda en 'secretos comerciales' para no dar toda la información que nos gustaría tener.
Por ejemplo, como explicaba Reuters, CanSino se negó a revelar si la vacuna iba a ser obligatoria u opcional para los soldados chinos. Esto podría hacernos pensar que es posible que la aprobación de uso para el ejército esconda también una forma extraña de recabar la información que falta e intentar proteger al ejército por el camino (toda vez que sabemos que es segura). Algo que nos ayudaría a entender el alcance del movimiento del Gigante Asiático.
Hasta el momento, ninguna vacuna ha sido aprobada para su uso comercial y solo tres de ellas están en fase III ¿Qué podemos esperar de la Ad5-nCoV? A corto plazo, no se convertirá en la vacuna que todos estamos esperando. Aunque puede que esto le ayude a conseguirlo: No debemos olvidar que China tiene más de dos millones de soldados y el uso generalizado de la vacuna en este colectivo podría aportar información fundamental para que se convierta en una vacuna con todas las garantías.
Sea como sea, es algo raro. En movimientos como este se ven los límites de la investigación actual. En general, la carrera por obtener la vacuna antes que nadie está llevando a tomar decisiones que en condiciones normales no tomaríamos. Para lo bueno y para lo malo.
Ver todos los comentarios en https://www.xataka.com
VER 40 Comentarios